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Inútil.

Eso era, haber arriesgado a Taehyung de esa manera era algo imperdonable, me sentía mal conmigo mismo pues solo tenía que hacer una cosa y por poco fracasaba.

Me deje caer en mi cama esperando que durmiendo un poco esa sensación de culpa se fuera y me dejara tranquilo.

Cerré los ojos por un momento sintiendo como todo mi cuerpo se relajaba, me acomode mejor pero después me desperte.

Escuche como me llamaba y sin pensarlo me levanté pues jamás lo había escuchado gritarme de esa forma.

Patee la puerta derribandola al instante y entrando en su habitación, mire por todos lados pero no había nada, absolutamente nada.

Lo mire y estaba llorando mientras se aferraba a sus piernas y me miraba.

Me acerque hasta el sentándome a su lado para después sentir como se abalanzaba sobre mí y lloraba sin parar.

¿Que sucedió? Ni yo mismo lo se.

Taehyung era fuerte, era frío y directo, te soltaba las palabras sin detenerse a pensar en ellas, se sentía superior y sobre todo él era inquebrantable.

Y ahora verlo llorando a más no poder, aferrándose a mi ropa mientras me abrazaba era algo nuevo.

Sentía como dejaba de temblar y poco a poco dejaba de llorar, parecía que había llorado horas cuando solo fueron algunos minutos.

Asegurandome que ya estaba mejor lo separe de mí y comencé a checarlo, no había ningún malestar o algo lo que me hizo preguntarme que le había pasado.

-¿Estas mejor?

- S-si.

-¿Que pasó?

- Había alguien afuera.

-¿Afuera?

- Si, me estaba mirando y se reía, me asuste mucho y te llame.

- Tae, no había nada.

- P-pero yo lo ví-

- Escucha, es imposible que nos encuentren aquí. No permitiré que te toquen.

Ví tus ojos rojos e hinchados por el llanto, jamás te había visto tan asustado y eso me hacia tener las fuerzas suficientes para jamás dejarte solo.

Había aceptado ser el guardián de un niño, un niño que ahora está frente indefenso y que me mira como si fuera su salvación.

Pasaron algunos minutos y ví como poco a poco el sol desaparecía y como el sueño comenzaba a hacerse presente.

Cerrabas tus ojos una y otra vez sin querer dormir, te ayude a recostarte y me puse de pie para caminar hacia la salida e irme a dormir.

- E-espera.

Me dices deteniendo mi andar sosteniendo mi mano, tu tacto se sentía cálido, me di la vuelta y te mire esperando a que me dijeras el porque me detenias.

- ¿P-puedes dormir conmigo?

Okey eso era algo nuevo.

Cuando cumplió los nueve años me había pedido que dejara de dormir con él porque se sentía grande, y ahora que era un adolescente me pedía esta vez pasar la noche con el.

- Hazme espacio.

Como decirle que no, seguía siendo un niño. Un niño al cual yo crie y al cual protejere.












My guardián











~ Corrí y corrí a más no poder, había esperado a que el bebé se quedará dormido para ir con el.

Pude ver tu traje azul marino y tu cabellera negra moverse con el viento mientras girabas hacía mí y me mostrabas tu peculiar sonrisa.

- Ya llegue Yoongi Hyung.

- ¿Donde está Tae?

- Durmiendo, vine para el entrenamiento.

- Hobi te enseñare a manejar la espada, no es algo fácil pero seguro aprenderás rápido.

-¡Si!

Me diste tu espada aún en su funda pues dijiste que era mejor y seguro practicar de esa forma.

Tu espada era grande y muy pesada para mí por lo que casí me caía mientras la sostenía con ambas manos.

Me viste y comenzaste a reír, con tu mano libre colocaste un mechón de tu cabello tras tu oreja mientras seguias riendo mostrandome tus ojos en una línea y tus rosadas encías.

Sonreí al verte así pero al abrir mis ojos tu rostro comenzó a distorsionarse y el ambiente a nuestro alrededor cambiaba completamente.

Tu cabello se volvió un poco risado y tu sonrisa se hizo cuadrada, tus ojos ahora parecían dos medias lunas y tu ropa, tu ropa era diferente, no te daba ese aire de poder.

-¿Que?

Susurre al ver que ahora a quien veía no eras tú, la persona a quien veía era él, te habías convertido en él, aparte la mirada y note que ya no era más un niño, todo había cambiado, asustado alce la mirada y nuestro alrededor era  solo ruinas.

Era.....



- Ahh.

Me desperte sudando y con mí corazón agitado, mire a mí alrededor y seguía en tu habitación, gire mí cabeza encontrandote dormido.

Tu rostro estaba tranquilo, tus labios se mantenían entre abiertos dejando salir algunos sonidos, tu cabello se mantenía desordenado, tus mejillas tenían rastros de lágrimas aún cuando ya no estaban.

Me quedé en la oscura habitación mirándote, no sabía porque muchos querían tenerte y hacerte daño aún cuando tu no habías hecho nada malo.

- No mereces este horrible destino.

"Protejelo porfavor."

Recordé la voz de tu madre diciendo aquello y dejandote en mis manos. Si pudiera cambiar algo sería ese día, que aquel incendio jamás ocurriera y que ambos hayamos seguido la vida que teníamos sin tener miedo a ser encontrados.

- Prometo que todo esto acabará pronto, y prometo poder mostrarte aquel mundo que desconoces y dejarte por fin ser libre.

Esa es mi promesa me dije a mi mismo mientras tomaba tu mano derecha y dejaba un beso en el dorso de esta sellando mi juramento, juramento que solo la Luna había escuchado y que aquellas cuatro paredes guardarian.







Dedicado a:
LorennaDeghenteriz

Lamento tardar tanto pero no sabía cómo seguir.

Bueno mis ✨estrellitas✨espero les haya gustado no se olviden de votar y comentar 😉.

- Jungyuli3312💜

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