Capítulo 07

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—Sólo compré cosas al azar, ¿está bien?

Hina dejó la bolsa de plástico y se quitó los zapatos en la entrada. Hasegawa, que la había estado esperando, parecía incómodo mientras estaba sentado en el sofá y tomando su café.

Fue un corto paseo desde el apartamento hasta el negocio más cercano. Hina había ido sola a hacer las compras.

—¿Cuánto salió? Le devolveré el dinero.

—No hay necesidad. Considérelo mi agradecimiento por dejar que me quede anoche en su piso y por ayudarme a limpiar hoy.

Mientras hablaba, Hina comenzó a cocinar. Mirándola mientras preparaba la tabla de cortar y el cuchillo, Hasegawa preguntó en un tono de curiosidad.

—¿Va a cocinar ahora? Estaba seguro de que acabas de comprar un bento.

—Pensé en comprar un bento para un almuerzo rápido, pero cuando vi los ingredientes de la comida, de repente ansié un Hot Pot*. Por lo mismo, voy a mezclar todo lo que compré en la sopa. Como es demasiado para una persona, apenas lo podría comer yo sola, pero siéntase libre de unirse a mí si quiere... ¿O quizás es del tipo que no le gusta compartir comida con los demás?

(*Hot Pot es una comita típica en varios países de Asia como Japón, China o Corea donde se deja hirviendo una sopa en medio de la mesa y en la que se introducen diferentes ingredientes para cocinarlos y comerlos en el momento.)

—... No es el caso.

Sintiéndose aliviada, Hina se rió ligeramente y comenzó a moverse. No mucho después, terminó de preparar los ingredientes y luego los colocó en la olla sobre la cocinilla.

—Qué gran olla...

Realmente me gusta el Hot Pot, ¿sabía? Cuando hace frío, invito a mi mejor amiga y lo cocinamos ocasionalmente.

—Oh, ¿has dejado que la gente entre en esa habitación?

—¡C-cuando eso sucede, siempre limpio previamente!

Hina bramó, luego Hasegawa dijo con voz burlona.

—Si limpiase bien desde el principio, no tendría que desesperarse por esconderlo, ya sabe.

—¡Lo sé, pero he estado tan ocupada! Además, tampoco me gusta mucho limpiar...

—Si saliera conmigo...

—¡No tengo intención de convertirme en su ideal!

Mientras lo decía, Hina eliminó cuidadosamente los restos no comestibles. Detrás de ella, Hasegawa preguntó con voz profunda.

—Entonces, ¿Qué tal ser mi novia?

—¡¿Qué?!

Al detectar la seriedad en su tono, Hina casi se cae en estado de shock.

—Si no tiene intención de convertirse en mi ideal, ¿Qué tal si se convierte en mi novia?

—¿Qué le hace pensar que...?

—Está invitando a un hombre a su habitación y le ofreció una comida preparada por usted. ¿No es normal tener un poco de esperanzas?

—¡No es así! ¡Esto es solo una muestra de mi gratitud!

Mientras sofocaba con vehemencia su malentendido, las mejillas de Hina se sonrojaron un poco ante la franqueza de Hasegawa.

Después de que terminó de cocinar, se sentó junto a Hasegawa nuevamente. Pero Hasegawa se movió para crear una pequeña distancia entre ellos.

E.S.P.P.U.H.P.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora