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Unos días pasaron y comenzaba a cansarme de seguir en el "pueblo del aburrimiento" como lo había apodado. Aunque, para mi buena suerte, la señora Wilson había vuelto y ya no tendría que comer los intentos de comida de Brad.
Ahora mismo terminaba mis clases, y me dirigí a la cocina para tomar un par de galletas que, mi amada señora Wilson, había cocinado por la mañana.
Sra. Wilson: Deberías esperar a que tenga lista la comida. -Dijo al verme tomar una galleta-
Natali: No es mi culpa que sus galletas sean adictivas.Cuando estaba por darle la primera mordida a ese manjar, escuché a alguien tocar la puerta principal.
Sra. Wilson: Esperan visitas?
Natali: No que yo sepa... Tal vez vienen a ver a Brad. -Volví a acercar la galleta a mi boca, pero volvieron a tocar- Dónde está?
Sra. Wilson: Arriba.
Natali: Ya bajará. -Escuché por tercera vez la puerta y suspiré enojada- Volveré por la galleta. -Dije señalándola-Salí de la cocina y caminé hasta el recibidor mientras le gritaba a Brad para que bajara.
Natali: Que nadie planea abrir la puerta en esta casa?! -Llegué a la entrada y abrí la puerta-
X: Creo que ya lo hiciste. -Sonrió-
Natali: Otra vez tú?! No te cansas de molestar, Gilbert?
Gilbert: Me llamaste por mí nombre. -Sonrió- Estamos progresando.
Natali: No te sientas importante... Vienes a ver a Brad, supongo. -Me hice a un lado y lo dejé pasar-
Gilbert: Así es... Me citó a esta hora.
Brad: Hola, Gilbert. -Dijo llegando a nuestro lado- Listo?
Gilbert: Más que listo.
Brad: Pues vamos a la estancia. -Lo abrazó por los hombros y lo guió adentro-Rodé los ojos y cerré la puerta, mientras imitaba en silencio lo que Brad le decía a Gilbert y hacía muecas ante lo que él contestaba, pero me detuve al escuchar lo que Brad dijo.
Brad: Será un placer ayudarte con un poco de asesoría. -Me giré y los detuve-
Natali: Dijiste "asesoría"?
Brad: Si.
Natali: A qué te refieres con eso exactamente? -Cuestioné-
Brad: Le daré clases a Gilbert después de la escuela.
Natali: Clases? Pero... por qué?
Brad: Porque me lo pidió y las necesita. Lo verás diario por aquí.
Natali: Todos los días?!
Brad: Eso dije... exceptuando los fines de semana a menos que sea muy necesario.
Gilbert: Tranquila... no vas a notar que estoy aquí. -Me guiñó un ojo y fruncí el ceño-Caminé enojada hasta la cocina y me senté para comer mi galleta, solo que ahora ya no tenía esa emoción que tuve antes de que llegara cierta persona.
Sra. Wilson: Quién era?
Natali: Ese molesto de Gilbert Blythe.
Sra. Wilson: Molesto? -Sonrió- A mí me parece un joven muy apuesto.
Natali: Lo conoce? -La miré-
Sra. Wilson: Claro! Lo conozco desde que tu padre me contrató... prácticamente lo conozco de toda la vida.
Natali: Pues es un verdadero dolor de cabeza... Y ahora lo tendré en casa todos los días después de la escuela.
Sra. Wilson: Tal vez sea una buena oportunidad para que se conozcan.
Natali: Si... o para que le dé con un sartén en la cabeza. -Volví a tomar mi galleta para comerla-
Sra. Wilson: Tanto te molesta?
Natali: Demasiado.Unos golpes en la puerta volvieron a sonar antes de que pudiera darle el primer mordisco a la galleta, así que solté un pequeño grito enojada.
Natali: Qué nadie va a dejar que coma mi galleta en paz? -Hablé mientras me dirigía hacia la puerta-
Al abrirla me encontré con un joven alto de cabello rubio, que sostenía una cesta en sus manos.
Lo miré esperando a que dijera algo.X: Hola, señorita. Vengo a dejar su encargo? -Lo miré sin comprender- La señora Wilson? Le encargó un poco de pan a mi madre.
Lis: Ah claro. Pasa.El joven entró y me tendió la cesta, y lo dejé en la estancia esperando mientras iba a dejar el pan a la cocina y volvía con su paga.
Sra. Wilson: Quién era?
Lis: Un joven que traía esto. -Dejé la cesta en la mesa- Es pan.
Sra. Wilson: Claro! Olvidé por completo el pan de la señora Mackenzie. Dónde está Cole?
Lis: Si te refieres al joven que trajo la cesta, está en la estancia, esperando su paga. -Volví a tomar mi galleta-
Sra. Wilson: Pues ve y dásela. -Me tendió unas monedas- Y después podrás venir a comerte la galleta.
Lis: Bien. -Suspiré enojada-Teniendo que dejar de nuevo mi galleta, regresé a la estancia para darle el pago al niño.
Lis: Aquí está tú... -No lo vi donde lo dejé- Dónde está? -Hablé más para mí misma- Bueno, se fue.
Iba a regresar a la cocina, pero noté que la puerta de mi estudio estaba abierta, así que me dirigí ahí temiendo que Gilbert estuviera husmeando mis pinturas, pero me llevé una sorpresa al ver al joven que había dejado en la estancia, viendo mis pinturas maravillado.
Lis: Te gustan? -Él pareció asustarse-
X: Lo siento, señorita... No quise...
Lis: Cuál es tu nombre?
X: Cole Mackenzie.
Lis: Bueno, Cole Mackenzie... -Caminé hasta él- te gustan las pinturas?
Cole: Son hermosas... Usted las hizo?
Lis: Si... aún no termino con la última. -La señalé- Le faltan detalles.
Cole: Tal vez si aplica un poco de verde aquí. -Señaló el lugar en la pintura- Y un poco de sombra...
Lis: Conoces de pintura?
Cole: Pues... algo así... Antes dibujaba.
Lis: Por qué ya no?
Cole: Me lastimé la muñeca... y desde ahí yo... Ya no fue lo mismo.
Lis: Sabes? Ahora mismo tengo un asunto importante esperándome en la cocina... Pero, qué te parece si regresas mañana? Necesito a alguien con tu visión para mi último cuadro y tal vez pueda ayudarte con unas técnicas para tu muñeca... Claro, si no estás ocupado.
Cole: Me encantaría. -Sonrió- A las 4, está bien?
Lis: Está perfecto.Me dirigí con Cole a la salida y me despedí de él, no sin antes recordarle de venir al día siguiente.
Después volví a la cocina con mi felicidad un poco restaurada.Lis: Acabó de conocer a un verdadero admirador del arte... Es lo mejor que me ha pasado desde que llegué aquí. -Tomé mi galleta- Bueno, lo mejor después de estas galletas. -Le di una mordida-
Sra. Wilson: Estás bien? Hace unos momentos estabas molesta por Gilbert.
Lis: Estoy perfecta, señora Wilson... perfectamente bien. -Sonreí-La señora Wilson me miró extrañada, pero continuó con su trabajo, mientras tanto yo pensaba en las sugerencias que Cole me había dado para mí pintura.

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H E A V E N [Gilbert Blythe]
Любовные романыH E A V E N | »Pero, si decides quedarte... me encantaría que fuera junto a mí«