Angels like you // Rafe Cameron

. 𝕽𝖊𝖌𝖑𝖆𝖘 .

Daphne pov:

Estoy enloqueciendo y mucho más de lo habitual.

No he sabido nada de Rafe desde que lo vi en la playa ayer por la tarde. Debía venir por mi anoche y lo esperé y nada. Le llamé y escribí pero su teléfono figuraba apagado. No hay señal de él y estoy comenzando a asustarme.

Quiero decir, soy su novia, no oficial, pero soy algo suyo, no puedo hacer ojos ciegos si veo que no responde. No quiero entrar en pánico pero estoy muy acostumbrada a textearle y que este ahí, de modo que el que no responda ni nadie lo haya visto, porque sí, le pregunté a Topper por mensaje, me es sumamente extraño.

¿Donde estas Rafe? Me estoy volviendo loca. Solo necesito saber que estas a salvo.

Tal vez lo asaltaron cuando venía por mi, o lo hirieron, ¡O TAL VEZ LO RAPTARON! No es novedad que es hijo de uno de los "grandes" hombres de esta isla, probablemente el más rico.

¿Y si esta atado, rezando por su vida mientras alguien golpea esos pómulos perfectos que posee?

Olivia suspira viéndome como si pudiera leer mi ansiedad, la forma en la que muevo mis piernas y muerdo mis uñas. Giro mi cabeza y la observo, depositada sobre la cama mientras sus pequeños ojitos me dan una mirada de QUIERO DORMIR MALDITA DEMENTE.

También quisiera dormir, no pude ni cerrar mis ojos anoche.

Pero no puedo sin saber que si mi chico esta bien.

Intento llamarlo nuevamente, creo que es la llamada número cuarenta y cinco, pero no hay respuesta y mis nervios ya estan llevándome a un climax de lágrimas.

Rafe, por favor, dónde estas.

Mamá ingresa a mi habitación sin tocar la puerta como lo hace de costumbre y se lleva una mirada molesta de mi parte.

- No voy a pedir permiso para entrar a una habitación de mi casa.-se excusa mientras sonrío negando con mi cabeza, ella nunca va a cambiar.-

- Descuida, ya perdí la fé en que respetes mi espacio.-agrego cortante.-

- Veo que alguien no esta de buen humor.-comenta de forma graciosa mientras se sienta en la punta de mi cama.-

No hay respuesta, no quiero dar respuesta. Pero me conoce, soy su hija y como toda madre sabe cuando no estoy en mi mejor momento.

- ¿Anoche no debías salir con tu amiguito?

La miro sorprendida, nunca le dije que estaba saliendo oficialmente con Rafe.

- No necesitas mentirme ni ocultarme, soy tu madre, sé todo lo que haces, cuando lo haces, dónde y con quién.

Silencio absoluto, esta es la parte que me castiga una semana por mentirle.

- No estoy enojada, pero sí me duele que no me cuentes que estas con un chico, eso es importante, tengo que saberlo-asiento mientras intento hablar pero me interrumpe.-No he terminado Daphne.-suspira cansada, sé que odia regañarme.-Si algo sucede yo necesito saber con quién estas, tus relaciones, tus amistades, porque un buen vínculo puede llevarte a cosas increíbles, pero un paso erróneo y todo puede hecharse a perder.

Mi ceño se siente como si no pudiera notarse más en mi rostro.

- ¿Qué quieres decir?

- Que quiero saber con quién estas, porque tienes 17 años, aún eres menor, y si bien no tienes ocho, eres pura y hermosa y muchos podrían aprovecharse de tu luz.

- Mamá no es...el caso.

- Bien, entonces dime quién es.

- Es que no es oficial aún...por eso no te lo he dicho, ni a papá. Quisiera esperar a que fuera oficial para presentarlo y que puedan conocerlo.