MOONLIGHT

Gracias por Todo. - 63

Steve levantó la cabeza para ver hacia la puerta de su cuarto, miró parado aquel chico que le había robado el corazón. Sus ojos se inundaron de lágrimas al verlo allí parado.

Qué haces aquí? — se puso de pie para caminar hacia el. — no te merezco después de lo que te hice Aldo. Soy un Monstruo, te puedo hacer mucho daño. — tomó sus manos.

Por algo estoy aquí, se que no fue tu intención lastimarme o hacerme daño Steve, no sabía que estabas pasando por una crisis. Perdón por alterarte más de lo que ya estabas. — dijo mientras agachaba su mirada.

Estaba muy enojado porque estabas pasando tiempo con Chris. — steve levantó su mirada. — qué haces aquí tú. — dijo algo molesto

Aldo giró y miró recargado en la puerta a Chris.

Steve quiso ir hacia Chris pero Aldo se puso en medio. Steve lo miró. — No se hagan más daño. — dijo Aldo mirando fijamente a Steve.

Steve lo miró con odio y se le olvidó que era todo para el, Steve lo tomó del cuello y lo pegó a la pared apretándolo. — Que tienes que ver tú con el Aldo. — le preguntó Steve lleno de ira.

¡Suéltalo! Steve, ¡SUÉLTALO! — grito Giselle algo preocupada. — por favor hermano. Suéltalo. —

Steve miraba como Aldo comenzaba a ponerse rojo, el aliento le hacía mucha falta, los padres de steve intentaron quitar las manos del cuello de Aldo. — Steve para, lo estas matando. — dijo su madre

Es lo que quiero. — dijo Steve.

Chris al ver todo lo que pasaba no le quedó más que correr y empujar a Steve, estos salieron volando por la ventana. Aldo cayó al suelo con el poco aire que le quedaba, todos corrieron a ver a Aldo y con la vista Algo borrosa, quedó tirado en el piso del cuarto de Steve.

Chris tomó las manos de Steve y lo tenía sometido en el suelo. — que te pasa maldito idiota, porque lastimas a la persona que más te quiere. A caso estás loco? Lo ibas a matar. — dijo Chris furioso.

Si no te hubieras metido en su vida, esto jamás hubiera pasado. — dijo Steve molesto.

Eres un pendejo. Entre él y yo no hay nada, solo somos simplemente amigos. El té quiere a ti solo a ti, eso entiéndelo. — dijo Chris.

El padre de Steve brincó desde el cuarto de Steve y separó a Chris y Steve. Ve a ver cómo está Aldo Christian yo necesito hablar con Steve. — dijo el padre de Steve.

Si tío. — respondió

Chris brinco hasta el cuarto de Aldo y miró que estaba sentando en una silla, Giselle estaba a un lado de él. Chris camino hacia El. — está bien?— preguntó algo preocupado.

Está regresando en si, si no hubieras hecho algo creo que aldo ya no estaría vivo. — dijo Giselle.

Me lo voy a llevar Giselle, no quiero que Steve lo vea, no quiero que le vuelva hacer algo. — dijo Chris mientras cargaba entre sus brazos a Aldo.

Chris camino por las escaleras y bajaron hasta llegar a la sala, — Chris, Espera.— dijo Giselle desde arriba. Ella brinco y se acercó a ellos.

Salgan por la puerta de atrás, no queremos que Steve los vea irse por la puerta principal. — dijo Giselle

Chris comenzó a caminar hacia la puerta de atrás, Giselle los acompañó, Chris comenzó a correr rápido para llegar a la casa de Aldo. En el transcurso del camino Aldo comenzó abrir los ojos y solo miraba los árboles pasar rápido. Chris llegó a la entrada del parque de la privada donde vivía Aldo. Se detuvo y se sentaron en una banca del parque.

Estas bien? — tocó su hombro.— Quieres que te lleve algún lado o alguna otra parte? — preguntó

No, — se limpió las lágrimas de su rostro.— prefiero estar solo Christian. Es lo único que quiero. — respondió Aldo mientras subía la mirada.

Chris se acercó a él y tomó su mano.

No estás solo, aquí estoy yo para lo que necesites, no dejare que nadie te haga daño, te acompaño a tu casa va? — dijo mientras se ponía de pie.

Aldo tomó la mano de Chris y comenzaron a caminar, En todo el transcurso del camino Aldo no dijo ni una sola palabra. Llegaron a la casa y Chris se recargó en la pared.

Intenta descansar, si ocupas algo me llamas? — dijo mientras lo miraba.

Está bien. — dijo Aldo entrado a su casa.

Chris espero a que Aldo entrara a la casa, una vez ahí adentro comenzó a caminar hacia la suya, — ¡Christian!— grito Aldo — chris se detuvo y giró. Miró a Aldo afuera de su casa. Corrió velozmente hacia él y sus miradas se juntaron. Aldo podía sentir la respiración de Chris.

Gracias por todo — dijo Aldo
No tienes porque agradecer, por ti haría cualquier cosa, descansa. — le dio un beso en la frente. — no vemos mañana, Ok? — dijo Chris despidiéndose.

Aldo entró a su casa y fue directo a su cuarto. Chris caminaba por la calle, sabía que todo esto no lo hacía con intenciones de separar a Steve de Aldo.

                           Días después...

Narra Aldo:
Los días han pasado, no he vuelto a ver a Steve, no se donde esté, Giselle no me da razones de él, no sé si está bien o está mal como aquella ultima vez que lo vi.

Estaban los padres de Steve sentados en el comedor cuando escucharon el timbre, la señora Lia se puso de pie y camino hasta la puerta para ver quien era, vaya sorpresa no era nadie, solo había una carta frente a la puerta, la señora Lia tomó la carta y comenzó a verla, se detuvo y sintió como su cuerpo se paralizó cuando vio que la carta venía desde España. Paso saliva y camino hasta donde estaba su esposo. — quien era cielo? — preguntó Carl.

Lia se quedó muda, Carl notó el silencio que invadía a Lia, se puso de pie y camino hasta donde estaba ella. —¿Que te sucede mujer? — dijo mientras la miraba a los ojos.

Lia le enseñó la cara a Carl, cuando la tomó también sintió aquel escalofrío que Lia al ver que la carta provenía de España. Subió la mirada y el miedo invadió sus cuerpos.