Jaden: Estoy afuera bombón ;)Después de la pequeña discusión que tuve con Aarón, no pude evitar pensar que intensiones tendría Jaden conmigo.
Si bien se que Jaden no tendría una relación conmigo ya que no soy para nada su tipo, comparada con las chicas populares de Belmont con las que suele salir.
Pero tal vez solo estoy sobre pensando todo y solamente es una cita de amigos para compensar lo que paso el otro día en la fiesta.
Me doy una última mirada en el espejo de cuerpo entero de mi habitación antes de bajar las escaleras.
Aunque todavía quedan algunos días calurosos, las noches por lo regular suelen tener un aire un poco más fresco.
Pero al parecer hoy no es de esas noches ya que hace mucho más calor.
Así que opte por ponerme un vestido amarillo con margaritas como diseño que se ajusta a mi cintura, pero al bajar es un poco más suelto permitiéndome un poco más de libertad. Decidí combinarlo con unos tenis blancos para darle un toque más casual.
Bajo las escaleras y me despido de mamá.
- Cuídate cariño, llámame si necesitas algo ya sabes dónde encontrarme.
- Si mamá prometo llamarte cuando regrese a casa.
Al tomar mis llaves y salir de casa veo a Jaden recargado en su auto. Al escucharme el rubio alza la mirada y me regala una sonrisa de lado. - Vaya bombón, creí que me habías plantado en tu propia casa.
Suelto una risa. - Vamos Jaden que se nos hace más tarde.
Jaden abre la puerta del copiloto para que yo suba y cuando cierro el ya está en su lugar mirándome como si detallara cada parte de mí.
- Sabes bombón deberías ponerte esos vestidos más seguido, te quedan genial. - Dijo mirándome de arriba abajo.
Solo me quedé mirándolo y no pude evitar sonrojarme por lo que solo susurré un <<gracias>> y volteé a ver la ciudad por la ventana del auto.
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El primer corazón © ✔️ #1 - Saga Four Hearts.❤️
RomancePara Daly Black su segundo año de preparatoria es como cualquier otro, nada por descubrir y enamorada del típico chico imposible del que todas se enamoran, con grandes amigas y hasta la fecha 0 corazones rotos. Ella no esperaba nada de nadie. Ella n...