Pequeñísimo disclaimer: Clara y evidentemente no soy psicóloga ni tengo conocimiento basto sobre el mutismo selectivo, sin embargo...me di a la tarea de investigar un poco sobre el tema, más que nada para ponerles en contexto que es exactamente lo que le pasa a Valentina y el porque no habla y las veces que lo hace es muy poco.
Una o muchas de las características que presentan los infantes con esta afección (porque se presenta más recurrentemente en infantes que en adultos) no serán bien representadas en el personaje de Valentina. Pero no está de más mencionar que me sigo informando y leyendo sobre el tema para seguir dándole desarrollo de personaje a la misma, que al fin y al cabo toda esta novela es ficción jijijiji.
Si hay alguien aquí con vida, gracias por seguir aquí....me tardé siglos en actualizar (al final de este cap me disculpo y todo el show).
Besillos 😘
-Se le llama mutismo selectivo- dijo el hombre con la bata blanca y gafas desgastadas.
-¿Mutismo selectivo?-
-Así es señora, esa es la razón por la que su hija se rehúsa a pronunciar palabra alguna o responder de forma oral a sus peticiones-
Valentina tenía 5 años la primera vez que pisó el consultorio de un terapeuta del habla. Llevaba aproximadamente cuatro semanas sin pronunciar palabra alguna, al inicio sus padres creían que era un simple capricho de infante, pero conforme fueron pasando los días, los señores Carvajal se dieron cuenta que la escases de palabras de su hija no era un acontecimiento normal.
-¿Cuánto tiempo le va a durar? Hasta hace unas semanas era una niña común y corriente, no sé cómo todo cambió de repente- la madre de Valentina siempre fue la más consternada.
-Señora, las causas del mutismo selectivo aún son desconocidas, no puedo darle una respuesta certera, conforme pasen las sesiones quizá pueda proveerle un diagnóstico más preciso. Necesito inmiscuirme en el contexto familiar, educativo y social de la niña para poder darle una respuesta un poco más precisa y así, usted comprenda cuáles han sido los factores y detonantes que han desencadenado esta afección en su hija- el doctor suspiró un poco antes de seguir hablando.
Los padres de Valentina yacían consternados y con un semblante preocupado en sus asientos metálicos que calaban hasta la médula de tan fríos que estaban. Después de varios, largos e insufribles viajes en carretera y de cansadas sesiones con diferentes médicos, finalmente habían podido dar con un terapeuta que lograría diagnosticar a su hija.
-Lo que si le puedo decir es que, su hija puede estar manejando un nivel de ansiedad muy grande o un temor excesivo que le impide comunicarse de manera verbal- el hombre suspiró- créame, es más común de lo que cree, la buena noticia es que su hija no presenta ningún tipo de retraso cognitivo que le impida comunicarse con usted y su familia de otras maneras-
-¿Me está diciendo que debo resignarme a su silencio?-
-Le estoy sugiriendo que encuentre la manera de comunicarse con ella y ella decidirá el momento para volver a hablar con usted, es importante darle un ambiente de seguridad y tolerancia, si no, la niña nunca podrá progresar-
-Val, tú no deberías estar fuera de casa, tus padres se pondrán muy preocupados si llegan a casa y no te ven ahí- Juliana intentaba convencer a la menor de volver a su casa mientras caminaban sobre el frío pavimento en dirección al departamento de la mayor.
A Juliana no le preocupaba del todo que los padres de Valentina no la encontrasen en casa, más bien, le preocupaba llegar a la suya y que encontrasen ahí a Jude. No sabía cuál era el propósito de Valentina o porque parecía demasiado decidida a llegar a su departamento, pasó más de 10 minutos intentado hacer hablar a la ojiazul pero ningún poder sobre humano lograba hacer que la menor perdiese la concentración en su desconocido propósito.