𝑨𝑵𝑶𝑻𝑯𝑬𝑹 𝑳𝑶𝑽𝑬, 𝚓𝚊𝚜𝚙𝚎𝚛 𝚑.

xx. Sick game.

CAPÍTULO VEINTE | JUEGO ENFERMO

STELLA MIKAELSON

—¡Mierda! ¡Mi coche! —refunfuñó Jasper molesto porque su coche estaba cubierto de barro después de que llegamos al claro donde iban a jugar los Cullen.

—Tienes suerte de que aún esté de una pieza. —Emmett se burló jugando con un bate de béisbol.

—¡Vaya! No seas así, mayor. —lo jalé en un abrazo.

—Estaré mejor si me das un beso. —comentó y yo sonreí antes de sellar nuestros labios.

—¡Mira papá que cabrón! —Emmett señaló y escuché reír a Esme y Carlisle.

Jazz envolvió sus brazos alrededor de mi cintura mientras nuestras lenguas bailaban un hermoso vals en nuestras bocas. Poco a poco rompimos el beso y el empático aún me robó muchos besos antes de ser interrumpidos por la brisa que traía el fuerte olor de la humana.

—Va a ser un día largo. —refunfuñó el mayor por lo bajo y yo sonreí contra sus labios.

—Intenta distraerte con el juego. —traté de ser optimista mientras usaba mi magia para limpiar su auto nuevamente. —Mira tu coche. —él me miró confundido pero obedeció, sus ojos se abrieron como platos y una sonrisa apareció en su rostro.

—¿Cómo lo hiciste? —preguntó.

—Soy una hechicera. —recordé, sintiendo la alegría invadir mi pecho.

—¡Eres increíble! —exclamó rodeando mi cintura con sus fuertes brazos y dándome vueltas por el campo haciéndome reír.

—¡Jazz! —grité sonriendo y me robó un beso.

—¡Es la hora! —anunció Alice y el mayor me bajó suavemente.

Jazz se despidió con un beso antes de correr emocionado posicionándose en su lugar.

Corrí a una velocidad sobrenatural hacia Katherine que tampoco iba a jugar, Esme estaba al lado del humano que se suponía iba a ser el juez del juego. Jasper recogió el bate de béisbol y lo hizo girar hábilmente, resaltando los músculos de su camisa mientras mantenía una expresión seria en su rostro.

Este hombre es impresionante.

Alice se posicionó y lanzó la pelota en dirección al rubio quien la golpeó con precisión provocando un ruido atronador ya que la pelota golpeó el bate en el mismo momento en que el trueno cortó el cielo camuflando el estallido.

—¡Vamos Jazz! —grité emocionada animándolo.

El mayor soltó el bate y corrió a una velocidad sobrenatural hacia otra base en el mismo momento en que Emmett salió corriendo tratando de alcanzar la pelota, en menos de dos segundos Jasper había llegado a la base y anotó un punto para su equipo.

—¡Bien hecho, mi amor! —exclamé emocionada en español mientras me abrazaba por la espalda.

—Así inflarás aún más mi ego. —comentó divertido besando cariñosamente mi cabello haciéndome sonreír en sus brazos.

El juego continuó normalmente con Katherine y yo burlándonos de Damon por resbalar y caer en un charco de agua, sería trágico si no fuera cómico. Rosalie miró a la única humana en la habitación solo porque existe, en cierto modo entiendo a la rubia ya que solo quiere que su familia esté a salvo.

—¡Alto! —ordenó Alice sacándome de mis pensamientos alarmando a todos.

—¿Qué pasa, hija? —preguntó Carlisle acercándose a la vidente.