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- ¡NO QUIERO MALDITAS EXCUSAS! ¡QUIERO UNA SOLUCIÓN!

- Disculpeme Rey Min pero no se puede hacer nada, el joven ha sufrido de un gran trauma, no será fácil que salga de aquel estado de shock.

- Vayase, no me sirve.

Dijo mientras los guardias se llevaban al médico, era obvio que no sería fácil que saliera de esto, no podía hablar, no podía comer, ni siquiera podía moverme.

Jamás había pasado por algo así y de alguna manera me hacía sentirme desesperado, no quería estar de este modo, prefería morirme, llevaba días así y no pasaba nada.

Todo esto era una tortura, ví como se pasaba sus manos por su cara en modo de desesperación, simplemente porque no podía matarme, si me quedaba así ya no le servía de nada, ¿Porque sigue aferrado?

Escuche que tocaron la puerta y la abrió rápidamente, era Jimin, él seguía cuidando de mí, pero ya no era igual.

Desde que Min casi lo mata dejó de hablar, él había dicho algo, tenía que averiguar que significaba, seguramente el sabía como es que Min tenía su espada.

-"Si el muere yo también muero"

¿Que quería decir? ¿Que si mataban a Min lo mataban a el? El seguramente tenía respuesta a todas mis preguntas pero ahora, ahora no podía mover ni un solo dedo.

Yerim estaba cada día más cerca, esa mujer parecía que vivía del sufrimiento de los demás, seguía buscando la forma de hacerme a un lado y esta vez estaba dispuesto a dejarla, con tal de irme de aquí.

Aún estaba la posibilidad de que ella fuera hermana del amigo de Hoseok, ambos eran Kim y el amigo de Hoseok fue desterrado por ser homosexual, era claro que si era verdad su hermana tomaría el trono.

Estuve tan metido en mis pensamientos que sin darme cuenta me había quedado solo, ya no estaba ninguno y quien sabe en que momento abran salido.

Me dolía estar de esta manera, tenía que irme de aquí, no quería casarme con él, quería ir con Hoseok y cumplir mi promesa, había descubierto quien fue su madre, tenía que decírselo.

Sentí mis mejillas húmedas y solo cerré los ojos, si me quedaba así no podría cumplir mi último objetivo, tenía que encontrar la manera en que este estúpido shock se fuera.

Una vez que encontrara la solución me iría, tenía que hacerlo.

Me concentre y mire mi mano, con todas mis fuerzas trate de mover mi mano, lo intente pero no pude, volvi a intentarlo pero de nuevo no pude, trate de calmarme y decidí mejor intentarlo con un dedo.

Sentí muchas ganas de llorar pues me costaba demasiado hacerlo, volvi intentarlo y esta vez lo logre, me concentre y volvi a hacerlo.

Si lo lograba tomaría lo que es nuestro y me iría a un lugar donde no me encontrará, porque si salía de aquí, jamás volvería, si era necesario me mataría con tal de no estar aquí.

Quise sonreír cuando pude levantar mis manos, pero me detuve abruptamente cuando la puerta se abrió, había entrado y se sentó junto a mí.

-¿Que es lo que te pasa?

Dijo mientras me miraba sin expresión alguna, me dió miedo por un momento pero me calme pues no podía hacerme nada, no en este estado.

-¿Que querías hacer cuando la encontrarás? ¿Que hacías?

Sentía una gran impotencia por no poder responderle, por no poder gritarle en la cara que se iría de ese horrendo lugar.

Decidi ignorarlo y cerre los ojos como si de esa manera le dijera que se fuera y me dejara solo, escuche que se aclaro la garganta y lo mire de nuevo.

- La boda sigue en pie, más te vale que salgas de tu mundito porque si no te sacaré yo mismo.

Dijo y se puso de pie mientras se salía de la habitación, era un desgraciado, pero no dejaría que le pusiera una mano encima, jamás.

Segui volviendo a intentar moverme hasta que pude sentarme, ahora solo me faltaba poder mover las piernas y recuperar mi voz, no me quedaría en este lugar.

Seguí intentando hasta que yo solo lo logre, un trauma no podría conmigo, no cuando mi vida corría peligro, tenía que salir de ahí.

Con un poco de discreción empuje de nuevo aquel enorme mueble hasta ver que podría sacarla, no me iría sin su espada, era de él, merecía estar con el.

Escuche unos pasos acercándose por lo que no lo dudé y trabe la puerta, comence a empujar los muebles bloqueando la entrada, mi única salida era la ventana, sin duda alguna me rompería un hueso si saltaba.

Mire hacia la cama y corriendo hacia ella comenzando a quitarle las sábanas y amarrandolas, escuche como intentaba abrir así que me apure a terminar de amarrar las cortinas.

Me acerque hasta la ventana y le lance la maldita caja que tenía el arma haciendo que se rompiera y que él volviera a insistir en entrar.

-¡ABRE LA MALDITA PUERTA TAEHYUNG!

Grito pero solo me importaba escapar de ahí, ví como empezó a azotarse moviendo el enorme mueble, sentí miedo por un momento, me coloque la espada el la espalda de forma en que no se me cayera y tire por la ventana la enorme "soga" que había hecho, debía irme.







































-¡No está, repito no está!

-¿Como que no está?

- Escapo, debemos encontrarlo para el rey Min.

-¡Nos matara!

Miles de personas corrían por todo el pueblo y bosque, todos buscando el mismo objetivo, el Rey no tardo en aparecer mostrando aquella sonrisa, sonrisa que hacía que se helara la sangre de más de un soldado.




























Este capítulo lo iba a subir desde hace tres días pero no se pudo debido a que fui a ver a los tannies 🤗.

Bueno mis ✨estrellitas✨espero les haya gustado, no se olviden de votar y comentar 😉

- Jungyuli3312💜

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