___ Volkov hija de un ruso mafioso se va a vivir a Japón con su mejor amigo Kokonoi quien le ofreció administrar su brudel, ___ se encuentra con cosas realmente desagradable y decide hacer algo para cambiar eso sin saber el costo que le traerá...
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Caminé a mi oficina para encontrarme con el menor de los Haitani, me debía entregar la carpeta con los personas que había matado, generalmente Manjiro les suele dar más plazo para eliminar a los que le deben deudas pero yo solo les doy un plazo de tres días, los Haitani disfrutan asesinar y eso me facilitaba las cosas.
Con que ellos hicieran su trabajo a tiempo no tendría ningún problema con mis registros diarios que debía de entregarle a Manjiro.
Un suave golpe se escuchó tras de la puerta.
- Adelante - respondí desde el asiento sin despegar los ojos de la computadora.
- Permiso ___, aquí tienes nuestro trabajo terminado y con evidencias - Rindou extiende la carpeta hacía mi.
- Perfecto - recibí la carpeta y la abrí- Toma asiento.
Rindou tomó asiento mientras esperaba que yo terminara de ver la carpeta, veía las imágenes que los Haitani tomaron para dejar de evidencia y eran bastante fuertes a diferencia de otras veces que los había mandado a saldar deudas.
- Supongo que por la manera en las que mataron a estas personas tendré que pagarles más dinero - reí levemente.
- Me gusta que nos estemos entendiendo - Rindou se cruzó de piernas.
- No hay problema, le entregaré esto a Manjiro - señalé la carpeta - Y les haré el pago en sus cuentas bancarias.
- Es un placer trabajar contigo, espero que sigamos trabajando juntos en un futuro - sonrío y se levantó del asiento - Hasta pronto Volkov - fue lo último que dijo antes de salir de mi oficina.
Pase los nuevos archivos a la computadora y se los envié a Mikey por correo, salí de mi oficina y caminé unos cuantos pasos para llegar a la oficina de Manjiro, por el pasillo se oían unas risas desde su oficina.
Estaba a punto de tocar la puerta cuando esta se abre y quedo cara a cara con la mujer que Kokonoi me había dicho que debía matar.
Nuestras miradas eran serias y la incomodidad era obvia.
- ¡___! - exclamó Mikey al verme en la puerta.
Mi mirada cambio en dirección hacia Mikey y entré a la oficina.
- Te presento a Laila - la señaló con la mano - La novia de Haruchiyo.
Oír las últimas palabras fue como si me hubiesen tirado un jarro con agua fría, probablemente mi cara desfigurada en este momento era bastante obvia, la mirada de esa tipa analizándome de pies a cabeza no era nada disimulada.
- No sabía que le debías de dar explicaciones a las prostitutas - dice Laila con una mueca de desprecio.
Quería lanzarme a golpearla y matarla aquí mismo pero le prepararía algo mejor para después.
- Volkov no es una prostituta - respondió Sanzu cargado en el marco de la puerta - Es la administradora del burdel, ¿Por qué crees que cada mujer que está aquí es como tú, Laila? - su tono de voz era molesto.
