Sunset Boulevard

Capítulo 48 - Confesión... por segunda vez

El estudio de su padre no era el mejor lugar para estar solo, así que Zhang Jue llevó a Chen Boqiao a su dormitorio.

El dormitorio de Zhang Jue era una habitación espaciosa en el lado oeste del tercer piso.

Cuando estaban cenando por la noche, el personal de la vivienda había entrado a ordenar el lugar. Habían sujetado las cortinas a los lados de la pared para que la suave luz del atardecer fluyera por la ventana. Había un alto ciprés justo al lado de la ventana del piso; el jardinero lo había recortado cuidadosamente y había colocado una luz paisajística entre las ramas para iluminar la habitación.

Había una cama sencilla contra la pared oeste de la habitación, y las sábanas y la funda de la almohada eran todas de color gris. En el otro lado de la habitación, había un pequeño sofá junto con la mesa de centro y un pequeño armario. El peluche de gato que Zhang Jue había sacado del compartimento oculto de su maleta estaba apoyado en el armario.

Chen Boqiao lo vio inmediatamente al entrar. Girando la cabeza, sonrió a Zhang Jue. "Me preocupaba que no lo encontraras".

Zhang Jue observó cómo Chen Boqiao se acercaba al armario y lo recogía. "Al principio no lo hice".

Zhang Jue sólo podía ver el perfil de Chen Boqiao desde donde estaba, y miraba el juguete como si estuviera comprobando su bienestar. Sus dedos alrededor del peluche eran delgados, pero fuertes desde los nudillos hasta la punta de los dedos.

"Y estaba aplastado cuando lo saqué", le dijo Zhang Jue.

"Ya veo". Chen Boqiao se sentó y frotó el pulgar contra la brillante nariz de plástico del juguete. Miró a Zhang Jue. "La maleta estaba demasiado llena, no encontraba otro sitio donde ponerlo".

Zhang Jue pensó en cómo se aplastó el peluche cuando se deslizó fuera de la maleta, e insinuó a Chen Boqiao: "Si estaba tan llena, podrías no meterlo".

"Podría", dijo Chen Boqiao, enarcando una ceja, "pero algunas personas lo pensarían demasiado".

La insinuación de "algunas personas" no fue tomada, pero no se molestó. Se quedó junto a la puerta y miró a Chen Boqiao desde la distancia. No pudo evitar fruncir los labios y sonreír tímidamente. Chen Boqiao levantó la barbilla hacia Zhang Jue y dijo la frase que había utilizado muchas veces antes: "Ven aquí".

Zhang Jue se dirigió hacia él, y colocó su brazo sin apretar alrededor de la cintura de Zhang Jue. Tiró de Zhang Jue hacia su regazo y lo miró. Miró fijamente a Zhang Jue durante unos segundos y le explicó en voz baja: "No es que se destruya después de ser aplastado. Después de un tiempo volverá a tomar forma".

"Estaba pensando", miró tranquilamente a Zhang Jue, "Zhang Jue se había armado de valor para hacerme un regalo, si tuviera que esconderlo él mismo, sería demasiado triste".

El brazo de Chen Boqiao alrededor de Zhang Jue se tensó, por lo que Zhang Jue se inclinó y cerró los ojos.

Chen Boqiao entrelazó sus manos. Las yemas de sus dedos acariciaban el dorso de la mano de Zhang Jue, trazaban sus venas y se cerraban alrededor de la mano de Zhang Jue como si fuera un preciado tesoro.

Los labios de Zhang Jue estaban húmedos por los picotazos de Chen Boqiao, y sentía que su ritmo cardíaco fluctuaba. De repente, el cuello del jersey que le cubría el cuello se apartó. La mano de Chen Boqiao en su espalda se había posado en su cicatriz antes de que se diera cuenta, dibujando un patrón con la punta del dedo desde la cicatriz.

La herida de Zhang Jue se había curado, pero aún no estaba preparada para la eliminación de la cicatriz. La cicatriz medía unos cinco centímetros y se extendía por la nuca junto con los puntos de donde estaba la sutura. Zhang Jue no podía verla por sí mismo, pero por la reacción de su madre, supuso que era espantosa y fea.