3. Poción de amor.

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Las ovaciones por el cambio de look de los merodeadores y de un par de serpientes continuaron por tres días, en el cuarto día las serpientes exigieron a Lily que los dejara como antes pues a pesar de que habían recibido bastantes halagos ya era suficiente.
Ese día viernes les tocaba pociones a ultima hora, después del almuerzo, algo que muchos de ellos disfrutarían si no compartieran clase nuevamente con los Gryffindor que también tenían el cabello normal ahora.
Como primera clase del año el profesor dio la bienvenida a su hijo y a un par de estudiantes avanzados en su clase, un orgullo para su club de eminencias, el joven Regulus Acturus Black y Bartemius Crouch Junior.
—Bien, ya que todos se conocen harán grupos de cuatro y en esta ocasión trabajaremos con los filtros de amor, como podrán notar en los distintos calderos hay tres diferentes filtros de amor, la primera es Amorius, la segunda Eronedis y la tercera Amortentia ¿alguien puede mencionar la característica de cada una?—pregunto observando a la clase y como menos lo esperaba la señorita Evans levanto la mano antes de Gideon Zabini.
—El Amorius es una poción para mantener enamorado a una persona por poco tiempo o simplemente para causar leve interés en la persona que lo crea, y ese interés es provocado viendo un pequeño brillo en la persona en específico.
—El segundo Eronedis es para despertar un interés sexual en una persona o un encaprichamiento en la persona— interrumpió Zabini pues si bien no era por presumir su abuela Mirell Zabini había creado aquella poción con ayuda de un antecesor Potter—. Es más una Poción no tanto de amor sino de lujuria y obsesión no muy fuerte que no dura demasiado.
—Y por último, la Amortentia que es el filtro de amor más poderoso, aunque no crea amor de verdad pero si un potente encaprichamiento u obsesión, lo interesante de esta poción es que puedes percibir un aroma o varios aromas que atraen a la persona lo suficiente como para sentir amor por ella por ejemplo, señor Crouch podría acercarse y decirnos lo que huele por favor.
Pidió el profesor Slughorn que fue más una orden que una petición, Barty se acerco al caldero que desprendía vapor rosado y sintió un dulce aroma a Melaza.
—Bueno yo... Percibo un aroma a galletas, melaza de moras... Grajeas de todos los sabores, a bosque... Un aroma a tierra mojada muy agradable y a...— se detuvo antes de decir lo último, había pasado varios años reconociendo el mismo aroma aunque bien no podría ser perfume, era un olor natural, el agradable shampoo que sabia usaba ese merodeador "Peter... Colonia de Peter sin duda, shampoo de vainilla" pensó pero no podía decir aquello, no así—. Y a... Vainilla suave...
—Perfecto, algo interesante saber que le gusta la Melaza de moras señor Crouch, pero como sabrán no todos percibirán el mismo aroma, pues este cambia de acuerdo a cada persona, bien el trabajo es simple, realizar dos o uno de los filtros de amor, pueden realizar el Eronedis y Amorius juntos o preparar solamente la Amortentia eso depende de ustedes pero deben ser pociones perfectas, y los que elijan realizar Amortentia en un pergamino deben escribir los aromas que perciben.
Terminó de explicar y dio por iniciada las pociones, por supuesto el grupo de cuatro amigos inseparables fueron los merodeadores, Lily había decidido realizar la poción junto a Marlene, Dorcas y Alice, por lo tanto en el grupo de serpientes quedaron Severus, Barty, Regulus y Dylan.
—Bien, les aviso que soy un desastre en pociones— habló el joven Slughorn esperando que su padre no lo oyera, fueron los cuatro a buscar sus ingredientes como el resto de los estudiantes habían hecho, y empezaron, habían decidido realizar la más difícil pues querían saber en el fondo a qué olería su poción aunque Barty ya lo supiera.
—Espera, espera. No le pongas eso Dylan eso va después de las crisálidas de mariposas monarca— explicó Snape leyendo su libro y haciendo algunas anotaciones, no era broma cuando dijo que era un desastre pues la poción de Dylan no estaba para nada como la de Severus, no tenía el tono rojizo que debía tener sino uno naranja, y burbujeaba de forma peligrosa, sus compañeros lo notaron y de inmediato trataron de ayudar cambiando su poción y logrando al fin que obtuviera el tono correcto antes de agregar el ultimo ingrediente los pétalos de rosas perfumadas, con eso tomaría un color rosa y dependía de la potencia, en el caso de los tres más listos tenia un tono rosa suave, en caso de Dylan un tono de rosa intenso, se podía ver el peligro en esa poción, tomaron sus pergaminos y empezaron a escribir el olor de su amortentia.

