II

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Habían pasado 2 semanas desde que mi mamá se había ido, y aunque faltaba menos tiempo para que regresara, yo sentía que era una eternidad.

Ahora mismo me preparaba para otro día en la escuela.
Terminé de peinarme y bajé al comedor, en donde ya estaban mis abuelos esperándome para desayunar.

Natali: Buenos días. -Besé la mejilla de mi abuelo y después la de mi abuela-
Robert: Hoy estás muy animada.
Margaret: Demasiado para haber trasnochado ayer.
Natali: Necesitaba terminar una pintura.
Robert: Y está lista?
Natali: Lo está. -Sonreí- Se las mostraré apenas llegue de la escuela.
Margaret: Pero ahora come o llegarás tarde. -Le sonreí y asentí-

Al terminar el desayuno, subí a mi habitación para terminar de prepararme para la escuela y tomar las cosas que necesitaría.

Cuando estuve lista, bajé y mi abuela ya estaba esperándome, así que ambas salimos de la casa y empezamos el camino hacia la escuela.

Cuando llegamos, mi abuela me abrazó como todos los días y repitió las instrucciones que cada día me decía.

Margaret: No hables con extraños y saliendo de la escuela...
Natali: Directo a casa, lo sé.
Margaret: De echo pasaré por la tienda de tu madre, llegarán unos paquetes y voy a recibirlos. Me alcanzas allá?
Natali: Claro! -La abracé- Nos vemos en unas horas.

Caminé hacia la escuela y me encontré con mis amigas y juntas fuimos al salón para tomar la clase más aburrida de todas... matemáticas.

Terminando la escuela, me despedí de mis amigas y fui directo a la tienda como mi abuela me había indicado.

Al llegar, ella hablaba con algunas personas, así que fui adentro para poder platicar con Elizabeth. Ella trabajaba en la tienda de mí madre, y desde que la conocí nos habíamos vuelto muy amigas.

Natali: Hola, Liz. -Dije sentándome en un banco junto a ella-
Elizabeth: Tenías mucho tiempo sin venir. Qué tal va la escuela?
Natali: Aburrida.
Elizabeth: Me lo imagino. -Rió- Pero supongo que las pinturas no van tan mal, eh?
Natali: Eso nunca puede ir mal.
Elizabeth: Y el ballet? La última vez que estuviste aquí dijiste que no podías lograr un paso.
Natali: Superé ese lapso y logré hacerlo.
Elizabeth: Con perseverancia todo es posible.
Natali: Y con muchos gritos de mi abuela.
Margaret: Te escuché. -Dijo llegando a nuestro lado- He terminado con los paquetes.
Elizabeth: Y todo bien?
Margaret: Todo perfecto. Solo iré a la bodega para... -La campanilla de la puerta la interrumpió indicando que alguien había entrado a la tienda- Puedes atender? -Miró a Liz-
Natali: Puedo hacerlo yo? -Ambas voltearon a verme- Quiero inspiración para una pintura que tengo planeada hacer.
Margaret: Una pintura?
Natali: Si.
Margaret: De acuerdo. Solo no menciones tu idea frente al cliente, no quiero que piensen que pintas a toda persona que entra por esa puerta.
Natali: De acuerdo.

Me puse de pie y caminé hacia el área de exhibición para atender a la persona que había llegado.

Al llegar, me percaté que era un hombre, y parecía buscar algo en especial, así que lo saludé para llamar su atención.

Natali: Buen día! Bienvenido a Jennati's! Puedo ayudarle en algo?
X: Eh... -Me miró- Pues...
Natali: Buscaba algo para su esposa?
X: No no... De echo no estoy casado.
Natali: Su prometida? Porque tenemos unos vestidos exquisitos por...
X: De echo vi el nombre de la diseñadora en el ventanal de la tienda.
Natali: Ah claro! La conoce?
X: No olvidaría el nombre de Jennifer Walker. Es... una amiga.
Natali: De verdad? -Asintió- Cuál es su nombre?
X: Brad.
Natali: Entonces, señor Brad... qué puedo hacer por un amigo de mi madre?
Brad: Tu madre?

El hombre me miró con sus ojos abiertos de par en par, como si le hubiera dado la noticia más impactante de todos los tiempos.
Lo miré algo extrañada antes de volver a hablar.

Natali: Si... Usted dijo que era su amigo.
Brad: Tu madre es Jennifer Walker?
Natali: Eso dije. Pasa algo?
Brad: Tal vez, me equivoqué...
Margaret: Natali, estás tardando demasiado, qué pasa con...

Mi abuela llegó a mi lado, pero al ver al hombre frente a mí dejó de hablar y pude jurar que hizo prácticamente la misma expresión que el hombre unos minutos atrás.

Brad: Señora...
Margaret: Qué hace aquí?
Natali: Lo conoces?
Margaret: Natali, ve con Elizabeth.
Natali: Pero, el hombre dice que es amigo de mi madre y...
Brad: Cuántos años tienes? -Lo miré-
Margaret: Eso no le incumbe.
Brad: Necesito saber...
Margaret: No lo necesita!
Brad: Cuántos años tienes? -Volvió a preguntar-
Natali: Tengo 14 años, señor.
Margaret: Natali! -La miré- Ve con Elizabeth ahora mismo.
Brad: Quién es tu padre?
Margaret: Te prohíbo responder, Natali.
Natali: Pero...
Brad: Tiene 14 años... -Miró a mi abuela- Eso quiere decir que nació el mismo año que yo me fui de aquí...
Margaret: Por ultima vez, no le incumbe nada que tenga que ver con ella!
Natali: Abuela...
Margaret: Te dije que te fueras, Natali!
Brad: Yo soy su padre?
Natali: Qué?!
Margaret: Qué barbaridad está diciendo?!
Brad: Soy yo el padre de ella? -Me miró- Tienes un padre?
Natali: No lo he necesitado. -Miré a mi abuela, que había empezado a soltar unas lágrimas-
Brad: No fue esa mi pregunta. Tienes o no un padre?
Natali: Lo único que tengo de mi padre es el apellido.
Brad: Cuál es?
Margaret: Natali, por favor...
Natali: Harper... ese es mi apellido.
Brad: Qué? -Miró a mi abuela- Harper?... Ella es... mi hija.
Natali: Su hija? -Lo miré- Usted es Brad Harper?
Margaret: Natali, necesito arreglar esto. Vete con Elizabeth.
Brad: Ella no se irá...
Margaret: Se irá porque lo digo yo!... Elizabeth!

Elizabeth llegó junto a nosotros, y al ver el estado en el que estaba mi abuela decidió no preguntar nada.

Margaret: Llévate a Natali de aquí.
Elizabeth: Si, señora. -Me tomó por los hombros- Vamos, linda.

La confusión en mí era tan grande, tenía tantas preguntas y pocas respuestas. Siempre creí que no necesitaba conocer a mi papá, o eso pensaba hasta este momento.
Algo en mí quería quedarse y resolver todas mis dudas, pero lo sucedido me hizo entrar en shock, tanto que ni siquiera protesté cuando Elizabeth me sacó de la tienda y solo me dediqué a seguirla hasta llegar a casa.

H E A V E N [Gilbert Blythe]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora