CAPÍTULO 48// ERRORES Y DECISIONES

765 42 6
                                    

Narra Carla

Las semanas pasaron volando, Chris trabajando, mientras yo cuidaba a nuestra hija, llenando mi tiempo libre paseando con ella y yendo de compras gastando los pocos ahorros que me quedaban.

Chris me había prácticamente rogado que usará su dinero,  que era de los dos. No sé si habré hecho lo correcto pero lo acepte, me dio una extensión de su tarjeta y la puso a mi nombre. Con Alma a cada nada íbamos a los centros comerciales y nos comprábamos outfits iguales.

Con Henry hemos seguido conversando y las llamadas que hacemos hace que ría todo lo que dura esta. Nos hemos vuelto muy cercanos, aunque a Chris no le guste mucho ya que se pone celoso.

No tendría porqué, pero me dice que es hombre y sabe sus intenciones. Yo solo lo escucho.

Hace una semana y media salí a cenar con mi esposo, pensé que era en un restauran, pero monto toda la cena cerca de un lago. Fue totalmente hermoso y lo mejor fue que era nuestra celebración por nuestro primer año de casados. No pudimos festejarlo gracias a mi pérdida de memoria, pero la cena fue increíble. Me recordó que nos casariamos de nuevo en casa cuando volvamos a California y le volví a decir que si.

Con respecto a mi pérdida de memoria, fuimos al hospital donde estaba internada y me dijeron que ya estaba bien, que probablemente me dieran dolores de cabeza pero con unas pastillas estas pasaría. Me dieron el alta y ya estoy curada.

También hicimos una pequeña reunión por mi cumpleaños número veinticinco, donde llegaron mis cuñados y mis suegros. Me dolió un poco que mis papás no estuvieran presentes, pero tenía que entender ya que ambos trabajan en Perú. La fiesta fue muy bonita y más con la compañía de mi familia política. Henry no vino ya que dijo que la pasara con estos, pero prometió que iríamos a almorzar un día de estos y festejarlo juntos.

Y así es, como Lisa aún sigue en casa le pedí que cuidará a Alma hoy.

Termino de alistarme y me doy un chequeo rápido frente al espejo de mi closet, llevo unos Jean azul ajustados, una cafarena negra manga larga, unos stiletos negros en los pies y encima de todo me pongo un saco largo en color negro. Arreglo mi cabello y me sercioro de que mi maquillaje esté bien.

Tomo mi celular y lo guardo en mi cartera, salgo hacia la sala y veo a Lisa con Alma en brazos, me despido de ambas y salgo.

En el lobby esta Henry esperándome, se encuentra de espaldas.

-Henry.- lo llamo por su nombre y este voltea lentamente.

Lleva puestos unos jeans negros, un polo del mismo tono y encima una chaqueta verde militar. Su cabello está algo despeinado dejando ver unos rulos que caen por su frente. Sin duda, se ve muy guapo.

Me mira de pies a cabeza y sonríe.-Carla.- habla mientras se acerca a abrazarme.- preciosa como siempre.

-Muchas gracias.- sonrio.- tu también luces muy bien.

-Feliz cumpleaños.- me entrega un pequeña caja.- sé que es muy tarde para darte tu regalo.- sonríe.- pero es mejor tarde que nunca.

-No debiste.- sonrió mientras abro el regalo. Son unos pendientes tipo aros de oro con piedras de diamante.- son hermosos.- levantó la mirada.- muchas gracias.

-Sabia que te gustarían.- sonríe.- ¿Nos vamos?

-Claro.- digo mientras guardo mi regalo en mi bolso.

Caminamos hasta el mismo restaurant que me llevo la primera vez, mientras hablábamos de nuestro día y sobre las noticias que han ocurrido durante las semanas que no nos hemos visto.

AMÁNDOTE EN CALIFORNIA | CHRIS EVANS [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora