Namjoon y Jimin construyeron un lindo hogar hace diez años, en él crecieron lindos cachorritos.
Jimin está satisfecho con lo que tiene pero Namjoon está aburrido del mismo estilo de vida así que decide cambiarlo, aunque esto afecte a su familia.
Uni...
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5 años después
En muchos hogares la tranquilidad abundaba en los más mínimos rincones, el hogar de Jimin no era uno de esos. Gritos y risas era lo que habitaba en su hogar.
— ¡Papá, Seokjin tomó mi x box! —gritó Jungkook desde su habitación.
— ¡Yo se lo pedí, papá! —respondió el acusado.
Jimin comenzaba a perder la paciencia. Criar a sus dos adolescentes era más difícil de lo que imaginaba.
— ¡Los quiero a ambos en la sala! ¡AHORA!
Y en cuestión de segundos ya estaban sentados y muy bien portaditos.
—Papá...
Suspiró fuertemente, cansado de que sus hijos pelearan como si no hubiera un mañana.
Seokjin cumpliría quince años en unos meses y Jungkook ya tenía doce, criarlos no había sido muy fácil, pero los amaba de cualquier manera. Jimin ya tenía treinta y dos años, sus fuerzas disminuían conforme el tiempo pasaba.
—Chicos, ya no son pequeños... por favor, dejen de pelear —pidió cansado.
—Lo sentimos —hablaron los alfas al mismo tiempo.
Se fueron dejando a un Jimin agotado.
— ¡Papá llegó! —gritó Jungkook desde la cocina.
—Amor, ya llegué —la voz de Jaebeom resonó en toda la casa.
Con el tiempo, los cachorros habían tomado a Jaebeom como su figura paterna y comenzaron a llamarlo "papá". No volvieron a saber nada de Namjoon, no volvió a escribirle ni a llamarlo.
—Estoy en la sala —respondió Jimin con voz cansada.
Poco a poco logró ver la figura de su espectacular esposo. A pesar de que Jaebeom ya tenía treinta y seis años estaba muy bien conservado y en forma.
—Mi amor, vengo agotado ¿Me puedes abrazar? —soltó el maletín y se acurrucó con su omega.
—Me es difícil entender que tienes treinta y seis años y no ocho —sonrió divertido, recibió quejido como respuesta.
— ¿Qué tal tu día hoy, mi cielo? —preguntó ignorando el comentario anterior.
—Seokjin y Jungkook volvieron a pelear por el x box —suspiró exageradamente.
