『Capítulo seis』

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Estaba en mi habitación arreglando mi uniforme, hoy llegarían las misteriosas escuelas invitadas, así que quería estar decente.

Cuando bajé de las escaleras en dirección a mi sala común, me encontré con mi primo y otros dos que eran un más altos que Draco, aunque tengo que admitirlo, me hacían sentir incomoda.

—Atenea, te presento a Crabbe y Goyle, serán como unos guardaespaldas para ti y para mí —fue lo primero que dijo Draco cuando me vio.

—Sé valerme por mí misma, Draco. 

—Bueno después de que te lanzaran un crucio... —escuché murmurar a quien distinguí que era Crabbe.

Me voltee a verlo y él se encogió en su lugar. ¿Se atrevió a murmurar sobre mí

—Así es, resistí a un crucio mientras tenía una daga clavada ¿puedes tú decirme lo mismo?

—Eh...

—¿Vas a responder o tendré que morir para que lo hagas?

—No. Lo lamento señorita.

— Soy Lady Ryddle para ti. —corregí y salí de la sala común.

Al llegar al gran comedor pude ver a Cedric y Luke en su mesa así que solo los saludé con un gesto de cabeza, al igual que Leyla y Grace.

Me senté al lado derecho de Theodore y frente a Daphne y Aiden. Mientras hablábamos, escuchamos a Dumbledore aclararse la garganta para hablar.

—Ahora que ya están sentados, quisiera informarles algo —hizo una pequeña pausa— Este castillo, no solo será su hogar este año si no, el de varios invitados especiales, ya que Hogwarts ha sido elegido... —fue interrumpido por Filch que vino en una especie de trote— Como estaba diciendo, Hogwarts ha sido elegido como la cede de un legendario evento; El torneo de los tres magos. Para aquellos que no lo sepan, el torneo de los tres magos reúne a tres escuelas, para una serie de pruebas mágicas, y de cada escuela, se selecciona un estudiante para competir. Que quede claro: si son elegidos, estarán completamente solos. Y créanme cuando digo que este torneo no es para los asustadizos, pero hablaremos luego, por ahora démosles la bienvenida a las bellas señoritas de la academia de magia Beauxbatons y a su directora Madame Maxime.

Escuche como las puertas del gran comedor se abrieron, dejando ver a un grupo de chicas con su uniforme azul claro, mientras hacían unas pequeñas reverencias y soltaban un suspiro, se ganaron las miradas de todos en el gran comedor, especialmente de los chicos.

Mis ojos se iluminaron a ver a Fleur, Gabrielle y Madame Maxime.

Gabrielle estaba haciendo pasos de gimnasia rítmica y Fleur estaba dando piruetas de ballet, para finalmente tomar de la mano a su hermana y hacer una reverencia ante Madame Maxime.

—Ahora nuestros amigos del norte, recibamos a los orgullosos hijos de Durmstrang y a su director Igor Karkaroff.

Ahí pude ver como usaban capas, sombreros y túnicas de piel, eran color marrón.

A diferencia de Beauxbatons ellos usaron unos bastones y fuego para su presentación.

Su director llevaba un abrigo blanco con un poco de negro en las hombreras y un gorro de piel negro.

Gracias a los murmullos, pude darme cuenta que el famoso Viktor Krum se encontraba ahí.

El banquete ya había comenzado, los alumnos de Durmstrang se sentaron en la mesa de Slytherin y las alumnas de Beauxbatons en la mesa de Ravenclaw.

ᴠɪʀᴀʜᴀ °•ᴄᴇᴅʀɪᴄ ᴅɪɢɢᴏʀʏ•°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora