I wanna be your slave - LS

Capitulo I

''Él era el único que yo quería. Ni siquiera vi a nadie más que a él.''

Louis no tiene problemas para asumir que está enamorado de Harry, no después de los casi 10 años que ha pasado a su lado, aunque seamos honestos... Una cosa es asumirlo en tu mente y otra muy distinta es pensar que puedes decirlo en voz alta, porque Louis sabe que no puede, no puedes decirle a tu mejor amigo que llevas años enamorado de él y que jamás te has atrevido o si quiera has pensado en insinuar algo como una posibilidad entre los dos.

Así que mientras mira la forma en que Harry se inclina ligeramente, con su espalda recta acercándose a la mesa para tomar un bocado de su ensalada, sabe que debe dejar de mirarlo así. Tiene el cabello suelto, ligeramente debajo de los hombros y unos lentes de sol posados en su cabeza impidiendo que le estorben en la cara, una pierna cruzada por encima de la otra y el castaño no sabe en qué momento dejó de hablarle para mirarlo con ese ceño fruncido.

-Louis, ¿me estás escuchando, cariño?

-Oh, Harold... Lo siento, estoy perdido en... unos inversionistas que van a llegar esta semana.

Harry le sonríe, cómo siempre comprensivo, porque no es otra cosa más que amable y Louis recuerda una vez más por qué lo ama tanto. -Está bien... Siempre trabajando, me pregunto cuándo será el día que dejes esa organización de lado unos minutos y te dediques a ti un poco más o a tu vida amorosa por último.

Louis frunce el ceño rodando los ojos y acerca su copa de vino blanco, que ya ha tomado temperatura y la dejó a un lado a sabiendas que no podrá tomarla ahora que está tibia.

-Mi vida amorosa no es lo que me preocupa, ni ahora ni nunca... ¿la tuya, sin embargo?

El rizado sentado frente a él suspira y apoya uno de sus codos en la mesa, dejando su ensalada completamente a un lado.

-Creo que estoy enamorado, Lou.

El ojiazul levanta las cejas, yo también.... piensa, no lo dice, jamás lo hace.

-¿Quién es el idiota, esta vez?

-¿Qué te hace pensar que es un idiota?

-Te gusta.

-Ah.

Louis se ríe, dejando de lado el salmón que tiene en frente y niega a la vez que se acerca un poco más a la mesa.

-Estoy bromeando, cuéntame quién es. -O tal vez no...

-Okey, si insistes. -Ambos sueltan una risa a sabiendas que incluso aunque Louis no le hubiera dicho, le habría contado porque son los mejores amigos de todos los tiempos y de eso se trata una amistad. -Es el nuevo profesor de reemplazo que hay en la academia y Dios, es tan mono, debes venir un día con nosotros y los chicos a tomar algo para que lo conozcas, necesito que me des tu aprobación.

Louis negó riendo, intentando hacer pasar por desapercibido que una daga se había enterrado en medio de su pecho.

-Iré con la condición de que no vayas a dejarnos a media noche para ir a encerrarte en los baños del lugar con tu nuevo ligue, ¿de acuerdo?

Harry se colorea por completo y Louis suelta una risa negando, ahora que ambos se han acercado a la mesa, el castaño puede estirar su mano y alcanzar su mejilla fácilmente, así que lo hace.

El ojiverde no quita la sonrisa de su cara y en cambio, ladea su rostro para llenar la mano de su acompañante con su sonrosada y suave mejilla, Louis lo acaricia con su dedo pulgar y roza muy suavemente la esquina de aquella rosada boca con la que sueña desde hace más de 8 años. El mundo desaparece para él, al igual que siempre está con Harry, sobre todo cuando Harry hace esto de frotarse contra su mano y acercar su nariz a la orilla de la camisa de Louis, mientras inhala muy suavemente. El mayor sabe que si no tuviera sus orbes fijamente en el rostro frente a él, se perdería de cada vez que Harry hace eso que le derrite el corazón cada que está a su lado. Cómo si quisiera guardar su olor para siempre en su mente.