Después de una maravillosa semana con mis padres, nos vamos a visitar a sus padres. Les pedimos a los míos que no les dijeran nada, queríamos darles una sorpresa, por lo que tendremos que irnos en Uber desde el aeropuerto hasta la casa. Pensábamos contarle a Sara, ella también estaría allí, pero Nicolette se arrepintió para no interrumpir sus vacaciones con su novio.
Cuando mis padres se despidieron de Nicolette fue muy emotivo. Estaban encantados con ella, incluso ese día que ella vio la foto de sus padres y él mío abrazados en el muelle se emocionó mucho, porque dijo que en casa hay un cuadro pintado de esa fotografía. Y ahí el emocionado fue mi padre.
Nos despedimos con un hasta pronto. Nos veremos nuevamente para navidad, aunque aún no sé cómo lo haré ya que también quiero estar con ella.
Aún me duelen un poco las heridas, las personas por la calle me miran, sobre todo por la férula en mis dedos. Deben decir "a este le dieron la paliza de su vida" y así fue. Las costillas aun me duelen, pero tengo un corsé ortopédico que me ayuda bastante, además de los medicamentos. Pero hay varias actividades que me prohibieron hacer hasta que sanen, y una de ellas está hacer el amor y fumar.
Me duele mucho más la primera. Tratamos de hacer caso en todo, es difícil, sobre todo si dormimos en la misma cama y con tanta tentación encima es casi imposible decir que no. pero de que duele, duele y mucho. Así que comenzamos algo que no puedo terminar.
Pero bueno, son solo seis semanas, podemos esperar a que sanen bien y ahí sí que haremos temblar la casa.
Llegamos al aeropuerto. Pensé que lo recordaría, pero siento que todo es nuevo, los paisajes son hermosos, sobre todo camino a su casa. Entramos en un bosque, que tiene un camino de asfalto que según lo que dice Nicolette solo llega a su casa. Nos bajamos antes de llegar. De lejos podía verla, pero no veía la laguna. De repente cuando llegamos afuera había una mujer arreglando las rosas del jardín. Cuando se levanta y nos ve, abre sus ojos sorprendida. Ella debe ser su madre, es como un rayo de luz que baja entre las nubes negras.
Nicolette pone su dedo en la boca en señal de silencio y corre a abrazarla. Lo hacen durante un buen rato ambas con lágrimas en los ojos. Luego ella me mira con ternura. Me sonríe y se acerca a abrazarme. Yo me quejo cuando lo hace, así que pone su mano en mis costillas haciendo un puchero. Luego me besa la mejilla mientras cruza su brazo sobre mi espalda. Ella es de baja estatura, yo diría que más baja que Nicolette. Pero es hermosa, como dijo mi padre, Nicolette es el vivo retrato de su madre. Caminamos un poco y cuando avanzamos la veo, y me enamoro. Allí estaba la laguna, tras la enorme casa, ahí estaba brillando con el sol, resplandeciente, con ese muelle pequeño de madera. Tal como lo vi en mis sueños, tal como lo recordaba. Al final del muelle, un hombre sentado con una caña de pescar en su mano. Ese debe ser su padre. Nos acercamos y Nicolette camina hasta la orilla sin pisar el muelle.
- ¿Te apuesto que llevas solo ramas? – le grita.
Él se gira rápidamente y se levanta corriendo donde ella. La toma en sus brazos mientras Nicolette gritaba "¡Papi!"
Lloraban abrazados, cuando se sueltan él me mira, tiene los mismos ojos que Nicolette. Me sonríe entre lágrimas, se acerca, me abraza y besa mi cabeza.
Entramos y conversamos todos en la mesa. Se reían mucho, Nicolette les contaba cosas de su estadía en casa de mis padres. Y ellos sonreían felices.
Me di cuenta que ellos son muy afectivos, se toman la mano, se besan y ríen todo el rato. Cosa que mis padres no hacen y yo pensé que, con el tiempo, cuando llevabas mucho tiempo casados dejabas de hacerlo, pero ahora me doy cuenta que no es de todos, son mis padres los que se han distanciado o quizás cayeron en una mala rutina.
ESTÁS LEYENDO
En el muelle de la Laguna
RomanceCamilo prometió volver por Nicolette cuando cumpliera los 18 años a la cabaña del lago... no la veía desde que tenía 9 años ¿Se puede cumplir una promesa así después de tantos años? ¿Estará Nicolette aún esperando? Esta es la tercera parte. 1- Seren...