Despidete. - 99

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Llámale a Steve y pregunta en donde está. — dijo Lia algo preocupado

Giselle salió de la casa y camino hacia la entrada, sacó su teléfono celular y llamó a Steve a su otro celular.

— Contesta Steve. — dijo Giselle
— Bueno. — respondió steve
— Hasta que contestas, donde estas? — preguntó
— Ando en Walmart, vine a comprar unas cosas para la cena, ustedes donde están? Están con Aldo verdad? — preguntó Steve
— Estamos en la casa, vinimos hablar con Jerónimo para que nos dijera quien era Luca y saber con quien nos estábamos enfrentando. — dijo gis
— Pero quien está en la casa de Aldo? — preguntó
— Creo que nadie, todos estamos acá en la casa del bosque. — dijo Giselle
— Que? Dejaron solo a Aldo? No mames Giselle. — colgó
— Steve, hey Steve! — dijo Giselle

Steve salió corriendo del súper Mercado dirigiéndose a la camioneta para llegar a la casa de Aldo pues lo habían dejado solo y podría correr peligro estando solo.

— Qué pasó, donde está Steve? — preguntó Lia
— Steve se enojó, porque todos nos fuimos y dejamos solo a Aldo. — respondió Giselle
— No es posible, pensamos que Steven estaba con el en su recámara, vámonos todos para allá. — dijo Carl saliendo velozmente de la casa hacia el bosque.

Mientras tanto Aldo estaba en aquella parte del bosque a donde llegó, se quedó parado en medio de ese lugar pues la persona que le había hablado se le hacía conocida, cuando camino hacia Aldo no podía creer lo que estaba mirando.

— Ricardo, qué haces tú aquí. — preguntó Aldo
— Lo mismo me preguntó yo, qué haces aquí solo, tú noviecito nuca te dijo que no entrarás sólo al bosque? — le dijo.

Aldo miraba detalladamente a Ricardo pues sus ojos eran de color rojo, sabía que algo no estaba bien con el, comenzó a caminar lentamente hacia tras para poder salir corriendo.

— Ni se te ocurra correr aldito, pues ahora yo soy más veloz que tú. — dijo Ricardo
— Tú también eres un Vampiro? — preguntó
— Si, ahora yo soy uno, ya soy como tú novio, ahora si te gusto amor? — preguntó.
— Tú sabes los problemas que tuvimos y el porqué ya no seguimos juntos Ricardo. — respondió Aldo
— Yo quise arreglar las cosas bien contigo, pero no, se tuvo que meter el pendejo de cantú para terminar de arruinarlo todo, el me atacó y casi me mata, pero viéndolo bien, el hacerle daño a él, no me interesa, porque se como hacerle más daño. — se rio
— No me hagas daño, ya me hace mucho daño desde que vivíamos en Monterrey, déjame ser feliz por favor. — dijo Aldo suplicando.

Ricardo corrió velozmente hacia él y lo tomó del cabello, sus ojos se clavaron a los de Aldo y con rabia le dijo. — No sabes cuantas ganas tengo de matarte, que me supliques que te deje vivir, pero antes de que te mate, te quiero coger, te voy a coger tan fuerte que me vas a pedir que me detenga. — le dijo Ricardo a Aldo

— Suéltalo Ricardo. — dijo alguien al otro extremo del bosque.

Los 2 giraron y miraron a Steve parado, en medio del bosque, Aldo lo miró y vio que estaba algo molesto, pues se había salido de la casa.

— Déjalo y vete antes de que termine contigo. — dijo Steve
— Lo que usted ordene.— Ricardo soltó a Aldo y se fue hacia atrás. — ve con tú noviecito, pero ten mucho cuidado pues cuando menos te lo esperes, te voy a encontrar y voy a terminar contigo. — dijo mirándolo a los ojos

Aldo salió corriendo hacia donde estaba Steve parado, pues tenía mucho miedo por lo que estaba pasando, Aldo corrió con toda la intención de abrazarlo, cuando llegó con él Steve lo tomó del cuello, deteniéndolo bruscamente, Aldo lo miró y vio su cara llena de odio.

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