Love Story [Ethan Torchio] -TERMINADA-

Capítulo 36

—Muy bien, me supere —una sonrisa se formó en sus labios, lo imite—. ¿Cómo has estado tú Paulette?

—Que te digo Andrés todo a tenido sus altibajos, pero ahora estoy tratando de crear otro espació de trabajo.

—No me digas que dejaste de trabajar con Ferreyra —asentí apretando los labios—. Vaya, eso no me lo esperaba, sin embargo me alegra encontrarte, yo te puedo ayudar.

Una sonrisa de esperanza alumbró mi cara.

—Gracias, por cierto ¿desde cuándo trabajas aquí?

—Hace un buen tiempo estaba buscando lo mismo que tú ahora y está compañía me acepto. Soy un manager.

—Estás ejerciendo eso me alegra.

Andrés era alumno en la academia donde estudiaba junto a Laura, ambos eran compañeros y ella fue quien me lo presento.

—¿Te acompaño? ¿dónde te estás quedando?

—En el hotel "Rose".

Soltó unas pequeñas risas.

—Siempre los lleva a ese hotel, ven yo te llevó.

Camino conmigo hasta la salida y luego se acercó a un auto azul donde nos subimos.

—¿Y desayunaste? —pregunto encendiendo el motor

—Sí —mentí, quería ir al hotel ya

No sabía cómo comportarme con Andrés, para mí era un desconocido o al menos eso sentía.

—¿Y qué tan bien es esta compañía? —trate de romper el hielo

—Muy buena, sabes yo me ocuparé de ejercer como manager a la que gane el concurso.

—Woou que bien, ¿y que me aconsejas?

—Si quieres entrar haz lo que te digan.

Lo mire por el rabillo del ojo confundida con sus palabras.

—Trataré de hacer lo mejor —mencione sonriendo, o más bien solo encorvado los labios hacia arriba

El transcurso al hotel se hizo eterno, él me hablaba de todo lo que había logrado con la compañía y cuánto se había superado, en otra ocasión me habría interesado pero ahora no tenía cabeza para ponerle atención, mi mente estaba perdida en el recuerdo de la imagen del chico de pelo largo jugando con Honey en la plaza de la Fontana di Trevi. Que hermoso recuerdo.

—Y llegamos —su voz me saco de mis pensamientos haciendo que me gire a verlo con los ojos abiertos

—Ah, si gracias —dije con nerviosismo abriendo la puerta de copiloto

Tal vez debía ser más cortes con él, después de todo ahora se estaba portando amable.

—¿Quieres pasar? —pregunte cerrando la puerta del auto

—Claro.

Aseguro su auto y nos adentramos en el edificio, luego de registrarme nos dirigimos a mi habitación.

Sentí como se me retorcieron las tripas por el hambre pero trate de disimular.

Andrés se sentó en la cama y yo solo lo mire desde la puerta con las manos dentro de los bolsillos de la chaqueta y con los dedos acariciaba el contorno de mi teléfono.

—Te seré sincera, no se de qué hablar —confese tímida

—Descuida estamos en las mismas.

—Porque no me sigues contando sobre qué hiciste estos meses.