Hoy me tocaba revisión medica, el doctor del pueblo me ha dicho que todo esta perfecto y que Candela crece por momentos. Le he pedido a Julia que si podía acompañarme y encantada ha venido conmigo a la consulta. Cuando hemos salido de allí hemos decidido bajar al Chiringuito del Ayo para contarle a Dylan que todo estaba perfecto. íbamos caminando por las calles del pueblo cuando han llamado a Julia desde lejos, al girarnos he visto que se acercaba a nosotras una chica que me ha recordado un poco a Beatriz, al principio pensé que era ella pero a medida que la chica se ha acercado a nosotras me he dado cuenta de que no era Bea.. Atrás de ella iban cuatro chicos que iban armando un poco de ruido, iban hablando y riéndose fuerte y armando escándalo. Mientras esa chica ha llegado hasta nosotras y Julia nos ha presentado, resulta que ella es Rocio, la novia de Pancho. Le he dado dos besos para saludarla mientras ella reía y no paraba quieta.
-¿Cómo va Julia? – le ha dicho pero no enfocaba la mirada – Me ha contado Pancho que ya estáis toda la pandilla reunida de nuevo, ¡Que alegría! ¡Que ilusión! ¿No?
-Si, por fin tengo a mis chicos juntos de nuevo. – ha dicho Julia pasándome el brazo por mis hombres.
Entonces Rocio se ha girado y les ha dicho a los chicos que iban con ella:
-¡¿habéis oído chicos?! ¡Por fin los amigos de mi novio están juntos de nuevo!
-¡Bien! - han contestado todos gritando como si hubiese marcado un gol el equipo de fútbol al que están animando.
-¡Y ahora aun veré menos a mi novio! – ha gritado ella de nuevo
-¡Bien! – han vuelto a gritar la cuadrilla mientras se reían, viendo este espectáculo me sentía avergonzada por Julia primero y por mi después, era como si se estuvieran cachondeando de nosotros.
-¿¡Pero sabéis que!? – gritó de nuevo Rocio.
-¡¿Qué?! – gritaron de nuevo riéndose a carcajada limpia.
-¡Que mejor! ¿Mientras él anda con su pandilla, yo soy libre para salir de fiesta con vosotros cuando me de la gana! Así que ¡Fiesta! – y dicho esto se dio la vuelta sin despedirse de nosotras y se dispuso a largarse con ellos.
Antes de que se alejara yo me adelanté y la enganché del brazo haciéndole girar para que me mirara y con toda la rabia que tenia en ese momento por la situación le dije:
-Mira chica, no se quien eres ni te conozco pero déjame decirte que no sabes la suerte que tienes de estar con Pancho, es un buen hombre y si no te espabilas lo vas a perder. Es un consejo que te doy.
-Desi, ¿No? ¿Así es como te llamas? Bien Desi, te voy a decir tres cositas muy claritas para que me entiendas: Ni tu me conoces ni yo a ti, ni sabes mi historia con Pancho Así que por favor no te metas. Segundo, ¿Qué pasa que te quisiste ligar a mi novio y no pudiste? Y ahora te da rabia porque como estas preñá no tienes posibilidades con él ya que estas fuera del mercado. Y tercera y ultima no sabes nada de Pancho, no lo has vuelto a ver en estos años Así que no puedes saber si es un buen hombre o no. Y déjame en paz.
Dicho esto se deshizo de mi brazo y se fue a reunirse con la cuadrilla que le acompañaban mientras gritaban:
-¡Fiesta! ¡Fiesta! ¡Esta noche hay fiesta!
Me di la vuelta y volví donde estaba Julia.
-Julia, lo siento, siento que te hayas tenido que ver en una situación Así. Esta chica no se merece a nuestro Pancho. ¿Has visto como habla de él? – le dije a Julia, quien estaba algo triste.
