Capítulo 3: Kisin y Ah Puch (parte 1)

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Carlos Alberto Alba Garrido

Raúl Almaguer Avila



Ich Báalam

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Capítulo 3

Kisin y Ah Puch (parte 1)

1 INT. CATEDRAL DE LA NUEVA ESPAÑA. NOCHE

El extraño vestido como Charro negro y el Santo Inquisidor platican al interior del cuarto del padre.


Santo Inquisidor:

¿Dime, a qué debo el honor de tu visita, hermano?


Charro negro:

¿Es que acaso uno ya no puede venir a ver a uno de sus hermanos menores?


El Santo Inquisidor comienza a reír.


Santo Inquisidor:

¡Por favor, no me hagas reír! Como ya lo mencionaste, la última vez que nos vimos fue hace décadas, poco antes de que cayera la poderosa Ciudad de Tenochtitlán.


El Santo Inquisidor recuerda esa noche, en ese entonces usaba la apariencia terrenal de Pedro de Alvarado y formaba parte del ejército de Hernán Cortés.

CORTE A

2 EXT. BOSQUE. NOCHE

Flashback

Después de que Cortés da las indicaciones para el ataque a la Gran Ciudad de Tenochtitlán, Alvarado ve a lo lejos la figura de un hombre con rasgos indígenas, las sombras de la vegetación ocultan su rostro, lo que realmente llama su atención es su vestimenta, ya que usa ropas muy similares a la de los españoles, pero con la característica de que es en un tono negro, además de llevar botones de oro a lo largo de su camisa.

Los ojos de Alvarado brillan de un color rojo intenso, en ese momento observa que esa persona también es un ser de inframundo, ya que existe un halo de energía que lo cubre. Al acercarse a ese extraño ser, la luz de la Luna aclara su rostro por completo, revelando su verdadera identidad; en ese momento sabe que se trata de su hermano mayor, Ah Puch.


Ah Puch:

¡Qué gusto volver a verte, hermano!

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