35.- Tanjiro

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La oscuridad de la noche se cernía sobre ambos, estaban en la sala de su casa pero la penumbra era completa, había habido un apagón en el área producto de que uno de los generadores cercanos se había quemado y no lo arreglarían hasta la mañana siguiente

Era en momentos así que ambos agradecían uno de los beneficios de ser demonios y eso era poder ver en la completa oscuridad, la luna era nueva ese día así que no había ningún rastro de luz

Tenían un par de velas y lámparas guardadas pero no se molestaron en usarlas puesto que sus ojos les permitían ver con claridad a pesar de la oscuridad sin embargo ambos se encontraban con los párpados cerrados y las respiraciones pesadas, varios sonidos difíciles de catalogar salían de la boca de Tanjiro quien se encontraba con su hermana sentada en sus piernas haciendo algo que para otros les parecería aún más inmoral que la naturaleza de la relación que tenían

Ambas respiraciones se entremezclaron pesadamente producto de que ahora se encontraban cerca de los labios del otro pero con sus bocas abiertas mostrando sus colmillos más largos que lo normal, ambos acercaron sus rostros uniéndose en un beso profundo y poco a poco se hubieron separado

Tanjiro sintió a su hermana bajar sus besos hacia la unión de su cuello y clavícula provocando que sus mejillas enrojecieran un poco, pronto sintió que los besos eran reemplazados por suaves mordidas tanteando la carne y finalmente los colmillos de Nezuko enterrándose en el lugar que ella determinó adecuarlo para hacerlo, la sangre no se hizo esperar brotando de la profunda herida que sus colmillos habían ocasionado y él esbozó una sonrisa traviesa al verla dilatar sus pupilas ahora notoriamente rasgadas ante el líquido rojo

Ladeó la cabeza mirándola fijamente invitándola a hacer lo que ella quería, no se iba a hacer de rogar, no cuando veía a Nezuko salivando por probarla una vez más y menos aún cuando él estaba en las mismas condiciones

Nezuko atacó su cuello enseguida lamiendo y succionando la dulce sangre que salía de la herida, Tanjiro consiente de que podría regenerarla por completo en segundos no lo hizo dejando a su hermana que succionara lo que quisiera, pasó una mano cariñosamente por su cabello acariciándolo mientras que Nezuko succionaba con vehemencia su herida

Era algo que ambos habían comenzado a hacer desde hace bastantes años, no recordaban exactamente cuando habían empezado, pero lo que si sabían era que alguna vez les había ganado la curiosidad en hacerlo y pronto le habían tomado el gusto por completo

Tanjiro la dejó succionar mientras la miraba y se sonrojaba un poco pero ahora no por la sensación si no por el rumbo de sus pensamientos

Intentó hacer plena conciencia de cuando había comenzado todo remontándose a un par de años después de que la sanguinaria guerra había terminado, si bien al inicio había sido muy confuso para el, el hecho de despertar sentimientos por Nezuko que nunca creyó que alguna vez tendría

Al inicio no los quería aceptar, lo admitía

Era algo de lo que nunca había hablado con ella pero él sabía que ella se había dado cuenta, el que al inicio no quiso aceptar esos sentimientos que tenía por ella, su mente era tan terca diciendo que quería lo mejor para ella que intentó dejarla hacer su vida, intentó acceder a que los hombres interesados vieran a Nezuko e incluso al inicio estuvo casi de acuerdo en que Zenitsu buscara una relación con ella

Era obvio que ella los rechazaba pero aún así él insistía en que debía buscar su felicidad

"Tú eres mi felicidad"

Le dijo llorando cuando Tanjiro le sugirió un compromiso con un viejo amigo de ambos diciéndole que él la haría feliz, era de la familia más adinerada del pueblo y a Nezuko nunca le faltaría nada, podría llenarla de lujos y viviría feliz y plena

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