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Él peligris cambio sus ojos de color negro a unos de color rojo haciendo qué Sana lo miré y sus ojos también cambien de color.

— Linda, vendrás conmigo y no te negarás, ¿Entendido?. — Demandó haciendo que la pelirroja no pueda apartar la mirada de sus ojos.

La chica asintió totalmente hipnotizada por aquéllos ojos rojos, de pronto un chico apareció y golpeó al peligris.

— ¿¡Qué mierda crees qué haces!?.— Masculló él peligris mientras se agarraba un ojo.

— Dejala en paz Kai, largate de aquí si no quieres que vaya con Jackson y le diga qué trataste de abusar de una persona qué está borracha y que encima está hipnotizada por ti, ¿Sabes que usar los poderes para cosas malas está prohibido no?.

Kai gruñó y paso de largo empujando al pelinegro a su paso, Sana perdió él color rojo en sus ojos y regresaron a ser normales.

— ¡Sana!, ¿¡Sana dónde estás?!.— Una voz resonó por todo él pasillo, era la de Yeonjun.

De pronto aquel chico pelinegro qué estaba delante de Sana se convirtió en un conejo, la pelirroja no vio eso, pues su mirada se clavó en Yeonjun cuando esté entro al pasillo.

— Sana, me has asustado mujer, será mejor qué regresemos a los dormitorios. — Yeonjun agarró a Sana por los hombros y se la llevó.

Pero la pelirroja se detuvo al sentir una patita peluda rozar su tobillo, miró él piso y se encontró con él conejo, ella sonrió alegre y lo levantó para ponerlo en sus brazos.

— Encontré a mi conejito. — Dijo sonriente, pues no recordaba nada de lo que le había pasado en aquél pasillo.

Kai puede hipnotizarte con sus ojos, pero cuando la persona a la qué hipnotiza deja de estar así, esa persona se olvida de lo qué él mayor le hizo o quería hacerle, es cómo si nada hubiera pasado.

Yeonjun salió de la casa con Sana y la dejó en su auto, la pelirroja se quedó dormida en uno de sus asientos con él conejo en sus brazos, él pelinegro regreso a la casa en busca de Mina y Jisung.

— Eres muy lindo. — Halagó él rubio qué lo sostenía de la cintura.

— Gracias... — Respondió él castaño mientras sus mejillas se tornaban rojas.

Minho no aguantó más, pues era obvio qué él castaño no estaba consciente y sólo se dejaba hacer ante ese idiota.

Él pelimorado se levantó del sillón y empujó al rubio con brusquedad, Jisung frunció él ceño muy confundido, no sabía quién era aquel pelimorado.

— Nos vamos. — Minho agarró él brazo del castaño y lo jaló para salir de la mansión.

— ¡Tú!, ¡D-Detente!, ¿A dónde me llevas?.— Se quejó mientras hacía un puchero.

— A tú dormitorio, ¿No es obvio mocoso?, eres molesto.

— ¿¡A un dormitorio!?, ¡Suéltame asqueroso, pervertido, puerco, cara de gato!. — Jisung forcejeó con Minho para qué lo suelte.

Pero él mayor no cedió, y totalmente frustrado por él menor, esté lo cargo al estilo princesa para sacarlo más rápido de la mansión.

Jackson qué estaba por ahí viendo toda la escena mientras se tomaba otra margarita, también vio cómo Yeonjun volvía a entrar a la mansión en busca de sus demás amigos.

— Hey, ¿Estás buscando a Jisung?. — Él pelinegro le pregunto mientras se acercaba a él.

Yeonjun asintió.— Si, lo estoy buscando a él y a Mina, ¿Porque?, ¿Los has visto?.

— Jisung se fue hace un rato con uno de sus compañeros de habitación, dijo qué se había aburrido, y sobre Mina, la vi reviviendo las flores de mi jardín.

— Oh, entonces Jisung ya se fue....— Murmuró no confiando del todo en las palabras del mayor.

— Te lo digo enserio, Jisung se fue con Mark, no te preocupes. — Insistío viéndose más confiable.

— Mmmmm, bien, entonces iré por Mina. — Yeonjun se fue al patio de atrás.

— Lino me debe muchos favores.

— ¿Quién te debe favores Jack Jack?. — Cuestionó Mark detrás de él, pues ya había salido del baño.

— Un amigo, precioso.

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𝙏𝙚𝙡𝙚𝙥𝙖𝙩𝙝𝙮 𝙤𝙛 𝙡𝙤𝙫𝙚. [Minsung] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora