AMÁNDOTE EN CALIFORNIA | CHRIS EVANS [EN EDICIÓN]

CAPITULO 40// FLASHBACKS

Narra Carla

Me siento extraña, como si estuviese viviendo una vida que no es mía. La sensación de que todo es un sueño me consume.

Jamás en la vida me imaginé que en algún momento me casaría con mi héroe favorito, ni mucho menos tener una hija con este.

Christopher en este mes de recuperación se ha comportado conmigo de forma amorosa, trata de que me sienta bien, me pregunta si estoy tranquila, si no me duele nada. Está cuidandome todo el tiempo.

Alma es preciosa, a pesar de que no la recuerdo, siento una conexión increíble con ella.

Ahora me encuentro con mi ella en mi habitación cambiándole de pañal.

-¿Necesitas ayuda?.- volteo y veo a Christopher apoyado sobre el umbral de la puerta.-

-Gracias.- sonrío.- pero ya casi acabo.-

El ojiazul se acerca y cuando termino de cambiar a Alma, la carga.

-¿Quieres ir a dar un paseo?.- levanto la mirada ya que él está parado frente a mi y yo aún me encuentro sentada.-

-Sería genial.- nuestras miradas no se despegan.-

A pesar de que mi mente lo olvidó, mi corazón revolotea por él, las mariposas en mi estómago se alborotan cada que hace algo lindo por mi. Sin embargo, no puedo confiar en la totalidad en él por lo que pasó con Ana. Si me lo ocultó cuando estaba consciente, no sé qué más me tiene guardado.

Me cambio de ropa y opto por un pantalón color caqui, un top hasta la cintura manga larga y cuello color blanco y mis converse a tono. Me peino y maquillo un poco y coloco un saco largo color crema.

Entro en la habitación de Alma y la abrigo ya que corre aire fuerte y no quiero que se me resfrío.

-Ya estoy listo.- Christopher entra a la habitación.

Volteo a verlo y luce un pantalón color café, unos zapatos de cuero a tono y encima un suéter de lana color crema.

-Vamos sincronizados.- sonrío.- ¿ahora eres Ramson Drysdale?.-

-Una vez me dijiste que el papel de villano me quedaba bien.- levanta los hombros y yo sonrió.-

Yo cargo a Alma mientras el lleva el coche y la pañalera de esta. Cierra la puerta y caminamos por los pasillos hasta el ascensor.

-Recuerdo que teníamos un cachorro.- pregunto mientras se cierran las puertas del ascensor.-

-Está con Scott.- voltea a verme.- en este edificio no permiten mascotas.-

-Quisiera verlo.- hablo mientras le acomodo el gorro de lana a Alma.-

-Ya nos quedan pocas semanas acá. Cuando terminen de hacerte los controles podemos regresar a nuestra casa y tendremos a Dodger todo el tiempo con nosotros.-

Solo asiento y guardo silencio.

Al frente de este edificio hay un parque gigantesco con una laguna artificial incluida.

Metemos a Alma en el coche y mientras él lleva el coche yo miro alrededor. Todo es hermoso, hay árboles inmensos cubriendo todo. El otoño se siente y con esta vista se ve magnífico todo.

De rato en rato volteo a ver a Christopher quien me mira de manera tierna y yo sólo atino a sonrojarme.

Hablamos de nuestra boda, la cual no recuerdo nada al igual que de nuestra luna de miel, de como descubrimos que estaba embarazada, de como me pidió ser su esposa. De nuestros viajes a Perú, a Boston, De nuestra casa en California. Hablamos de todo.