capitulo 21

19 1 2
                                    

Wally y Darien llegaron a la casa que estaba vacia y perfectamente arreglada. Cada cosa en su lugar. Apenas ahora que veía la casa como estaba arreglada en su niñez se dió cuenta de que no habían muchas diferencias con su actual decoración. Muchas de las fotos, maceteros y muebles estaban adonde los recordaba

-te traigo algo para cambiarte- dijo Wally antes de ir a su habitación mientras que Darien miraba su alrededor más detenidamente.

Extrañaba su casa y su infancia tranquila. Extrañaba su familia pero podia soportarlo con tal de ayudarlos

-papá, papá...- la puerta se abrió dando paso a una mujer con tres niños que la seguian como polluelos a mamá gallina

-niños quedense atras- la mujer alarmada por el desconocido en su casa jaló al mayor de su hijos hacia atras ya que como siempre quiso correr a abrazar a su padre.

Al ver la mujer frente él Darien sintió las lágrimas picar sus ojos y la necesidad de ir a abrazarla pero esa mirada fria era como una apuñalada a su corazon herido.

La pelinegra estaba lista a defender a sus hijos mientras ellos se escondían detras de sus piernas

-hey hey, calmados- Wally apareció con un destello amarillo interponiendose entre su esposa y el chico

-está bien. No es un peligro. Está todo bajo control- intentaba calmar a su esposa e hijos el velocista.

El adolecente miró a los niños. Esos niños eran él y sus hermanos de pequeños. Le daba cierta ternura ver como todos tres se escondían tras las piernas de su mamá agarrandose de su pantalón mientras lo miraban con sus ojos curiosos.

Rachel se calmó y suspiró

-niños vayan a lavarse las manos- les dijo a lo que los tres obedecieron

-toma, cambiate. La cena estará lista en poco tiempo...la habitacion de huéspedes está al fondo y a la derecha- dijo Wally dando a Darien ropa limpia

-gracias- el adolecente se fue dejando a los mayores solos

-quien es?- preguntó la mujer

-es solo un chico que necesita ayuda- dijo, dudando de contarle todo

-por favor dime que tienes más información sobre él-

-es Darien. Él es nuestro hijo pero llegó desde el futuro. Aún no me contó lo que pasará pero le prometí que lo ayudaria-

-es...en serio? Y puedes estar seguro de que lo que dice es cierto?-

-él no sabia lo que había pasado ademas la prueba de ADN confirma que es nuestro hijo...él tiene mi anillo y sus ojos son exactamente como los de Darien. Se que no son exactamente pruebas que escluyan que esté fingiendo y que traerlo a la casa fue arriesgado pero creo que está diciendo la verdad. No te enojes. Se que debi de hablarte antes...-

-hey, tranquilo, no te angusties Wally, no estoy enojada y puedo entender como te sientes. Solo me asusté. No tengo problema con que se quede...pero solo si tu haces lo que yo quiera- dijo lo ultimo con una sonrisa traviesa.

Puso sus manos en las mejillas de su esposo para atraelo hacia ella y besarlo. El mayor la abrazó por la cintura profundizando el beso antes de alejarse un poco

-no necesita chantajearme, señora West. Haré lo que quieras con tal que me lo pidas- los dos volvieron a besarse apasionadamente hasta que escucharon a alguien toser para hacerse notar

-siento interrumpir pero...adonde puedo dejar mi traje?- preguntó muy nervioso y avergonzado Darien.

Los dos mayores se separaron avergonzados y con el rostro sonrojado

-si, claro...ven conmigo- dijo Rachel acompañandolo de regreso a la habitación de huéspedes

-mañana te compraré algo de ropa. La de Wally te queda demasiado grande...quieres acompañarme?- le preguntó tranquila

-si, me gustaria mucho- la mujer le dedicó una sonrisa amable a lo que Darien no pudo más.

Quebró en llanto y fue a abrazarla con fuerza confundiendo a la mayor quien solo trataba de consolarlo mientras él hablaba entre sollozos pidiendole perdón una vez tras otra

-tranquilo, se acabó. Ahora estás a salvo. No permitiremos que alguien te haga daño de nuevo- el heterocromatico solo la abrazaba más fuerte sin poder aceptar que su mamá habia muerto frente a sus ojos y que la mujer que abrazaba no lo conocía, que aunque tratara de hacerlo sentir mejor no podia porqué...ella aun no era su madre. Su madre no volvería.

Ahora su plan acababa de cambiar. Tenia que derrotar a la corte de los buhos en el pasado y en el futuro para asegurarse de que en esta linea temporal su familia no fuera destruida pero como podia derrotar alguien que tal vez aun ni siquiera existia? Como los encontraria? Y Emma? Ella como se encontraba?

Y mientras todo tipo de pregunta rondaba por su atormentada cabeza sintió la delicada mano izquierda de su mamá moverse de su espalda hasta su cabeza, acariciando su pelo. Las caricias eran suavez y lentas, exactamente como las recordaba, y cada que apoyaba su mano sentía tambien la ligera presión que hacia el anillo en su anular sobre su cabeza. Darien apretó con más fuerza sus brazos alrededor de la cintura de su mamá

-...odiame...por favor...- esa petición repentina la hizo sobresaltar

-no podría. Jamás podría-

-pero deberías...pude haber hecho algo pero no lo hice y tu...tu...y papá...-

-Darien, soy tu madre. No importa lo que hagas o lo que no hagas. Nada para mi o tu padre es más importante que tu y tus hermanos. No hay sacrificio que no hariamos para su bienestar. Todo lo que hicimos valió la pena si ustedes están bien-

-pero no lo estamos! Estoy solo y no se si podré salvar lo que queda de mi familia...no se que hacer...pero...tengo que hacer algo...soy el unico que pueda hacer algo...-

-no estas solo. Confia en mi. Te ayudaremos y resolveremos lo que pasa pero por el momento necesitas comer y reposarte. Mañana nos podrás contar lo que pasó-

Segunda GeneraciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora