MOONLIGHT

Fuiste Tu. - 86

— Yo no fui quien te denuncio, jamás haría eso, fue alguien más. — respondió Chris

— Ya suéltalo Steve. — dijo Aldo aún lado de él
Steve soltó a Chris y lo miró a los ojos.

— Yo lo único que hice fue proteger a Aldo en tu ausencia, si no le dije nada fue porque no sabía si saldrías del juicio, si con tu partida cayó en depresión, que hubiera sido si tu sentencia hubiera sido la muerte. ¿Cómo crees que se hubiera puesto Aldo? — dijo chris

Steve lo miró a los ojos y agachó la mirada, sabía que tenía razón, Chris solo protegió a Aldo de el peligro.

— Lo siento, me tengo que ir. — dijo Steve

Steve tomó su mochila y se marchó directo a su salón, era obvio, Chris tenía razón. El solo cuido al amor de su vida en su ausencia.

— Aldo yo no quiero que estés molesto conmigo. — dijo chris acercándose

— Si ya sabías que él se había ido a España por un problema porque no me lo hiciste saber? — preguntó.

— Porque era obvio que te ibas hundir más, nos costó mucho sacarte de tu casa los primeros meses cuando él se fue. Si te decía eso, te hubieras hundido más en la depresión. — respondió chris

Aldo lo miró y sus ojos se llenaron de lágrimas, no lo pensó 2 veces y le dio un abrazo enorme a Chris. Christian se quedó viendo y lo rodeó con sus manos.

— Gracias por nuca dejarme solo. — dijo Aldo
— No te iba a dejar solo, sabes que te quiero y que siempre vas a estar primero antes que todo. — respondió chris.

Los 2 entraron a clases, mientras Thiago y su hermana se quedaban mirando aquella escena que había pasado en el pasillo.

— Yo no se como logró salvarse Cantú de un juicio. — dijo Thiago molesto
— Ya deja en paz a esos 2, todo el tiempo que estuvo en España, jamás hiciste nada, porque ahora que regreso, quieres hacer otro plan, déjalos en paz y evítate problemas, si se entera que fuiste tú quien lo denuncio contra los Barrón, te meterás en un gran problema hermanito. — dijo Regina aún lado

— Fuiste tu. — dijo alguien al fondo del pasillo

Thiago y su hermana giraron su mirada y vieron parada del otro lado del pasillo a Giselle.

— Tu denunciaste a mi hermano para poder hacerle daño a Aldo. Vaya que plan tan brillanté se te ocurrió Thiago. — dijo Giselle molesta.

Thiago salió corriendo del lugar, sabía que Giselle le diría todo a Steve y ahora si estaría en grandes problemas.

— Me tengo que desaparecer por un tiempo, si Steve se entera me va querer matar por lo que hice. — dijo Thiago

— De nada te serviría esconderte, Te va encontrar en el lugar que te escondas. — respondió Regina.

Las horas pasaron y era hora de ir a casa, Aldo salió del salón y se fue directo a su casillero para dejar sus cosas, las acomodaba bien para no dejar no dejar hecho un desorden, Aldo cerró el casillero y miró a Steve a un lado, giró y saltó del susto.

— Porque no me dices que estás aquí? Me pudiste haber matado de un susto. — dijo Aldo.

— Lo siento amor, estaba algo distante todo el día, creo que le debo una disculpa a Chris por como lo trate en la mañana no crees? El solo te cuido mientras yo no estaba y en vez de agradecerle lo ataque sin razón. — dijo steve

— Habla con el, ahorita ya se fue a su casa pero deberías de hablar con él, si no me quiso contar nada sobre lo tuyo fue para no lastimarme más a mi. — dijo Aldo

— Vayamos a casa, que no quiero que Thiago te haga algo. — dijo Steve.

Aldo cerró el casillero y camino junto a steve hacia la salida, Thiago salió de uno de los pasillos mirando a Steve juntos, una vez más tan esfuerzo no sirvió de nada.

— Ya mero se acerca tu cumpleaños, que te gustaría que te regalara? — preguntó Steve

Aldo se recargó en su camioneta y lo miró. — No quiero que me regales nada, con tenerte a ti me basta y me sobra. — dijo Aldo

Steve sonrió y camino hacia el, lo abrazó y recargó su barbilla es la cabeza de Aldo.

— Sabes, tenía mucho miedo de no volverte a ver, no podía dormir, me la pasaba pensando en ti, que estuvieras bien y siempre con el miedo de que no te metieras solo al bosque. — dijo Steve

— Fue algo difícil pero logré sobrellevarlo y mírame aquí estoy. — respondió

— Bueno, entonces te veo a las 6 en tu casa, va? — dijo Steve

— Si, a esa hora te veo amor. — respondió

Steve le dio un beso y se fue directo a su auto, Aldo subió a su camioneta y salió del estacionamiento del campus.

— Ya deja esto por la paz Thiago, en verdad ya no te metas en problemas, ahora la hermana de Steve sabe que tú fuiste quien lo denuncio, que más quieres hacer para que te termine matando Steve. — dijo Regina

— No voy a descansar hermana hasta no tener en mis manos a ese humano, nuca había deseado tanto a alguien como él y lo tengo que conseguir cueste lo que cueste. — dijo Thiago

— Tuviste la oportunidad ahora que Steve se había ido, pero claro no contabas que Aldo no se iba a quedar solo, chris tomaría el lugar de Steve y él lo iba a cuidar. — respondió

Aldo llegó a su casa y abrió el portón para meter su camioneta, tomó sus cosas y bajo de ella. Camino hasta la casa y abrió la puerta.

— Ya llegue ma. — dijo Aldo desde la puerta
— Tu mamá se está arreglando. — dijo Renato desde la oficina de su madre.

Aldo giró y lo miró parado.

— Qué haces tú aquí? — preguntó
— Vinimos por unas cosas del trabajo y pues a tu mamá se le cayó el café y se fue a cambiar. — respondió.

— Vaya, ya veo. — dijo Aldo caminando hacia la cocina.

Renato lo siguió hasta donde estaba Aldo.

— Te puedo preguntar Algo? — dijo Renato
Aldo lo miró fijamente. — Dime. — respondió
— Si te invito a salir un día, aceptarías? — preguntó Renato

Aldo se quedó helado, pues el vecino nuevo era algo raro.

— Mmm no sabría, hay días en los que me ocupo mucho, pero tal vez un día si. — respondió

— Bueno, me parece bien, mientras no se enoje tú noviecito. — dijo caminando hacia la sala.