Love Story [Ethan Torchio] -TERMINADA-

Capítulo 54

Había entrado a la habitación de hotel que compartíamos y cuando estaba por cerrar la puerta me apresure a empujarla con todas mis fuerzas hasta lograr entrar.

Cerré la puerta detrás de mí. Recorrí la pieza con los ojos, Ethan se había alejado y estaba de espaldas. 

Quería hablar pero las palabras se me quedaban en la garganta e inconscientemente las lágrimas comenzaron a rodar por mis mejillas.

—Eth...

—¿Es verdad? —escuche que dijo. Se giro a mí, tenía los ojos un poco rojos—. ¿Estás embarazada?

Asentí bajando la cabeza.

Cuando la volví a levantar lo ví sentado en el borde de la cama apoyando sus codos sobre las rodillas y sosteniendo su cabeza.

Pase saliva y me acerque con cuidado.

—Lo siento —me arrodille frente a él—. Quise decirtelo pero no me atrevía.

Mí voz era apenas audible por más que tratara de hablar más fuerte no sé escuchaba.

—No te atrevías a decirme que estas embarazada mientras yo pensaba que todavía quieres algo conmigo.

Soltó su cabeza y bajo sus mano, las tome envolviendolas con las mías dejando un beso sobre estas.

—Quiero algo contigo —lo mire con los ojos llenos de lágrimas—. Eres lo mejor de mi vida.

—¿Y él padre del bebé? —solto mis manos—. No me amas tanto como dices para llegar a entregarte a ese hombre y tener un hijo.

Habla maldita sea Lilianne, cuéntale la verdad.

No podía hacerlo. Andrés tenía razón era una estúpida y una débil. Solo lloraba esperando a que se apiade de mi.

—Por favor discúlpame —lloraba con las manos tapando mi cara

Él se quedó callado, mis sollozos eran lo único que se podía escuchar en la habitación.

De repente toques en la puerta resonaron.

—Ethan soy yo, Victoria, abre la puerta —decía la voz de la rubia en tono serio y firme al otro lado de la madera

No dijo nada y obedeció a su amiga yendo a abrir la puerta mientras yo aún estaba en el suelo con las manos sobre mi cabeza.

—Paulette —escuche los pasos de Vic acercándose a mí en el suelo y luego sus brazos rodearme me hizo romper en más lágrimas—. ¿Estás bien? ¿le dijiste?

Susurraba con sus manos en mis mejillas.

Negué.

—Vic por favo...

—Va a dormir conmigo esta noche, es lo mejor —hablo firme interrumpiendo a su amigo—. Vamos.

Se puso de pie para luego ayudarme a hacerlo. Quiso caminar pero la detuve.

—Me voy a quedar —mencione

—¿Estás segura? no debes contárselo si no es lo que quieres —se acercó hablando bajo

—No quiero que haya problemas —respondí—. Voy a estar bien..

Le regale la mejor sonrisa que me podía salir y me la devolvió.

—Está bien, cualquier cosa llámame.

Asentí y se alejó a caminar donde su amigo mientras yo me metí al baño de la habitación para mojarme la cara.

Mi reflejo en el espejo era horrendo, el maquillaje corrido y los ojos rojos me veía demacrada. Tomé un paño húmedo y limpie el maquillaje arruinado.