Buenas Noticias. - 75

19 3 0
                                    

Los chicos subieron a las habitaciones para alistarse e ir de compras a los Malls, chris subió y se acostó en la cama al parecer era el único de todos que no quería ir al Mall de compras.

Aldo lo miró acostado en la cama y se acercó junto a él. — no quieres ir con nosotros verdad? — preguntó.

Chris se giró y lo miró. — no me apetece. — respondió.

Entonces aquí te quedas en el hotel, si no quieres ir tampoco te voy a obligar. — dijo Aldo

Después de varios minutos Aldo bajo y las chicas ya lo estaban esperando.

Donde está Chris? — preguntó Yoss
No quiso ir, no le gusta esto de ir de compras. — respondió mientras guardaba su celular.
Aburrido. — yoss cruzó los brazos. — vámonos tenemos muchas tiendas que recorrer hoy.

Los chicos salieron del hotel con rumbo a las grandes Malls de Miami. Chris desde la ventana pudo ver cómo se marchaban en un Uber. Se alejó de la ventana y se acostó en la cama, miró hacia el techo, el celular de Chris comenzó a sonar, él lo tomó y miró que era una llamada de su madre. Pronto aventó el teléfono a la cama y dejó que la llamada se colgara.

Un notificación llegó a su celular y lo tomó para verlo.

"Porque no me avisaste que te irías de viaje? El juicio de tus tíos está por llevarse acabo y debemos de ir como testigos."

Chris no contestó el mensaje de su Madre, tenía miedo a que Aldo se enterara que él sabía donde estaba Steve y toda su familia y por lo que estaban pasando.

No quiero que Aldo se entere de todo este enredo — se sentó en la cama mirando hacia la ventana.— no quiero que deje de pasar lo que está pasando entre nosotros. Quiero que él también sienta cosas por mi, así como yo siento por el. — dijo chris

Los chicos llegaron a una de las plazas de Miami, Aldo comenzó a ver varia ropa en American Eagle. Las chicas entraron a otra tienda, quedaron en verse en los comedores cuando terminaran de comprar ropa.

Aldo tomó varias playeras y comenzó a ponerlas en su brazo, después de un tiempo salió de la tienda y fue en búsqueda de otra más. Al salir de la tienda no se dio cuenta que alguien estaba parado tras de él mirándolo fijamente. Aquellos ojos de color café claro se clavaron directo hacia Aldo.

El chico de la playa comenzó a seguir a Aldo hasta la próxima tienda

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

El chico de la playa comenzó a seguir a Aldo hasta la próxima tienda.

Lo seguía tan cuidadosamente para que no se diera cuenta que lo estaba siguiendo. Aldo entró a una de las tiendas de Calvin Klein. Comenzó a ver varia ropa de ahí, tomó varias prendas, seguía caminando hasta que topo con alguien accidentalmente.

Lo siento perdón. — dijo Aldo recogiendo las prendas que había tomado. — no me fije por donde caminaba.

No te preocupes, suelen suceder accidentes. — respondió el chico extendiendo su mano.

Aldo tomó la mano y se puso de pie. No podía creer que era el chico de la playa.

Tu eres el chico de la Playa. — preguntó.
Si, tú? También eres aquel chico de la playa. — respondió.
Me llamo Aldo. — dijo sonriendo.
Mucho gusto Aldo, me llamo Alvin. — respondió sonriendo
El gusto es mío, también vienes de compras? — pregunto Aldo.
Vine a buscar unas cosas que me hacían falta para la gran fiesta que darán este viernes en la playa. — respondió Alvin.
Una fiesta? — preguntó Aldo
Si, cada año en Miami dan una fiesta a todos los turistas que vienen a vacacionar, se ponen súper buenas y el ambiente está súper. — dijo

Pues tendría que ir para ver qué tan buenas se ponen esas fiestas. — respondió Aldo.

Pues vayamos, digo si tú quieres, tal vez a tus amigos también les agrade la idea. — respondió

Tendría que comentarles a ellos, y dime, tú vives por aquí? — preguntó Aldo
Si, soy de aquí. Desde que te vi, sabía que eras de otro lado, por lo que veo de un lugar donde el sol no sale a menudo. — dijo Alvin

Aldo subió su ceja y lo miro. — como porque dices? — preguntó

Es más que obvio, tu piel es muy blanca, como si el sol saliera rara la vez y te broncearas. — respondió Alvin.

Aldo soltó una pequeña carcajada. — soy de Douglas. — respondió

Vez, lugar frío donde el sol nuca sale. — respondió Alvin

Poco tiempo después, siguieron visitando varias tiendas y Alvin acompañó aldo. El reloj marcaba las 12:28 Pm y Aldo y ya tenía un poco de hambre.

Tengo mucha hambre, le avisaré a las chicas que iré a la planta donde están los comedores. — dijo aldo

Steve por otro lado, seguía acostado en su cama pensando una y otra vez sobre qué día sería el juicio. Estaba desesperado porque tenía muchísimas ganas de ir a buscar al amor de su vida. Giselle iba directo al cuarto de steve cuando pudo ver a Aldo con este chico en una plaza comercial. Giselle lo miró pero no podía escuchar lo que hablaban solo miró que estaba con ese chico.

Quien eres tú? — se preguntó Giselle
Jerónimo salió de el salón de la realeza y fue directo a la casa donde estaban los cantú. Camino hasta que llegó a la puerta, se acercó y tocó 3 veces. Lia se puso de pie y camino hasta donde estaba la puerta. Abrió y miró a Jerónimo parado.

Buenas tardes señora Cantú. Les traigo buenas noticias. — dijo Jerónimo

Pasa, pasa, estás en tu casa. — respondió Lia

Jerónimo entró y mando a llamar a toda la familia cantú, los chicos bajaron de las habitaciones y llegaron a la sala donde Jerónimo estaba esperándolos para darles las buenas noticias.

Bueno, antes que nada me complace saludarlos una vez más, hoy vengo aquí con ustedes para darles buenas noticias. Steven — lo volteó a ver. — El día de mañana a las 12 en punto del medio día, se llevará acabo el juicio donde te tendrás que presentar de manera formal, los Barrón ya tienen suficientes pruebas. Se les mando a llamar a los testigos que ustedes pidieron para que mañana también se presentaran. Debes ser muy preciso con lo que respondas, pues los Barrón deberán de tomar la decisión al final. — dijo Jerónimo

Entonces mañana será el Juicio por fin? — dijo steve algo sorprendido.

Si, ya después de 5 meses el día del juicio llego. — dijo Jerónimo.

MOONLIGHTDonde viven las historias. Descúbrelo ahora