H E A V E N [Gilbert Blythe]

Prólogo

Caminaba con la cabeza gacha y escuchando el traqueteo de los tacones bajo mis pies. Las personas caminaban a los alrededores, pues Nueva York era la gran ciudad, y yo lo único que quería era estar sola.
Miles de pensamientos cruzaban por mi mente mientras regresaba a casa. Las lágrimas aún se acumulaban en mis ojos mientras aún escuchaba las palabras que habían roto mi corazón y mis ilusiones.

...
"Sabías que no iba a quedarme, lamento si por algún momento tuviste esperanza, pero por ahora no puedo darte nada de lo que pides... Si puedes esperar, prometo que algún día volveré por ti"
...

Eso fue lo último que me dijo antes de darse la media vuelta y marcharse.

Cuando lo conocí, supe inmediatamente que quería estar junto a él. Era tan divertido y además todo un caballero, no me fue difícil enamorarme.
Ambos sabíamos que sería difícil, pero aún así decidimos arriesgarnos, y al menos yo, creer que era posible llegar a algo más. Pero solo me engañé, y él tenía razón... desde un principio quedé advertida que solo estaría algunos meses por aquí e ignoré rotundamente a mi cerebro cuando me recordaba lo que sucedería.
Y ahora no me quedaba nada. Solo era una joven de 18 años que regresaba a casa con un corazón roto, una situación difícil y una vergüenza tan grande al tener que enfrentar a mis padres.

Crucé la calle y caminé unos cuantos pasos más antes de llegar a mi casa.
En la entrada se encontraba mi madre, quien al verme solo sonrió y estiró sus brazos. Ahí fue cuando no pude más, corrí hasta ella y me dejé consolar mientras las lágrimas no paraban de salir.

Margaret: Está bien, cielo... todo estará bien.
Jennifer: No lo está, mamá.
Margaret: Si lo estará. Vamos adentro.

Mi madre me llevó hasta mi habitación y se quedó conmigo hasta que el sueño me venció. Y cuando desperté, ya era tarde, pues el sol se estaba ocultando.

Me miraba una y otra vez al espejo mientras pensaba en todo lo que había pasado y en lo que pasaría en mi futuro, si es que tendría alguno.

Después de la hora de cenar, bajé a la estancia en donde se encontraban mis padres. Las manos me temblaban y de nuevo las lágrimas se apoderaban de mí.

Robert: Hola, princesa. -Habló mi padre cuando me vio- Quieres sentarte con nosotros?
Margaret: Cenar te haría bien, cariño. -Mi madre se levantó, pero la detuve-
Jennifer: No, mamá... no quiero cenar. -Caminé hasta estar frente a ellos- Quiero... Necesito hablar con ustedes.
Robert: Bien. Te escuchamos, princesa.
Jennifer: Papá, yo... -Lo miré- Yo... -Me arrodillé frente a él y lo abracé- Lo siento... Perdóname... Por favor, perdóname. -Repetía mientras lloraba-
Robert: De qué hablas?
Margaret: Cariño, qué sucede?

Luego de unos minutos de llanto, por fin me atreví a levantar la cara para mirar a los ojos a mis padres.

Jennifer: Estoy... Estoy embarazada.

Apenas pronuncié esas palabras, mi madre se soltó a llorar y mi papá se levantó del sillón muy enojado.

Robert: QUÉ TÚ QUÉ? NO PUEDE SER CIERTO, JENNIFER!
Jennifer: Lo siento... Lo siento tanto.
Margaret: Qué hiciste, Jennifer? Qué fue lo que hiciste?! -Repetía mi mamá con su voz entrecortada-
Robert: TE ADVERTÍ DE ESE HOMBRE! TE LO DIJE DESDE EL PRIMER MOMENTO EN QUE PISÓ ESTA CASA!
Jennifer: Lo sé.
Margaret: Y ahora qué vamos a hacer?!
Robert: NO LO SÉ!... -Me miró- No puedo pensar contigo aquí! Estoy decepcionado... muy decepcionado. -Comenzó a llorar-
Jennifer: Papá, yo...
Robert: Vete a tu habitación, Jennifer, porque no sé de lo que sería capaz en estos momentos.

Caminé lentamente hasta mi habitación, aún escuchando el llanto de mis padres.
Una vez ahí, lloré todo lo que pude, pues la decepción en la mirada de mis padres, y la rabia que sentía conmigo misma era muy grande.

Por la madrugada, mis padres entraron a mi cuarto. Yo no podía mirarlos de la pena que tenía.
Mi padre se arrodilló junto a mí y me abrazó. Después sentí el abrazo de mi madre y comencé a llorar.

Jennifer: Lo siento... En verdad lo siento.
Margaret: Tranquila, cariño. Cometiste un error.
Jennifer: Sé cuanto me afecta esto... y a ustedes.
Robert: No te preocupes por nosotros. Aprenderemos de esta situación como siempre lo hemos hecho... como una familia.

Esa noche mis padres se quedaron a dormir conmigo, y a pesar de haber cometido un error, sentí su apoyo en todo momento. Pero esa noche no fue lo más duro que tuvimos que pasar.

~5 meses después~

Mentiría si dijera que en todos estos meses, no seguía esperando a Brad. Tenía la esperanza de que en cualquier momento cumpliría su promesa y regresaría por mí, aunque claramente no había sido así.

Han sido meses muy difíciles. Salir de la casa sin ser señalada era imposible. Prácticamente mi madre me acompañaba a todos lados para tratar de mejorar el ambiente, pero pocas veces lo lograba. Y los malestares por mi estado no mejoraban la situación.
Era muy cansado y, debía admitir que vergonzoso, pasar y escuchar a las personas murmurar sobre mí, devorándome cual depredador a su presa.

A mi padre le pareció buena idea mudarnos para mejorar un poco la situación, así que vendió la casa y compró una propiedad al otro lado de Manhattan.

Y ahora nos encontrábamos a punto de dejar la casa que desde niña había sido mi hogar.

Mi padre terminó de subir las maletas al carruaje que rentó y después me ayudó a subir a mí. Y pronto, los tres partimos hacia nuestro nuevo hogar.

~2 meses después~

Por fin había llegado el día del parto. Unas horas atrás mi bebé había nacido, y cuando la sostuve en mis brazos por primera vez, todo lo que había pasado parecía no tener importancia.
Sostenía al pequeño pedacito de cielo, como lo llamaba, entre mis brazos, mientras mis padres me miraban con una gran sonrisa en sus caras, pues ver a su nieta les había alegrado tanto como a mí.

Jennifer: Hola, pequeña. -La miré con ternura- Mi pequeña.
Margaret: Ya decidiste el nombre? -Asentí-
Jennifer: Natali... -Le sonreí- Natali Harper.

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HOLAAAAA!
He vuelto con una nueva historia para ustedes y de nuevo tenemos al perfecto Gilbert Blythe como protagonista!

Aclaro que solo unos personajes que aquí aparecen son de mi autoría, pero ninguno de los que aparecen en la serie me pertenecen.

Espero con todo mi corazón que disfruten esta nueva historia que les traigo con mucho cariño y deseo que sea de su total agrado.

❤️❤️❤️