año sabático

🍃16🍃

Harry

Hace unos cuantos minutos que estoy mirando al hombre que dice ser Draco, no puedo reaccionar. No puedo haber estado en coma porque... porque... no.

Osea, yo recuerdo todo lo que pasó, eh, es imposible que haya estado en coma. ¿No?

—¡Harry maldito bastardo despertaste!

Al instante que escucho esa voz miro a la puerta, Draco se acerca y me abraza con mucha fuerza, murmurando que la próxima él mismo me va a chocar si me atrevo a cruzar la calle sin mirar a los lados.

No sé cómo reaccionar a todo esto.

No digo nada, incluso cuando me suelta y me sigue diciendo no sé qué sobre pelear con el diablo. Yo miro al hombre rubio, que me sonríe mientras cambia de forma y se convierte en un anciano de cabello blanco. Maldito. Como no lo vi, un estupido cambiaforma.

—¿Estás bien Harry?— Vuelvo a mirar a Draco, está usando la misma ropa con la que salió, solo que está empapado, y noto que tiene el pantalón manchado de sangre.

—Yo, eh, claro, solo me siento como que si me hubiesen atropellado, ya sabes, normal— murmuro tratando de hacer que sonría, en su lugar se muerde el labio inferior con fuerza, le sujeto la mano— ¿Vos cómo estás Draco?

—Ahora estoy mucho mejor Harry— me besa la frente, en ese instante siento el dolor de cabeza intensificarse, y me percato de algunas cosas. Como que tengo un yeso en la pierna izquierda, una venda cubriendo parte de mi cabeza, y el efecto de la anestesia debe estar pasando, porque me duele todo.

—Yo creo que deberías ir a cambiarte, te vas a enfermar si te quedas así.

El rubio me sonríe mientras niega y dice que no voy a cambiar nunca. Su teléfono suena, me dice que va y viene en cinco minutos a la casa de sus padres, y que va a volver con Mar, ya que elle está muy preocupade por ambos.

Sigo sonriendo mientras lo veo salir, cuando ya pienso que debe estar lejos, exhalo todo el aire retenido y cierro los ojos tratando de juntar fuerzas para fingir que no me duele nada.

—Oye joven, perdón por mi pequeña broma. Por cierto, me llamo Isahia.

El señor se baja de la cama en la que se acostó cuando llegó Draco (el verdadero Draco) y se sienta en una silla cerca mío, me mira curioso.

Yo a él también, siento que lo conozco. Pero no sé de donde.

—Tu novio es muy afortunado Harry— suspiro al escucharlo, no sé que me trata de decir. Ahg, esta gente mayor que habla sabiamente.

—No sé porque lo dice señor. Pero no es mi novio.

Isahia ríe al escucharme mientras murmura algo semejante a 《estos jóvenes de hoy en día》

—Tú salvaste a mi esposa durante la guerra, ella tenía cabello azul y llevaba un vestido con flores blancas el día que la salvaste. Su nombre era Daisy.

Recuerdos de la guerra vuelven a mí a penas él la nombra, pero al escuchar el nombre de la mujer, todo parece detenerse. La veo, ella está tendida sujetando una grabadora, su cabello es azul que hace resaltar su piel negra, y su vestido con delicadas flores blancas está cubierto de sangre, sangre que sale de ella. La quiero salvar, lo puedo hacer, aunque me llevaría muchísimo poder. Pero ella se niega, me dice que solo quiere ver el cielo sin sentir dolor, y que quiere hablar con alguien. Entonces me limito a hacer que el dolor se vaya, mientras hablamos. Tiene esposo, él está en un viaje de negocios en el extranjero. Ella tiene el don de transportar cosas, me dice que la grabadora se la va a enviar a su esposo. Luego me pide que la deje sola.