-Si, Desi pero son cosas de pareja no debemos meternos en esto. Pancho ha hecho su vida y ella es parte de ella, nosotros no podemos llegar como un huracán y destrozarle la vida que él se ha construido.
-Tienes razón Julia, pero no creo que Pancho sea el hombre que me ha querido pintar esta chica.
-Hazme una promesa Desi. – Yo moví mi cabeza diciéndole que si – Prométeme que no vamos a contarle nada de lo que acaba de suceder a Pancho, no quiero que ellos tengan problemas por nuestra culpa, esta Rocio no es la misma que conocí cuando llegué al pueblo, la misma que me invito a cenar a su casa.
Claro que no era la misma persona, seguramente cuando Julia fue a cenar a casa de ellos, Rocio estaba en estado normal y hoy iba puesta hasta las trancas, no sabría decir si iba borracha o de algo mas.
Cuando llegamos al chiringuito, Dylan nos tomó nota y cuando nos trajo dos refrescos que habíamos pedido, le dije que veníamos del medico y que todo iba estupendo, me dio un beso en los labios y tras despedirse de Julia volvió a su trabajo. Un rato después Pancho, que también estaba trabajando se acercó a nosotras y nos dijo que la pandilla habían quedado esa noche para salir a algún pub del pueblo. Le dije que hablaría con Beatriz y que si ella se apuntaba, igual Dylan y yo nos animábamos también. Cuando hablé con ella, me dijo que si que iban a ir, dejarían a los niños en casa de Tito ya que María, la mujer de Tito se quedaba con sus hijos, no le importaba que Bea llevara a los suyos, y luego vendrían. Así que esa noche después de cenar y reunirnos todos nos fuimos al mismo pub donde años atrás vi a mi padre ligando con otras mujeres, ese día entendí que mis padres jamás volverían a estar juntos de nuevo.
Así que allí estábamos, en el mismo pub donde años atrás empecé a descubrir quien era realmente mi verdadero padre y no ese al que yo creía conocer y admirar. Años atrás descubrí toda la verdad.
Esa noche estábamos allí los chicos, Bea y Mario, y Dylan y yo. La noche empezó con muy buen pie, todos bebían, nos reíamos y bailábamos, unos mas que otros, porque en mi caso mucho no podía hacer. Pude advertir las miradas que se echaban de vez en cuando Bea y Pancho, es verdad eso que dicen que el primer amor nunca se olvida y siempre lo recuerdas con especial cariño, creo que eso es lo que les pasa a ellos.
Todo iba bien hasta que un desafortunado comentario de Quique hizo estallar la bomba. Hasta tal punto llegó la discusión que Pancho y Piraña tuvieron que separarlos y al final entre lagrimas de rabia y puro dolor, Javi acabo diciendo:
-Te tiraste a mi mujer, tío. ¿Cómo quieres que me olvide de eso y que haga como si nada?¿¡Eh!? – todos los que estábamos allí nos quedamos sin respiración, sabíamos que lo que les pasó era muy importante para Javi, pero nunca imaginábamos eso. – Si, chicos si, Quique se lió con mi mujer y ¿sabéis como me entere? Pues porque yo mismo los pillé. ¿Verdad, Quique? Que lastima que llegara tan pronto a casa esa tarde. Ahora ya sabéis la verdad.
Nadie pudo decir nada, Pancho cogió a Javi del brazo y salimos del local. Quique se fue por otra calle solo, andando hacia su casa. Los demás nos repartimos entre los coches de Dylan y Pancho y nos fuimos cada uno a su casa. La primera salida nocturna de la pandilla había sido una absoluta decepción.
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Verano azul, ahora y siempre
FanfictionQue pasaría si 20 años después la pandilla volviera a reunirse? No te pierdas como han cambiado las vida de Javi, Quique, Pancho, Beatriz, Julia, Desi, Tito y el Piraña. Te recomiendo haberte visto la serie Verano azul primero. Serie televisión esp...