Prólogo

259 15 2
                                    

-¿Que hiciste esta vez? -Reprochó la señora Ryomen entrando al instituto de su hija.

-Nada, solo que la directora exagera -se escogió de hombros Kaori restándole importancia.

-Buenas tardes Señora Mine -saludó amable Maki Zenin, la directora de ese instituto desde hace cinco años.
-
Buenas tardes Señorita. Me informó mí hija que necesitaba mí presencia -sonrió entre dientes.

-Claro. Pase a mí despacho por favor. Dejemos que la señorita Ryomen vaya a clases. Están por comenzar -divisó a Kaori sonriendo le falsamente, puesto que la directora estaba esperando muchas acumulaciones de problemas o algo grave para poder echarla ya que no le quería en su instituto. Y, obviamente, la susodicha le haría la contra para burlarse.

-Adiós mamá. No le creas nada de lo que te diga -susurró esto último y se fue de allí.

Kaori caminó hacia las aulas y frenó en la suya. Miró el picaporte y Dudó en entrar ya que estás eran clases de historia. Al pasar, pudo divisar la cabellera rubia de su profesor, el cual, ella odiaba ya que eran aburridas sus clases y era una de las razones por la cual era llamada tanta la atención. Este siempre la pescaba haciendo travesuras o algo en su clase y directamente le informaba a la directora.

-Buenos días señorita Ryomen -saludó Kento sentado en la punta de su escritorio- pase y tome asiento -señaló el lugar donde se sentaba siempre su alumna.

-Buenos días -devolvio el saludo cortamente y se sentó sin decir más nada.

-Bien, como les decía, veremos un tema nuevo. Es muy interesante y motivador -informó Nanami algo emocionado.

-Creo que usted es el único motivado aquí profesor -comentó Kaori por lo bajo, pero este la escuchó.

La clase comenzó a reír y el pelirubio suspiró retirando sus lentes que llevaba puestos.

-Mire señorita Ryomen, ¿Sabe que si no saca buenas notas en este semestre repetirá de año? -se cruzó de brazos mostrando una sonrisa triunfadora.

Sus compañeros rieron y sobre todo Momo, la chica popular del instituto, pero que era demasiado inteligente en este caso.
La clase transcurrió y mientras el profesor copiaba en la pizarra las distintas pirámides de Egipto, Kaori comenzó a jugar a quien rompe la lapicera con su mejor amigo John Seo. Este era un chico de intercambio ya que en su instituto de su país, tenía mala conducta y sus padres lo trajeron un tiempo a vivir con su abuela ya que pensaban que aqui, podría mejorar algo.

-¡Hey! Me toca -se quejó Kaori elevando la voz.

Todos allí presentes la miraron incluyendo al pelirubio y ésta se calló de inmediato.

-¿Por qué no pasa a dar la clase señorita Ryomen? -la retó con picardía este apoyándose en el escritorio- digo, la veo con muchas ganas de participar y hablar

-bien -se levantó está y fue al frente- bueno, queridos compañeros. Como yo doy la clase, les doy el permiso de retirarse -rió mirando burlóna a su profesor.

Sus compañeros festejaban y estaba por salir todos apresurados.

-¡No! -frunció el entrecejo Nanami acomodando sus lentes de leer- regrese cada quien a su lugar y tu jovencita acompáñame a mí despacho -sentenció serio.

Kaori trago grueso y fue detrás de el algo nerviosa. Otra vez sería regañada por su profesor.

impossible, teacherDonde viven las historias. Descúbrelo ahora