Detrás de la pantalla [Jinsoo]✔

27~

Jueves.

20:30 pm.

Los dedos de Rosé estaban entrelazados entre sí, jugueteando con ellos de vez en cuando.

A su lado se encontraba Taehyung, quien tenía sus propias manos escondidas dentro de los bolsillos de su abrigo.

La cita estaba finalizando. El castaño la llevó a la plaza, en donde se la pasaron hablando de tantos temas interesantes que por un momento creyeron que se quedarían sin saliva.

Luego Tae le invitó un helado que, a pesar de que ella insistió en que podía comprarlo sola, él pagó el de ambos.

Y por ultimo terminaron paseando un rato en el Río Han, ambos terminando deleitandose con el bonito paisaje en la oscuridad.

Pero quitando absolutamente eso, todo el interior y exterior de Chaeyoung no podía parar de temblar apenas notó las intenciones de Taehyung en ese lugar.

No era tonta. Sabía que el mayor buscaba besarla.

¿Había algún problema? Por supuesto que no. O al menos para ella no.

El simple hecho de jamás haber tenido una cita lograba ponerla nerviosa. No sabía qué debía hacer. ¿Debía corresponder al beso en caso de que sucediera? ¿Acaso se daban besos en la primera cita? ¿Qué se supone que pasaría luego de ese encuentro?

Para comenzar: Taehyung la persiguió para todos lados para pedirle una cita y siguió estando a su lado hasta que terminó aceptando.

El contrario le dejó bien en claro las intenciones que quería con ella pero... ¿Qué pasaría si fue a él quien no terminó de gustarle la cita? Tal vez se incomodó.

Posiblemente no se verían nunca más o pasarían por el lado del otro, fingiendo que jamás se conocieron.

¿Estaba exagerando? Probablemente. Juntarse durante mucho tiempo con Jisoo la volvió así.

—Insisto, tu casa es muy bonita—Taehyung la sacó de sus pensamientos.

La pelirosa movió su cabeza de un lado a otro, sorprendiendose al ver su hogar frente a sus narices. ¿En qué momento habían llegado tan rápido?

Debería dejar de preguntarse tantas cosas. Definitívamente debería dejar de enloquecer tanto su pobre cabeza.

— ¿Cómo la pasaste? ¿Bien, bonita?—Preguntó con tranquilidad y sonriente.

Rosé soltó uno que otro balbuceo sin dar una respuesta coherente y ocultó sus brazos detrás de su espalda.

—Uh, si—Murmuró un poco. Como odiaba ponerse nerviosa frente a Taehyung.

Y aún más si éste se reía con sorna por eso.

— ¿Ves? Te dije que no tenías que preocuparte por nada. E igual, si te sentiste incómoda o mal en algún momento puedes decírmelo ahora—Sonaba un poco nervioso y tímido.

—No—Soltó una leve risita, ahora sí mirándolo bien a los ojos—Todo fue muy bonito. Muchas gracias por invitarme a...—Hizo una pausa—A esta salida de amigos.

¿Lo había arruinado por eso?

El mayor simplemente rodó los ojos con diversión y dejó palmaditas en la cabeza de la menor.

—Bien, supongo que debo irme a mi casa—Avisó el más alto, alejándose apenas un poco de la pelirosa—Nos vemos mañana en la escuela.

Rosé se quedó estática en el lugar. ¿Así terminaría todo? ¿Así de mal e incómodo? ¿Tenía que decirle algo?