Siglos

11.- aniversario

—¿y qué hay de la playa?

—hace demasiado calor en verano, es mejor ir en invierno, además está demasiado concurrida en estas fechas– suspiró la menor

Tanjiro sonrió, su hermana estaba recostada boca arriba sobre su pecho y el la tenia abrazada por la cintura, ambos estaban viendo distintos lugares en el celular de ella para ir a vacacionar, pero ningún lugar parecía convencerlos

—mira ese ¿te agrada?– señaló un lugar cerca de un bosque donde había un hotel bastante rústico

—mmm, dice que tiene un río y está abierto al público

—y dice que el pueblo es turístico

—me gusta

—busca si aceptan mascotas– dijo Tanjiro mirando al perro recostado sobre la cama a los pies de ambos, de vez en cuando lo dejaban dormir con ellos a pesar de que el cachorro tenía su propia cama en la sala de su casa

—¡si aceptan!

—entonces me parece perfecto ¿que dices tú?

–también me gusta, entonces ahí iremos– sonrió

—bien, ahora solo hay que programar la fecha y ver los días que tienen libre

—bueno estamos de vacaciones hermano, así que puede ser cuando ambos queramos– rió

—bueno ¿que te parece quedarnos una semana?– preguntó Tanjiro, Nezuko asintió emocionada

—¿y cuando iríamos?

—primero hay que ver si están libres las habitaciones

Nezuko ingresó al sitio del hotel, parecía que tenían disponibles aún un par de cabañas por lo que miró a su hermano emocionada, Tanjiro le devolvió la sonrisa revolviéndole el cabello

—tú dices cuando hermano, aquí dice que podemos reservar desde la app

—¿te parece si reservamos en cinco días? Así nos da tiempo de ver lo de los boletos de avión y lo de Taro

—¡si!– Nezuko enseguida entró a la pagina para reservar mirando las distintas opciones que marcaba

—¿hermano?

—¿mmh?– Tanjiro tenía los ojos cerrados, se veía adormilado

—aquí me dan dos opciones.... ¿con o sin jacuzzi?

Tanjiro abrió los ojos unos momentos mirando el celular de Nezuko, analizó el precio por un momento y después miró la galería de fotos de los cuartos, su mirada se posó sobre su hermana unos momentos y después sonrió de forma traviesa

—con jacuzzi– le sonrió —será interesante usarlo

—¡Tanjiro!– su hermana se sonrojó con un leve sonrojo en sus mejillas

El mayor solo cerró los ojos riendo silenciosamente, volvió a abrazar a su hermana por la cintura y cerró los ojos dispuesto a dormir, Nezuko se dio cuenta de ello y se volteó ahora estando recostada boca abajo sobre el pecho de su hermano acurrucándose

—ya reservé, mañana con más energía planearemos todo, descansa hermano– susurró con una sonrisa al verlo ya dormido, Nezuko enterró su cabeza en el pecho de Tanjiro sintiendo la suave tela de la pijama de su hermano y lo acompañó cerrando sus ojos, quedándose dormida casi al instante

A la mañana siguiente Nezuko fue la primera en despertar, miró a Tanjiro aún dormido y acurrucado entre las sábanas, sonrió dándole un dulce beso en la frente y se deslizó fuera de la cama rumbo a la cocina, ese día aprovecharía para hacer un desayuno para ambos, pasó la vista por el calendario, una fecha encerrada en rojo llamó su atención