Mikasa estaba harta de sentirse sola, de modo romántico. Así que tomando un consejo de su mejor amiga, decide conseguirse alguien a quién mimar y querer. Exacto, una babygirl.
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Narrador omnisciente.
Mikasa se había despertado más temprano que el día anterior debido a la alarma que anunciaba que era hora de levantarse, ya que hoy debía ir a trabajar.
Se estiró rápidamente para llegar a apagar la alarma antes de que Annie despertara, aunque sabía que sería imposible, ya que tenía el sueño demasiado pesado.
Cuando consiguió apagar la alarma volvió a su posición anterior y miró a la mujer que a su lado se encontraba sonriendo al notar el estado de desnudes en el que se encontraba, y sonriendo aún más al notar las moradas marcas que se encontraba regadas por su cuello, clavículas, hombros, senos y abdomen. Llevó su vista hacia los desnudos pechos de la rubia y se mordió el labio pensando en otra cosa, que no sea en la suavidad de los mismos. Acercó su rostro al contrario para dejar un pequeño beso en sus labios, al igual que en su frente y nariz.
Se levantó de la cama con una sonrisa notando su desnudes, miró su semi erección y caminó al baño para darse uno con agua fría, y así poder bajar completamente la pequeña erección que se le había formado al contemplar a la rubia dormir, quizás suene un poco morboso, pero no había nada que la rubia hiciera que a Mikasa no le pareciese extremadamente sexy.
Salió minutos después del baño, para dirigirse al armario de su habitación y sacar su traje color bordo, colocándoselo y luego regresando al baño para poder terminar de arreglarse.
Una vez que terminó se acercó nuevamente a Annie, dejando un beso en su frente para después irse a preparar un café y colocarlo en un vaso térmico para llevar al trabajo.
Le gustaría hacerle el desayuno a Annie, pero sabía que se levantaría tarde y para entonces ya estaría extremadamente frío.
Se encargaría de mandarle un mensaje una vez llegase a su oficina, así que salió de su hogar dirigiéndose hacia su camioneta y subiéndose en la misma para así dirigirse a su trabajo.
El trayecto fue un poco corto, debido a que era temprano y no había tanta gente, suponía que los niños y adolescentes que iban a la escuela ya habrían ingresado, por eso el poco tráfico. Agradeció mentalmente el tener que ahorrarse el estrés que le producía el tráfico a tan tempranas horas.
Minutos después llegó al edificio donde trabajaba, donde ya había una gran parte del personal. Saludando a todos se acercó a su secretaria para pedirle la agenda del día, no estaba tan cargada, así que le daría tiempo de conversar un poco con sus amigos que trabajaban en la empresa.
Se sentó en la silla del escritorio, apoyando el vaso del lado izquierdo del mismo y sacó su celular del bolsillo abriendo su chat con Annie para enviarle el mensaje que quería.
"Buen día.
Espero que hayas dormido bien, también espero que no estés tan adolorida por lo de anoche. Por si las dudas hay una crema anti-hematomas en la gaveta del baño, usala. Si te aburrís puedes venir a mi empresa, hoy no tengo tanto trabajo. Bss."
