Rey De La Mafia #2

Extra 4.

Angel.

Mi teléfono suena en la mesa de noche y vagamente estiró la mano para tomarlo.

_Si.

_Acaso no podré volver a ver a la hija mía.

Mi madre habla a través de la pantalla.

_Si má solo serán unas semanas más, yo la cuido más que a mi mismo.

_Bueno está bien, pero me la traes.

_Si mamá.

Suelto el celular y abrazo a Paulina aún más contra mi.

Me he quedado con la bebé luego de 2 meses que mi madre le dio a luz, ya tiene dos semanas conmigo y hoy cumplirá 3 meses así que Paulina organizará una pequeña fiesta entre familia.

Yo solo tengo que comprar todo lo que ella me diga.

Para cuando despierto son las 11 de la mañana. Me levanto cómo los perezosos y lanzo la vista a la cuna, la bebé duerme tranquila pero tendre que desperla más tarde.

Aprendí a cambiar pañales y muchas cosas cuando se trata de bebés.

Solo lo hice para cuidar de mi hermana.

Entro al baño y abro la ducha, segundos después Paulina entra conmigo y las ganas de tenerla surgen.

Beso su cuello y hombros y luego lamo uno de sus senos.

La pongo de espaldas y me introduzco en su entrada.

Tener sexo con Paulina es como hacerlo con una diosa.

Nunca tengo miedo de hundir mi boca en su entrada, siempre está higiénica y huele delicioso.

Me muevo rápido cuando ella me lo pide y sujeto su cabellera negra con fuerza.

Sus gemidos me aclaman más y más

Derramó mi semen en sus nalgas redondas y ambos salimos cuando escuchamos el llanto de la bebé.

Paulina la baña, la cambia y le da su desayuno mientras yo voy escribiendo lo que ella va a utilizar para la fiesta.

Una vez todo listo salgo en uno de mis autos con mis hombres detrás. Tomo mis lentes y me los coloco.

Me parqueo en la primera tienda para niños que encuentro y los paparazzi no tardan en aparecer preguntándome si tengo hijo o por qué estoy en la tienda para niños, los ignoro a todos y me voy directo a los globos rosas.

Tomo 5 paquetes rosas y 5 blancos y un montón de cosas más. A  otra esquina están las ropas para niños y niñas y un pequeño vestido se ilumina como en las películas.

Es color rojo y simplemente presioso.

Miro la fila que es más larga que mi pene y solo me digo que no haré esa fila.

Paso de largo por todas las personas y dejo todo lo que escogí en el mostrador.

_Lo siento señor pero tiene que hacer la fila.

Le paso una ruedita de billetes de 100 y lo duda un momento antes de empezar a pasar todo.

_Son 70 dólares.

Le doy un billete de 100 y sigo mi camino.

Al estar en casa Paulina se queda preparando todo con Maritza mientras yo tomo la bebé en mis brazos.

Le cambio el pañal y le coloco el vestido con unos zapaticos monos.

Su piel blanca y el vestido rojo le queda divisno.

Una hora después todos llegaron.

Mi tío, madre, padre, y Robert.

Mi mamá se fue directo a la bebé y halago lo bonita que estaba.

_Ya está toda gorda, no la quiero.

_Yo me la puedo quedar.

La cargo entre mis brazos y ella comienza a reírse mostrando sus pequeñas ansias.

_Angel puedes venir por favor.

Le doy la bebé a mi mamá y me guio hasta la mesa donde hay varios regalos.

Todos me miran cuando Paulina me pasa una pequeña caja de regalo.

Me encojo de hombros y la abro.

Hay varios papeles y los levanto uno a uno.

Prueba de embarazo cuantitativa.

Positivo.

Miro a Paulina quien tiene los ojos llorosos y yo solo suelto todo y me lanzó a ella.

Le lleno la cara de besos y la sigo besando importandome poco los presentes.

_O por Dios voy hacer papá.

Todos aplauden y yo casi lloro.

No puede ser voy hacer papá.

Ángel Ross el soltero más codiciado será papá.