El Secreto de Chris. - 85

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Pásale hijo, siéntense ahorita les sirvo de comer a los 2. — dijo Gina emocionada

Steve y Aldo pasaron al comedor para tomar asiento, Renato miraba fijamente a Aldo, pues aquella sonrisa que tenía en el rostro se había desaparecido cuando Steve apareció.

— Pero que grosera soy Renato, mira el es Steve, el novio de mi hijo. — dijo Gina amable
— Hola, un placer conocerte. — dijo Renato
— Steve, el es Renato, el es mi nuevo asiente en la oficina y también nuestro nuevo vecino. — dijo Gina
— Mucho gusto Renato. — respondió Steve
— Provecho chicos. — dijo Renato

Steve sonrió y miró a Aldo, los 2 comenzaron a comer, mientras comían Steve le empezaba a platicar a Aldo porque se había marchado sin decirle nada.

— A ver, a ver, entonces alguien te denunció ante la realeza de vampiros, que teníamos una relación y te mandaron a juicio por eso? — preguntó Aldo

— Si, ese día que llegó el citatorio quería salir corriendo para avisarte que me tendría que ir pero mis padres no me dejaron verte por lo del juicio, me sentí tan mal porque sabría que te pondrías mal al no saber a donde nos habíamos ido. — dijo Steve

— Entonces, todos estos meses estuviste en España encerrado hasta que llegó tu día del juicio. — preguntó Aldo

— Si, los Barrón tenían que juntar pruebas y testigos para determinar si había roto una de sus reglas. — dijo Steve

— Y en que terminó todo? — preguntó

— Ese día del juicio, fueron muchos Vampiros de aquí de Douglas, muchos dijeron jamás haberme visto con algún humano e incluso la familia de Chris fueron abogar por nosotros, A chris no lo vi allí, no entiendo el porqué no fue. — dijo Steve

Aldo se quedó sorprendió, Chris sabía que Steve estaba pasando por un proceso de vida o muerte y jamás le dijo nada, sabiendo que se estaba muriendo por saber algo sobre el.

— Entonces Chris sabía que estabas en un juicio en España? — preguntó aldo

— Si, él y toda su familia sabía lo de mi caso, por algo fueron llamados para ser testigos. — dijo Steve

— Y cual fue el veredicto final de lo Barrón? — preguntó

— Al principio se me había encontrado culpable por tener una relación con un humano y poner en peligro el secreto de nuestra especie, pero antes de que se firmara la sentencia de tu muerte, porque tenías que ser destruido para que no revelaras quiénes somos, mi padre, se puso de pie y dijo que tú querías ser uno de nosotros, fue ahí donde los Barrón no podían firmar esa acta de sentencia porque a la persona que iban a destruir, deseaba ser uno de los nuestros y en el reglamento dice que no se puede destruir a un humano que desea ser Vampiro. — dijo Steve

— ¿Fue por eso que te salvaste del juicio? — preguntó

— Fue por eso que nos salvamos de ser destruídos amor. — respondió Steve. — Me dieron una sola condición, tengo un lapso de 10 meses para transformarte en uno de los míos, si en ese tiempo yo no te transformo en vampiro, entonces ahora si seremos destruidos. — dijo Steve

Aldo se quedó callado al escuchar lo que Steve le había dicho, se puso blanco de la impresión.

— Tengo que esperar y ver cuándo será el día perfecto para hacer tu transformación, aún lo estoy platicando con mi padre, pero no debe tardar mucho esto. — dijo Steve

— ¿y que será de mi familia? No podré estar con ellos cuando ya sea un vampiro? No los quiero lastimar Steve. — dijo Aldo algo temeroso

— Oye. — tomó su mano. — para eso te vamos a preparar, no vas a estar solo en esta etapa, yo estaré contigo. — dijo Steve

Aldo lo miró y sonrió, ahora si será uno de ellos, la noche cayó y Steve se tuvo que marchar a su casa a descansar, había sido un día lleno de emociones y sorpresas.

— Aldo, puedes sacar la basura? — dijo Gina
— Si ma, yo la sacó. — contestó.

Aldo se levantó de la sala y camino directo a la cocina para tomar las bolsas y sacarlas a los botes que estaban en la calle, Aldo abrió la puerta y salió para dejar las bolsas.

— No sabía que un chico tan atractivo como tú, tuviera novio. — dijo alguien tras de él

Aldo giró y miró a Renato detrás de él. — Me asustaste, no sabía que estabas detrás de mi. — respondió asustado.

— Perdón, no era mi intención asustarte, pero no has respondió mi pregunta. — dijo Renato.

— Si, estoy saliendo con Steve desde hace un par de meses atrás. — respondió Aldo.

Renato lo miró y sonrió.

— Me da gusto que estés con el, espero que siempre te haga feliz el chico. — dijo

Aldo lo miró y camino a su casa, dejó solo ahí en la calle a Renato, era algo extraño y misterioso, le causaba algo de temor en ocasiones. Aldo llegó a su habitación y salió a la terraza a fumar. Sacó su cigarro y lo prendió.

— Quien lo diría, te fuiste a España a un juicio por que alguien te denunció, ahora tienes que cumplir con la condición que se te puso, me tienes que transformar en uno de los tuyos. — dijo Aldo mientras le daba un jalón al cigarro.

A la mañana siguiente, Aldo llegó al campus, entró y fue directo a su casillero, tomó sus cosas y fue directo al salón, al caminar por el pasillo miró a Chris en su casillero, a su mente llegó un flashback donde Steve le decía que él sabía por lo que estaba pasando. Aldo camino muy rápido hacia el.

— Me puedes decir porque diablos nuca me dijiste que Steve se había ido a España. — preguntó Aldo enojado.

Chris giró su mirada y vio que Aldo estaba molesto.

— De que me hablas? — respondió chris

— No te hagas el que no sabes de lo que te estoy hablado Christian, Porque ayer Steve me contó que tú y tu familia sabían que se tuvieron que ir a España por el juicio que le esperaba a Steve porque alguien lo denunció ante la Realeza de Vampiros. — dijo Molesto.

— Aldo, no quería hacerte más daño de lo que ya estabas pasando. — dijo Chris

— Pero eso no te da derecho de ocultarme la verdad, tú sabías que me estaba muriendo por saber donde está y si estaba bien. Pero no te importo, tú sólo querías que se alejara para que lo disque nuestro se diera, no? — dijo Aldo enojado

— ¿Su que? — dijo Steve detrás de ellos

Aldo y Chris giraron y lo miraron parado detrás de ellos.

— Intentaste seducir Aldo para quedártelo, por eso nuca le dijiste nada de lo que estaba pasando conmigo y mi familia. — dijo steve

Steve lo tomó de la playera y lo aventó. Chris salió volando y calló al suelo, Steve iba directamente hacia él y lo levantó del cuello.

— No dudo que hayas sido tú el que me denuncio contra los Barrón. — dijo steve mirándolo a los ojos.

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