Los Personajes Mas Fuertes Del Mundo Están Obsesionados Conmigo (NOVELA)

Capitulo 81

Gracias a la intervención de Cedric, sólo unos pocos se dieron cuenta de la relación entre Beolde y Dalia.

Sin embargo, sólo dos personas fueron diferentes.

Una era el duque de Mershain.

Como alguien que había estado observando a Beolde durante mucho tiempo, sabía que ella no tenía motivos para buscar repentinamente los elogios de Cedric.

Además, observó (temblando de ansiedad) a Cedric, Beolde y Dalia desde la distancia, desde el principio hasta el final.

Cedric frunció claramente el ceño cuando tomó la mano de Beolde. Luego sostuvo a Dalia en sus brazos.

'¡El centro de esa relación es la señorita Dalia Pesteros!'

El duque Mershain era extremadamente rápido cuando se trataba de su hermana, Beolde.

Sabiendo ese hecho, algo le llamó la atención.

Era el collar que colgaba del cuello de la señorita Dalia Pesteros.

Aunque el núcleo se ha hecho un poco más pequeño y la forma que lo rodea ha cambiado, era sin duda el collar de diamantes de la emperatriz Siord.

'El hecho de que Siord le haya prestado eso.......'

Como era de esperar, también sabía a grandes rasgos lo que ocurrió entre Dalia y Beolde.

'Tendré que hablar con Siord más tarde'.

Aunque no se atrevió a hablar directamente con Dalia, el duque de Mershain le dio su apoyo infinito.

No sabe cómo Dalia ha conseguido persuadir a Beolde, pero por favor, ponle una correa y mantenla bajo control.

En secreto, hizo una señal de cruz para Dalia.

Y el otro era una figura bastante inesperada que aún no había aparecido.

* * *

Dalia le contó a Cedric todo lo que había sucedido antes de que el banquete comenzara en pleno. Excepto los patrones que Meldon dejó atrás.

Cedric no estaba muy sorprendido.

"Pero seguía siendo peligroso. Me alegro de que Meldon haya ayudado, pero tened más cuidado la próxima vez".

"......."

"Estoy un poco triste por no haber podido ayudarte. Ah, por supuesto que no te culpo".

Fue una palabra cálida. Dalia sonrió alegremente.

Pronto el Emperador y la Emperatriz entraron en la sala, y el banquete comenzó.

Dalia saludó a Hikan y Adrisha, que acababan de llegar.

Hikan sonrió ligeramente y asintió, mientras que Adrisha sonrió suavemente y agitó la mano hacia abajo.

Quizá parecía feliz porque no había venido con Leonard.

Sin embargo, cuando Dalia le mostró la espalda con expresión de llanto, su expresión de felicidad se arruinó de inmediato. Le preguntó a Dalia, con las palabras en la boca.

"¿Qué ha pasado?

Dalia extendió la mano en diagonal y señaló a Cedric.

Adrisha, que comprendió la situación de inmediato, miró ferozmente a Cedric.

Pero no era muy amenazante. En cambio, parecía una maltesa enfadada.

El príncipe heredero Leonard vino hoy con la hija de cierto conde. Fue hace tres años cuando circularon los rumores de que a ella le gustaba Leonard.