AMÁNDOTE EN CALIFORNIA | CHRIS EVANS [EN EDICIÓN]

CAPÍTULO 20// JENNY

Narra Carla

Despierto por el ruido de mi celular, cuando lo voy a tomar es una llamada de Christopher.

-Buenos días, amor.- bostezo.-

-Buenos días, cariño.- responde.- ¿Ya estás lista?.-

-Aún es temprano cariño.- digo mientras veo el reloj despertador de la mesita de noche.- tengo 3 horas aún.-

-Pero eres demorona, cariño.- escucho como ríe a través del auricular.- Vamos, levántate y come bien. Voy a ver si puedo hacerte una videollamada cuando te hagan la ecografía. ¿Si?.-

-Esta bien, amor. Si no puedes, puedo grabarlo. No importa.- trato de restarle importancia, aunque me hubiese gustado estar junto a mi esposo al momento de saber el sexo de mi bebé.-

-Si importa, amor. Y mucho.-

-Lo sé, solo no quiero que estemos así.- sonrío triste.- ya despertaré, cualquier cosa te aviso.-

-Esta bien, amor. Te amo.-

-Te amo más.- cuelgo el teléfono.-

Me levanto de la cama y voy directo hacia el baño a tomar una ducha, aún tengo tiempo así que puedo demorarme un poco más. Estando en la tina relajada se me ocurre una idea y tomo mi celular.

Espero a que respondan mi llamada.

-Buenos días, cuñada.- saluda contento Scott.-

-Hola Scottie.- sonrío.- ¿Cómo estás?.-

-Mucho mejor ahora que llamaste. Mi hermano me dijo que hoy les dirán que es el bebé.-

-Así es, por eso mismo te llamaba.-

-¿Para que soy bueno?.- responde contento haciéndome sonreír.-

-Necesito que me acompañes al consultorio.-

-Llego en 30.- suelta este y corta la llamada sin que le cuente mi plan.-

Sé muy bien que siempre puedo contar con él. Cuando conocí a la familia de Christopher por primera vez, Scott fue quien me hizo entrar en confianza con todos primero.

Salgo de la tina y me visto con un sencillo vestido amarillo y unas sandalias bajas, maquillo un poco mi rostro y peino mi cabello solo para dejarlo secar al natural.

Escucho que tocan el timbre y supongo que es Scott el que está en la puerta. Cuando bajo a la primera planta, este se encuentra con Coco conversando en la cocina.

-Buenos días.- saludo a ambos.-

-Buenos días, cuñada.- saluda el ojiazul y me acerco a abrazarlo.-

-Señora Evans, buen día.- dice que Coco.-

-Coco, te he dicho miles de veces que me llames Carla.- sonrío.- si antes me decías señorita te reprochaba, ahora que me dices señora lo haré peor.-

-Lo siento.- sonríe.- les serviré el desayuno.-

-Gracias.-

Mientras desayuno con mi cuñado le cuento mi plan. Este consiste en que él será la única persona que sabrá el sexo del bebé y cuando vuelva mi esposo haremos una fiesta de revelación. Este queda fascinado con la idea.

Acabamos de desayunar y limpio todo lo que ensuciamos. Ya una vez afuera le pido que tomemos su auto porque el tener el chófer me hace sentir incómoda, pero eso no evita que nos siga hacia nuestro destino.

En el transcurso a la cita, converso con Scott de todo lo que quiero para la revelación y también le pido que sea sorpresa para Christopher.

Ya en el consultorio, la recepcionista nos pide que la sigamos.