⌱ Corazón ardiente. ℘|℘ 𝑱. 𝑱𝒌 • 𝑲. 𝑻𝒉

Capítulo 10

El corazón de Taehyung bombeó con cierta pesadez y por un momento, no escucho nada más que eso, y la respiración agitada de ese azabache. Bajo el pelaje de ese felino, su secreto más privado y profundo, intentaba verse seguro y pacífico, aunque por dentro temiera y sintiera ganas de llorar por la existencia del rechazo.

Pues había dejado impactado a ese hombre, lo esperaba, pero ahora tenía miedo de cual manera escogería para reaccionar.

Por ello regresó a sus pies, tan nervioso que se tambaleó y mordió el labio cuando volvió a mirar al azabache con sus ojos miel, y no los dorados de ese hermoso animal. Entonces, viendo a ese tildado hombre suspirar, supo que si no era él quien terminaba con ese silencio nunca acabaría.

— Todo lo que sé es que fui abandonado en un orfanato y después de años obsesionado con los híbridos, descubrí porque me sentía tan atraído por ellos.

Solo lo confesó, eso por lo que siempre se había sentido un bicho raro y porque adoraba tanto a todas esas personas que deseaba ayudar. Jungkook lo escaneó con la mirada una vez más y de repente, eligió una reacción que sorprendió a Taehyung. Estaba sonriendo, negando con la cabeza por lo increíble que resultó ser.

— Lo sabía... — Murmuró disfrutando ese jueguito.

Taehyung arrugó el entrecejo, sintiéndose nervioso cuando lo vio acercarse.

— Príncipe, tu aroma es sencillamente delicioso y ya sé porque.

Al fin le pudo decir eso que tanto temía por miedo a cómo reaccionara a sus agudos sentidos, pero era normal que un híbrido tuviera un aroma distintivo fácil de percibir. Taehyung lo sabía. Por eso se sonrojo hasta las orejas cuando Jungkook dio media vuelta y comenzó a marchar devuelta a casa, avergonzado por esa confesión. Pero sin querer quedarse atrás, salto y corrió hasta quedar a su lado, con el mentón bajo en su miserable intento de ocultar lo dominado que estaba por Jeon Jungkook.

Uno de los días más esperados por Taehyung llegó, y casualmente era el más aborrecido por Ban.

Las pruebas de agilidad.

Esas en las que pusieron a los híbridos en una línea de salida y los largaron a la carrera llena de obstáculos para diferentes fuertes. Pues hubo dos carreras, una evaluada profundamente por el general, siendo la carreta humana en la que más se esforzaron, y la otra, evaluada por Taehyung al ser la carrera animal en donde sin que se note para esos soldados y el general de poco interés, los híbridos jugaron y rieron entre ellos en un intento de olvidar el sufrimiento de esas pruebas por un rato.

El cariño de esa manada hacia Taehyung aumento, pues cada vez que se acercaban a él el doctor sabía exactamente qué pasaba. Teniendo sus planillas anotaba todo lo que veía de ellos, sacando ramas desde el punto clave, de que cruza o puros provenían. De allí sacaba todos sus pros y sus contra. Sabía quienes tenían más resistencia y quienes debían detenerse a respirar; sabía quienes toleraban altas temperaturas y quienes debían beber mucha agua bajo ese sol en la tarde; sabía quienes podían saltar un muro alto y quienes escogerían rodearlo.