Complemento 1° [Minjeong | Terminada]

CAPÍTULO 16

3 horas antes.

Dos cuerpos tan unidos por las sábanas de esa habitación.

Dos corazones latentes al tenerse cerca.

¿Por qué cuando todo se siente tan real, el sueño comienza a desmoronarse?

[...]

Minho siempre tuvo un sueño, y era el despertar junto a la persona que llegase a amar en un futuro, quien le enseñara algo que nunca creyó posible en su corazón.

Por su parte, Jeongin siempre soñó en quedarse en cama sin hacer nada, junto a aquella persona a la que amase, para mirarla por mucho tiempo. Quedarse para siempre de esa manera.

Y aunque ninguno creyó que esto se hiciera realidad, ahora, los dos están sonriendo luego de levantarse, viéndose el uno al otro, sin creer que sea su sueño más.

Porque simplemente sus sueños se han hecho realidad, cuando al recordar, el día anterior aún pueden sentir las consecuencias de su entrega total. Cuando pueden recordar los besos que se dieron en medio de las luces de la habitación que se encendieron en caso de emergencia.

Pueden recordarlo todo, porque las evidencias los delatan drásticamente sobre todo su cuerpo.

En el dolor de cintura del menor.

En los chupetones en ambos.

En la mordida en el hombro del mayor.

Ha sido como jamás lo hubiesen imaginado, aún cuando parezca que dos hienas salvajes hubiesen poseído sus cuerpos. Pero no es, y tal vez, aunque la evidencia diga lo contrario, ambos se divirtieron conociendo cada rincón del otro de la manera más delicada como placentera posible.

Placentera para los dos.

Terminando como ahora, con el menor apoyado debajo de uno de los brazos del mayor, mientras éste baja su mirada y lo ve tan enamorado. Tanto que la melodía más romántica comienza a fluir sin pensar sobre sus oídos, sobre su corazón, en su piel, relajando cada vez más el ambiente que ambos comparten.

Dos corazones, dos ritmos tan diferentes pero a la vez, tan similares.

El amor, de dos amantes.

[...]

Jeongin: ¿Por qué me miras así? -sonríe y siente que si lo sigue mirando de esa manera, su rostro seguirá estando tan rojo como la última vez.

Que si lo sigue viendo, siente que recordar todo, es como un cuento de hadas, pero también lo más vergonzoso que ha hecho hasta ahora, en una buena forma.

Aunque está bien, porque ha sido él.

Minho: ¿Por qué no lo haría? ¿Por qué no miraría a la persona que amo?