Uno, dos, tres, varios toques se hicieron presentes en la puerta de la menor de los Sano.
-¡Emma! ¡Por favor abre!
El silencio se hizo presente nuevamente.
-Emma, por favor, te lo ruego como tu mejor amiga...- La muchacha ya rendida, se dio la media vuelta lista para retirarse, pero un pequeño "pasa", se escucho del otro lado.
Al entrar a la habitación, no se veia a la chica por ningún lado, además de que esta estaba completamente oscura.
-¿Emma? ¿Donde estas?-Kita con dificultad visual busco a su amiga, diviso una silueta en la esquina de la habitación, así que de acercó directamente.- Emmita ¿Que ocurrió?
-Nada.- Habló con un tono nervioso.- Que necesitas de mi KitaKita?
La castaña la miro raro, solo le decía "KitaKita" cuando tenía un problema.
-¿Me ayudarías a sacar información de alguien? Tu sabes, familia, nombre completo, historial dental. Como lo hacíamos con los maestros que nos caían mal.
-Claro, ¿quien es?- Con dificultad se paro y fue por su computadora, volviendo inmediatamente a la esquina, cosa que llamó la atención de Kita.
-Se llama James Suzuki.
Emma se congelo, parecía que había visto un fantasma. Temblorosa, dejo la computadora de lado.
-L-lo siento, no puedo ayudarte...
Kita se agacho y tomó las manos de Emma, mirándola fijamente.
-Emma, dime que fue lo que ocurrió. Quiero ayudarte...-La rubia rompió en llanto, abrazo fuertemente a Kita.
-Kita perdóname, y-yo no quería, e-el me amenazó.- Hablo con la voz entrecortada.- Porfavor mantén distancia de él. E-Es peligroso, te puede hacer daño...
La chica obviamente se asusto, no es normal que de la nada te pidan perdón y te digan que una persona es peligrosa.
-Kita...
-¿Si?
-Por favor, déjame sola...
Realmente no quería hacerlo, Emma no parecía estar para nada bien y quería darle apoyo de cualquiera manera, pero no podía ir contra las palabras de su amiga.
Pero si había otras opciones claramente.
Al salir de la habitación, encontró a un poste de luz y a un enano escuchando la conversación, arrojó un gran suspiro y tomo de la oreja a Mikey.
-Draken, ve a hablar con ella, luego entraras tu Mikey.- Se retiro arrastrando al actual mayor de los Sano, a la sala.
-¡AY AY! ¡Kita! ¡Kita! ¡Duele mujer! ¡Sueltame pedazo de animal!
El más alto no estaba comprendiendo nada, pero igualmente se adentro.
-¿Emma?- De inmediato se hicieron presentes en sus oídos el llanto de la chica.
No lo pensó dos veces y se lanzó a los brazos de Emma, abrazándola fuertemente, cosa que fue correspondida al instante.
Sabía que Emma no le diría nada, pero a veces uno no busca que lo ayuden con palabras, solo necesitan detalles mínimos para estar en lo que cabe mejor y eso Draken lo sabia bien. Para el y Emma las palabras no eran tan necesarias para expresar lo she sentian, bueno más por parte de Draken, porque la chica siempre que podía le daba un cumplido o lo invitaba a salir. Y aunque él por fuera no lo desmostrara, era el más feliz por la situación y ella también lo sabía bien.
Se mantuvieron abrazados un buen rato, la rubia solo lloraba y lloraba. El no se quejo, solo le presto su hombro y el acarició el cabello dejando que soltara todo.
De un momento a otro la cargo hasta su cama, para que estuviera más cómoda.
-Llora niña linda, acá estoy para ti...
Y así estuvieron toda la tarde, con Emma llorando y Draken dándole un lugar donde descargase.
-Kita.- Habló Mikey.
-Dime.
-¿Que es lo que esta pasando? Si mi hermanita la esta pasando mal debo saber el porque, no puedo verla más así de sufriendo.
-Si mi instinto no falla, lo sabrás dentro de poco Mikey.- Recostó su cabeza en el hombro del rubio.- Vas a ver como todo va a estar bien...
Eran eso de las ocho de la noche, cuando Draken bajo a la sala, observando a ambos jóvenes ver my little pony.
-¡De que hablas imbecil! Rainbow Dash es la mejor por mucho.- Grito Kitara
-Pinkie Pie le gana.
-Rainbow vuela.
-Pinkie tiene un cañón de fiesta.
-¡Pero no vuela y ni es rápida!
-¡Quien necesita volar cuando tienes un puto cañón de fiesta!
El más río divertido por la situación, cosa que le duró menos de 5 minutos porque recordó al que bajaba.
-Hey, niños de preescolar en el cuerpo de adolescentes.- Kita y Mikey vieron fijamente a Draken con el ceño fruncido, cosa que de nuevo le causo una pequeña risa.- Después se encargan de discutir por unos caballos de colores.
-¡Son Ponys!- Gritaron a unísono.
-Si, eso.- Suspiro.- Mikey, Emma quiere hablar contigo.
Manjiro miro desconcertado apuntándose con el dedo, soltando un pequeño "¿Yo?"
Draken asintió, obteniendo como respuesta al enano yéndose directamente al cuarto de su hermana.
-Draken.- Soltó Kitara.
-¿Mmm?
-Estate atento a lo siguiente que va a pasar.- La rostro de la chica cambió completamente a uno serio y con la mirada perdida, cosa que alertó al más alto.
Mikey entro al cuarto de Emma, encontandola en su cama, abrazando sus piernas.
Se acercó a ella, sentándose en la cama.
-¿Todo bien, linda princesa Disney?
Emma instintivamente abrazo a su hermano, enterrando la cabeza en su pecho.
-¡Perdón, perdón, perdón!- Lo repetía cual mantra, cosa que le causo demasiada preocupación a Manjiro.
-Hey, Hey, Emma me estas asustando.
-Mikey...tengo que contarte que fue lo que paso ese día de la reunión.- La piel del Sano se erizo y un nudo en la garganta se hizo presente, dándole un pequeño 'si' con la cabeza a la rubia.
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Celos
FanficEn el club de costura todos tienen una misión, algunas se encargan de bordar, otras de diseñar y otras de cocer. Mitsuya Takashi era el líder, ayudaba a sus compañeras en lo que necesitan y se encargaba de dar las actividades de cada una. Hakkai no...