cumpleaños de Sarita

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-Jimena, ¿Dónde esta Andrés? –Pregunto Franco ingresando en la casa de su cuñada

-Ya lo trae Óscar, no te preocupes Franco

-¿Le quedo bien el traje?

-Claro que sí, le ha quedado precioso- sonrió su cuñada- pero ahora te toca cambiarte a ti

-Me voy a ver ridículo

-Sí, pero es por Sarita, así que te aguantas y te cambias, que si no vamos pronto mi hermana se va a impacientar

-¿A qué te refieres?

-Son pasadas las once de la noche, ¿Cómo crees que reaccionara Sarita cuando entre al cuarto de Andrés y no lo vea?

-Tienes razón, ya salgo

Franco entro corriendo al baño y se vistió. En pocos minutos seria el cumpleaños de Sarita, y había planeado esto por varios días.

Al salir, vio a Óscar con Andrés en brazos, Franco y su hijo llevaban vestimenta a juego, la típica para dar serenata.

Franco había decidido hacer el ridículo llevándole una serenata a Sarita, y ¿Qué mejor forma de hacerlo que con el propio Andrés?

Franco tomo a su hijo en brazos, y junto a su hermano y cuñada salieron hacia la casa que compartía con Sarita

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Sara Elizondo estaba exhausta, había tenido un día durísimo en la hacienda, lo único que quería era llegar a la cama y esperar a Franco, que aún no regresaba de la oficina.

Antes de dirigirse a su cuarto, decidió pasar por la habitación de su bebé, para comprobar que este siguiera durmiendo.

Casi se desmaya al ingresar al cuarto y ver que su hijo no estaba allí

-¡Quintina!

-¿Si señora Sarita?

-¿¡Donde esta Andrés!?

-Hace media hora estaba en su cuna, durmiendo.

Sara comenzó a preocuparse, Andrés no sabía bajarse solo de la cuna, mucho menos abrir la puerta, así que no podría haberse salido solo, alguien se lo había llevado.

-¡Pues no está! Franco aun no llega, ¿verdad?

-No, pero sí estuvo aquí doña Jimenita

A Sara le volvió el alma al cuerpo, seguro su hermanita se había llevado a su hijo sin avisarle.

La mataría en cuanto la viese, pero al menos sabía que Andrés estaba en buenas manos.

-¡Ay, Dios! Esa hermana mía me las va a pagar- Dijo Sara caminando hacia su habitación para agarrar un abrigo para ir a buscar a su niño- Quintina, si llega Franco dile que fui a bus-

Sara se quedó muda al escuchar un ruido proveniente del exterior, parecía música. Observo su reloj, y vio que eran las 00:01 hs

¿Quién demonios pone música a esas horas?

La más bonita de las flores

Que he cultivado en mi jardín

Sara puso una cara de confusión, ¿Qué era aquello?

Decidida a averiguarlo, se dirigió hacia la ventana

La más hermosa y delicada

Es una rosa que vive en mí

Al abrir la cortina, la mueca de confusión de Sarita se transformó en una sonrisa enorme

Allí abajo estaban Franco y Andrés, ambos vestidos iguales, cantando en dirección a su ventana acompañados de una banda

Tiene un aroma

Tan insinuante

Sara sintió un par de lágrimas bajar por sus mejillas, estaba completamente feliz. Aun le parecía un sueño tener un esposo y un hijo tan maravillosos.

Que me propone

Que sea feliz

Atrás de ellos dos, estaban sus familiares, que miraban la escena con una sonrisa en sus rostros.

Con sus colores

Tan encendidos

Que resplandecen

En mi vivir

Andrés tiro un beso en dirección a su mamá, Sara hizo el mismo gesto hacia él.

Hay un motivo para mi vida

Es el cuidarla con mucho amor

Andrés no entendía mucho de lo que estaba pasando, pero ver la sonrisa en el rostro de su mama era suficiente para él.

Que no le falte

Su riego diario

Para que nunca llegue a morir

Sara se limpió las lágrimas, cuando estaba a punto de decir algo, la banda comenzó a tocar otra vez, así que Sara le hizo una seña a Franco para que parase, y este le indico a la banda que se detuvieran un minuto.

Sara corrió escaleras abajo y se dirigió rápidamente hacia el lugar donde estaban Franco y su bebe, al verla salir, Franco le indico a los músicos que comenzaran otra vez.

Estas son las mañanitas

Que cantaba el rey David

Sara se acercó a su esposo, aun con lágrimas en los ojos. Al ver a su madre cerca, Andrés extendió los brazos en señal de que quería que ella lo cargase, y Sara gustosa lo tomo entre sus brazos

Hoy por ser tu cumpleaños

Te las cantamos a ti

Franco cantaba a la par de la banda, abrazo a Sara por la cintura, y le dio un beso en la cabeza.

Despierta, mi bien, despierta

Mira que ya amaneció

Ya los pajarillos cantan

La Luna ya se metió

Toda la familia aplaudió, y la banda se retiró dejando solos a la familia Reyes Elizondo.

El resto de la familia entro silenciosamente a la casa, dejando a Sara, Franco y Andrés solos afuera por unos minutos

Franco abrazo a Sara por detrás, y le planto un beso en la mejilla

-Feliz cumpleaños, mi amor – le susurro Franco antes de besarla-

-Este es el mejor cumpleaños de mi vida, gracias- sonrió Sara-

-¿Te gusto la sorpresa?

-¡Claro que sí! Mira lo guapo que esta mi niño- dijo Sara acomodándole el traje a Andrés, quien aún estaba en sus brazos-

-¿Y a mí no me dices nada?- Franco fingió estar ofendido-

-Claro que también estas guapo, ¿de dónde crees que Andrés saco su encanto?

-Te amo

-Y yo los amo mucho más

sarita y franco imaginesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora