Siempre he sido solitario. Nunca sentí la necesidad de ser respaldado por alguien, quitando a mi padre, que es el único ser humano, que en mayor o menor cantidad, me importa.
Pase toda mi vida en Outer Banks, los Bancos Externos, o como quieran deci...
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Daphne pov:
Mi conciencia es lo primero que me despierta por la mañana. Me sobresalto, como cuando tienes esos sueños en los que sientes que caes y reacciónas segundos después. Me siento en mi cama y sostengo mi cabeza, siento un leve mareo.
Tuve un sueño algo loco.
Estaba en una fiesta y me embriagaba, bailaba y saltaba junto a Sarah y su novio. No era Topper, que extraño.
Luego un tipo quería propasarse conmigo y Rafe aparecía y lo golpeaba. Su nariz sangraba. Me preocupe más por Rafe, obviamente.
¿Porqué sería obvio preocuparse por Rafe?
Bueno, no me preocuparía por un posible abusador, ¿entienden?
En fin, yo...¿seguí bebiendo? No, ¿o si? Ni siquiera lo recuerdo, mi sueño tenía momentos borrosos.
Recuerdo que Rafe era bueno conmigo. Definitivamente era un sueño, una fantasía, porque no había forma de que eso fuera real.
Él conducía hasta mi casa y me ayudaba a subir las escaleras para luego dejarme durmiendo. Y luego de dormir, desperté.
¿Desperté?
Mi mente crea un escenario donde todo lo que paso anoche fue real pero río mientras niego una y otra vez. Eso simplemente no puede ser. Yo sabría si viví algo así, lo recordaría todo.
Pero estabas ebria.
En el sueño.
No era un sueño.
Claro que lo era. No hay forma en la que Rafe Cameron sea amable en esta realidad. Debió ser una fantasía, algun pensamiento en mi inconciente por mis muchos deseos de que el mejore su persona.
¿Tienes deseos con él?
Te odio conciencia.
Minutos después ya estaba de pie, aún con mareos, pero encaminandome al baño. El dolor de cabeza que siento en este momento no puede ser legal.
¿Este sufrimiento es lo que los adolescentes viven todo el tiempo al embriagarse? Porque permítanme opinar y aclararlo en cuatro, simples, palabras: no vale la pena.
Me veo al espejo y me espanto de solo hacerlo mientras me hecho para atrás. Me acerco despacio hacia mi reflejo y noto las desventajas de no quitarse el maquillaje antes de domir. Mis ojeras cubren la mitad de mi rostro, más la suma de mí tez pálida y restos de delineado y lápiz labial rojo corrido.
Iugh.
Tomo de mis toallitas desmaquillantes y las paso por mis ojos, los contorneo de la forma más suave que puedo, para luego usar otra toallita para quitarme el lapiz labial rojo.
