MOONLIGHT

Tus Ultimos dias. - 97

Chris giro para ver a Giselle y a sus tíos, pues era una noticia que estaría por un buen tiempo.

— Aldo no debe enterarse de esto. — dijo chris
— Tarde o temprano lo hará, pues saldrá en redes sociales y ahí lo verá. — respondió Giselle
— Steve sabrá de esto? — preguntó Lia
— Saber que madre? — preguntó steve

Todos giraron para ver donde estaba Steve, para su sorpresa estaba detrás de ellos escuchando de lo que estaban hablando.

— Hijo, no has escuchado nada sobre lo qué pasó e Douglas? — preguntó Carl

— No, me la he pasado todo el día en el bosque, no se de que me hablan. — respondió.

— Steve, hubo una masacre en el hospital psiquiátrico de Douglas y el responsable de todas las muertes es Ricardo, el ex de Aldo. — dijo chris

Steve abrió grandes los ojos, miró a todos.

— El es el tercer aliado, claro estos malditos necesitaban encontrar alguien que nos odiara tanto como ellos para poder completar su grupo, era obvio que tenían que ir por Ricardo. — dijo steve

— Ricardo está suelto, la policía lo está buscando por todo el condado de Douglas, tenemos que estar vigilando que no se acerque a la casa de Aldo. — dijo Lia

— Solo vine por algo de agua pero ahorita regreso a vigilar para que nadie se acerque a esta casa. — respondió

Steve regreso de nuevo a la orilla del bosque para seguir cuidando que nada y nadie se acercara a la
Casa de Aldo, mientras que los demás estaban en la casa impidiendo que Aldo se diera cuenta de la noticia que estaba en Douglas. Él estaba en su cuarto mirando la tele pero su teléfono comenzó a sonar, Aldo lo buscaba por la cama hasta que lo encontró y miró en la pantalla que era su madre.

— Mande. — contestó
— Aldo, hijo cómo estás? Cómo está todo por allá?— preguntó Gina.
— Bien ma, todo bien y tú cómo estás? — preguntó
— Bien todo bien, solo quería saber cómo estabas, pues tenía mucho que no te hablaba, pero me alegro que estés bien, estás en la casa? — preguntó.
— Si, aquí estoy, los enanos cómo están? —
— Pues ahorita los llevaré al cine, están necios que quieren ir a ver una película, pero bueno, te dejo hijo porque ando haciendo unos mandados y Solo te llamaba para ver cómo estabas, me alegra escucharte que estás bien, cuídate mucho, nos vemos en 3 semanas. — dijo Gina.
— Claro ma, cuídense mucho, saludos a todos por allá. — dijo Aldo.

Aldo arrojó el teléfono a la cama y pasó sus manos por la cara, no le gustaba mentirle a su madre pero tampoco le quería preocupar, Aldo se paró de la cama y camino hacia la ventana del balcón para ver donde estaba Steve, allí estaba sentado en la piedra cuidando que nadie se acercara a su casa.

— Solo quiero que todo esto acabe. — dijo Aldo mirando a steve

Aldo camino hacia su cama, Steve giró a la ventana del cuarto de Aldo sabía que lo estaba mirando pero no quería que viera lo preocupado que estaba por lo de Ricardo.

— Cuanto tiempo más tengo que esperar luna, no quiero que le pase nada a este chico, tú más que nadie sabe lo mucho que he sufrido por el, ayúdame, necesito que te hagas negra para llevar a cabo la transformación. — dijo Steve mirando al cielo.

La noche cayó y los chicos seguían cuidando la casa de Aldo, al parecer todo estaba tranquilo pero no querían bajar la guardia, pues es lo que estaban esperando el trío de vampiros para poder acabar con Steve y Aldo.

— Tu crees que Ricardo sea un vampiro? — preguntó Giselle
— Claro, pues cómo crees que mato a todos los del hospital? siendo humano no creo, estos lo convirtieron en vampiro para que se pudiera escapar y nadie lo pudiera parar. — respondió chris
— Malditos, saben bien que Steve lo puede destruir por eso lo hicieron. — respondió Giselle.
— Pues claro, no sabes cuantas ganas tengo de apretarle el cuello a Thiago, lo quiero matar. — dijo chris.
— Tranquilo, si lo que no queremos es iniciar una pelea, solo tratemos de proteger a Aldo y si es necesario tener que pelear para defenderlo lo haremos. — respondió Giselle.

La noche corría y Steve seguía vigilando el bosque junto con Carl, pues no dejaban ningún segundo solo el lugar. Steve se detuvo y giró hacia atrás, pues escuchó una voz que provenía del bosque.

Steve camino lentamente pues la voz seguía y seguía, caminaba hasta que llegó al borde del bosque y miró en el cielo que la luna estaba en su punto y de color negra. Abrió grande los ojos y la miro.

— ¿Ya es hora? — preguntó Steve
— Steve, mi querido Steve. — dijo la luna
— Ya es hora de transformar a Aldo en uno de los nuestros. — preguntó

— He escuchado tu petición pero tenía que hablar contigo de eso, la transformación de tu novio está más cerca de lo que tú te imaginas, pero tengo que avisarte de algo muy importante. — dijo Black Moon

— Algo importante? De que trata, no me dejes así con la duda por favor. — dijo Steve

— Querido Steve, tú novio será transformado en uno de los tuyos pero no serás tú quien lo transforme, será alguien más, debes cuidarlo, pues todos ustedes corren peligro, se ha creado un trío de vampiros que atentaran contra ustedes para poder destruir a Aldo y a ti. Deben prepararse pues el inicio de una pelea está por iniciar. — dijo

— Como que no seré yo quien lo transforme, tengo que ser yo quien transforme a mi novio. — dijo Steve algo sacado de onda.

— Cuídense y protejan al humano. — dijo Black Moon.

La luna volvió hacer de color blanca y Steve regreso a su lugar, pues de la cabeza no se podía sacar la idea de que él no transformaría a Aldo en vampiro.

— Si no soy yo, entonces quien carajos lo hará? Pues necesito saber, no quiero que me quiten ese privilegio. — dijo Steve

La noche seguía y el trío estaban planeado como sería el ataque contra los cantú...

— Tenemos que buscar la manera de traer a Aldo al bosque pues mientras que estén los cantú allí en el bosque no podremos acercarnos a la casa. — dijo Thiago

Luca se quedó algo pensativo pues algo se le había ocurrido para llamar la atención de Aldo y este entrará al bosque.

— Ya tengo la idea perfecta para que nuestra cena llegue por si solita al bosque, pero debemos mantener ocupados a los cantú para que él se pueda salir de la casa y entre al bosque. — dijo Luca.

El plan de Luca le agradó a Thiago pues solo así Aldo entraría al bosque.

— Tienes contado tus últimos días Steve. — dijo Thiago mirando hacia el bosque.