Obsession | HyunLix

15 | Sigue Bailando

Invité a los chicos a quedarse en mi casa el viernes, ahora más que nunca, quería tener Bang Chan de cerca.

¿Como dormí esa noche?

Tranquilos, más que bien. Pensé unas cuantas veces en mirar su celular, tenía eso en la cabeza todo el día, como iba hacerlo, pero descarté la idea, no soy así.

Vigilaba sus acciones, se le veía normal, como siempre. Será mejor que no levante sospecha, al menos de mi lado.

—Buenos días, debemos ir al gimnasio— agito el colchón inflable donde dormían los chicos. —¡Ya levántense de ahí!— exclamo al no recibir respuesta.

—Agh relájate, Lix, son las ocho de la mañana, tenemos tiempo— dice Bang Chan con voz ronca.

—Son las once, Bang Chan— menciono. —Ayer dijiste que iríamos y no puse mi despertador temprano para quedarme viendo como dormías.

Este se levanta de mala gana sacando el edredón de encima, agita lentamente a Jeongin, esté suelta un quejido igual.

Luego de un desayuno rápido de yogurt y cereal, nos dirigimos al gimnasio que estaba cerca de la casa de mis padres.

Al llegar sólo habían unas tres personas allí, admito que me siento más cómodo cuando no está abarrotado de gente.

La verdad es que no era de hacer muchos ejercicios con las diferentes máquinas, unas que otras veces las usaba, pero la mayoría del tiempo solo iba a la caminadora y recorría varios kilómetros.

—Oye, Lix, ven aquí— ordena Bang Chan.

Bang Chan se encargaba de asignarnos las actividades, era como el entrenador, por tener más experiencia en el área.

—Tocan las pesas— este acomoda y quita varios discos de peso sobre la barra.

—Ojalá y pueda con todo eso— señalo la barra.

—No está pesada— este la levanta demostrándolo, le resulta fácil.

—Claro, para ti es como cargar unos cuantos libros nada más— rio.

—Nada de eso, solo ven y hazlo— suelta una risita.

Obedezco y me recuesto en el soporte de la máquina de pesas, Bang Chan saca su camiseta y se coloca detrás de la máquina, para ayudar con el peso.

—Bien, tómala y súbela, tengo mis manos aquí— dice.

Agarro con ambas manos la barra plateada y la levantó firme, tratando de soportar el peso.

—Eso es, entonces serán diez repeticiones dos veces y la última será de quince repeticiones.

Asiento. Empiezo bajando la barra a mi pecho y luego elevándola, frunciendo el ceño cada vez que la cuenta avanzaba.

—Perfecto, vamos de nuevo— dice.

Bang Chan acerca sus rodillas a mi cabeza desde su posición, teniendo la vista desde el final de sus pantalones cortos hacia arriba.

Miraba disimuladamente como se veía el contorno de su cuerpo recién trabajado, se notaba más de lo habitual. Sacudo un poco mi cabeza para esquivar los pensamientos y desviar la mirada hacia otra parte para terminar la segunda sesión.

—Muy bien, Felix, no te has quejado tanto en este día— Bang Chan se burla y se aleja. —Vamos tercera y última, no hay por qué parar.

Este vuelve a retomar la posición pero ahora se mantiene erguido, viéndose el contorno de otra cosa en sus pantalones, llevo la mirada al centro de la barra para solo concentrarme en lo que estaba haciendo.