Había amanecido, Tanjiro se despertó un poco antes de que su alarma sonara, estaba acostumbrado a eso ya que normalmente dormía con Nezuko y no quería despertarla antes de tiempo, pero esta vez le habían pedido llegar un poco más temprano así que Nezuko no se levantaría si no hasta pasada una hora, se levantó con pereza y se alistó para empezar su día, siguió su rutina normal de las mañanas, cocinó su desayuno y dejó la mitad de lo que había cocinado sobre la estufa para que Nezuko pudiera tomarlo, dejó una nota diciéndole que no podría llevarla sobre la mesa y suspiró, realmente necesitaba hablar con su hermana, pero no quería despertarla antes de tiempo, así que con el peso de aquel sentimiento de culpa salió hacia su trabajo
La mañana pasó sin más, Nezuko miró el desayuno aún caliente cuando bajó a la cocina, sonrió con ternura, había estado meditando las cosas y su hermano no tenía la culpa de su reacción, era un tonto, negó con la cabeza, sabía que su naturaleza dulce le impedía herir los sentimientos de los demás a propósito y que era tan ingenuo que en realidad no se había dado cuenta de los coqueteos de su compañera, así que pensó en pedirle disculpas esa mañana pero miró la nota en la mesa, su hermano había tenido que salir más temprano así que hablaría con él en la tarde que ambos llegaran
Caminó hacia la escuela, esa era su penúltima semana de clases antes de tener los exámenes finales y había quedado con su compañero, Isamu, el chico con el que Makomo la había estado molestando para darle tutorías, al parecer serían en su casa así que no había prisa, llegó a su salón justo antes de que la campana de entrada sonara y se sentó junto a Makomo
—buenos días– le sonrió
—¡Nezuko! De buenos tiene todo– le señaló traviesamente a Isamu
—Makomo ya habíamos hablado de esto– le susurró irritada
—vamos, hoy es su primera tutoría y tal vez algo más, no estás emocionada
Nezuko negó con la cabeza, su amiga no tenía solución, el profesor entró al salón dando por comenzada la clase así que ambas guardaron silencio
Las clases pasaron normales entre platicas en los descansos y una Makomo enamorada de su compañero de clases, Tanjiro le había mandado un mensaje en cierto punto del día diciéndole que saldría temprano pero que llegaría alrededor de las cuatro pues tenía algunos asuntos pendientes que arreglar
La salida llegó pronto y Makomo se apresuró en dejar a solas a Nezuko guiñándole un ojo en cuanto su compañero les dio alcance
—Hola Nezuko– saludó Isamu con una sonrisa amable
—Hola Isamu– le sonrió —¿estas listo?
—si, te sigo– le dijo amablemente
Nezuko tomó rumbo hacia su casa, quedaba a unas cuantas cuadras así que no habían tenido problema en ir caminando, su compañero la seguía de cerca con una plática casual que a Nezuko le agradaba, por idea de Isamu pasaron a una plaza para comprar alguna bebida fría antes de ir a su casa, iban riendo cuando algo distrajo la atención de Nezuko
Miró dentro de una cafetería donde una cabellera pelirroja bastante conocida para ella captó su atención, se disculpó con Isamu con la excusa de ir al baño para acercarse más a donde la había visto, se acercó un poco más a aquella cafetería donde los vidrios transparentaban a la perfección lo que ocurría adentro cuando lo vio, era su hermano, nada más y nada menos que con Aori
¿Así que esos eran sus "asuntos pendientes"? No pudo evitar sentirse traicionada, al parecer estaban hablando ¿pero cual era la necesidad de ocultárselo? ¿Acaso los sentimientos de Tanjiro habían cambiado y ahora le atraía su compañera?
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Siglos
FanfictionHan pasado varios siglos desde de la batalla contra Muzan, después de todo lo perdido, los héroes sobrevivientes lograron tener vidas pacíficas, las vidas que merecían luego de tanto sufrimiento, excepto por el par de hermanos que quedaron marcados...