En otra mesa por pura competencia los merodeadores habían decidido también realizar la Amortentia aunque algo desconcentrado Peter trataba de realizar la poción correctamente sin dejar de pensar en lo que había dicho Barty, era sin duda algo que le daba vueltas.
—No, ¿que haces?, no es así, aquí dice que los pétalos van cortados no enteros, Sirius— regañó Remus a su compañero que hacía sin interés la poción, por otro lado James se esforzaba por hacerlo bien, no por las notas sino porque quería darle un uso a su poción, aunque no sabia con quien hacerlo, Lily no estaría nada mal pero no quería enamorarla de ese modo.
Como si leyera su mente Sirius se quedó observando a su amigo y le dedicó una sonrisa cómplice antes de hablar.
—¿Y si usamos las pociones para ver si funcionan?— preguntó Sirius hipotéticamente, claro, Moony no había dicho nada para negarse Peter aun estaba distraído aunque sabían que para complacerlos estaría de acuerdo, con un levantamiento de hombros y un asentimiento de cabeza estuvieron dispuestos a usarlos tal vez no ahora ni en ese mismo año pero los usarían.
En otra mesa no se podía más que escuchar las risas de las serpientes pues a pesar de estar en clases y los constantes regaños del profesor siguieron con la charla y las anotaciones, echaron una pluma a cada poción y esta se deshizo formando un vapor en forma de corazón el resultado final que había resultado en todos los calderos con Amortentia en las otras pociones era la misma con un color rojo intenso (Eronedis) y un violeta suave (Amorius).
Las risas venían de la redacción de cada serpiente.
En el pergamino de Severus leído por Barty, ponía: —Libros nuevos, cuero, humedad, libertad, whisky de fuego y un aroma dulce a vino.
El pergamino de Regulus había sido discreto pues lo leería Severus y no quería ser bastante evidente: —Haber... Dice... Shampoo natural, lirios, pergamino, fuegos artificiales, menta, y margaritas.
El de Dylan por supuesto lo leería Regulus aunque no había mucho que leer o nada que no hubiese leído Severus: —Pergamino, shampoo de flores, menta, lluvia y... Caramelo.
—Vaya cuarteto que somos, casi tenemos los mismos gustos— dijo riendo Barty, aunque si lo pensaba bien no tenia mucha gracia sonrió después de las carcajadas ya casi todo el mundo había terminado sus pociones.
Los merodeadores no se podía decir más que estaban desconcertados era la primera vez que escuchaban carcajadas por parte de las serpientes, y verlos tan felices les revolvía el estómago, cada quien leyó su pergamino para asegurarse de que estuviera bien y de comprobar sus pociones.
Ninguno quiso hacer la dinámica de las serpientes, que otros leyeran el suyo sin embargo cada uno leyó el propio:
—Yo Huelo... Shampoo natural, asfodelo, menta y... Cerveza de mantequilla —hablo primero Sirius algo serio pensando en quien o de quien podría ser ese olor.
—Yo... Madera de roble... Cuero fino, chocolate y colonia cara— habló Remus que provocó una risa en los demás pues sabían su amor y obsesión por el chocolate además que le ayudaba mucho en luna llena.
—El mio a libros nuevos, a campo de quidditch, al parecer todos amamos la menta y café —dijo James— al parecer estoy enamorado de mi mismo.
—Yo... Yo Huelo... Huelo a... Abetos, libertad, a melaza de moras, girasoles y hay un aroma que no reconozco pero es como algo dulce y ácido a la vez creó que es... Ciruelo...— terminó Peter algo inseguro, temeroso de que alguno de sus compañeros se riera y así fue aunque no se reían de él sino de todo lo que habían escrito todos.
Todos los estudiantes entregaron sus pergaminos y el profesor pasó caldero por caldero par revisar cada poción.
—Bien ahora pueden llevarse una muestra de sus pociones y el resto ponerlos en frascos con el nombre de la poción y de los creadores ¿queda claro? Eso es todo por hoy diez puntos para todos, pueden retirarse después de tener los frascos listos, la próxima clase harán la poción que no hicieron en esta clase.
Y así terminó el día viernes en clase de pociones, todos satisfechos por llevar una muestra de sus filtros de amor, muchos con intención de solo guardarlos y otros con intención de usarlos.
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Olvide que era lunes... Disfrutenlo.

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