capítulo 32

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-pueden usar la computadora. Tengan cuidado. Yo tengo que hablar con Alfred, regreso en un rato- dijo al llegar a la cueva.

Sin más Emma se sentó frente a la computadora conectando el disco duro y Darien tras ella. Enseguida se concentraron en su tarea. Neal se sentia un poco inutil en esa situación, no tenía la más minima idea de que hacer o como ayudar pues ese no era su campo entonces decidió ir con la mujer. Queria poder decirle algo, la verdad que ni siquiera él sabía que cosa pero algo se le ocurriría en el camino de allí hasta ella...o eso esperaba

-señora Wayne- la llamó.

Se sentia bastante incomodo llamandola de esa forma ya que llamaba 'señora' a la mujer de 37 años que conocia pero no sabia si le molestaría a ella pues era bastante joven, tenia 25 años.

La mayor se volteó a mitad del pasillo

-Neal, correcto?- preguntó al no estar segura de que ese fuese su nombre

-sí-

-en que te puedo ayudar?- le preguntó

-podria hablar con usted un momento?-

-claro pero no me llames de usted, apenas tenemos 9 años de diferencia-

-como te llamaria? Señorita?- la mayor puso una cara de confusión

-sí, eso suena raro si no viene de Alfred. Puedes llamarme simplemente Rachel...o llámame como más te agrade. Entiendo que no es fácil acostumbrarse a esta situación- el menor asintió

-bueno, quería hablar de Raph...-

-detente- le paró antes de que comenzase

-no, déjeme hablar- intentó imponerse

-no malgastes tu aliento y tiempo en este tema...-

-como puede decir algo así de su hijo?! Se por seguro que ama Raph entonces como puede menospreciarle de esta forma?!- se alteró enseguida

-oye oye no me malinterpretes! Lo que quería decir es que no tengo problemas en que Raph sea gay. Me da igual que salga con chicos o chicas...lo que no me da igual es el tipo de persona con el que salga. Te aseguro de que si llego a descubrir que solo quieres aprovécharte de mi niño entonces te buscaré en cualquier tiempo o universo te encuentres para hacerte la vida imposible- el menor tragó duro ante la amenaza

-pero...- siguió la mujer

-...no me parece tu caso. Quisiste hablar conmigo para no perjudicar a Raph, estás aquí queriendo ayudarlo. Incluso viajaste en el tiempo para hacerlo. Eres parte de la familia-

-entonces...está cómoda conmigo?- preguntó dudoso y confundido, no era lo que se esperaba luego de su reaccion

-sin duda. Porqué pensabas lo contrario? -

-bueno...por su reacción cuando me presente-

-lo siento, simplemente no me lo veia venir pero en serio no tengo problema alguno con esto. La vida sentimental de mi hijo no me concierne hasta que salga lastimado-

-tiene su sentido-

-tu estás comodo con nosotros?-

-si, bueno, no fue facil ignorar ciertas cosas pero hago lo que puedo-

-pasó algo?-

-no...nada. Absolutamente- dijo nervioso a lo que la mayor se inclinó, acercandose al rostro del menor poniendolo aun mas nervioso

-tu sabes que soy una detective y tambien una experta en leer el lenguaje corporal...además eres un mal mentiroso. Vamos, dime que pasó-

-se que todos ustedes aman a Raph...-

Segunda GeneraciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora