La normalidad de Emily

Esto es maravilloso.

Un silencio las arrolló mientras caminaban por el parque, evitando volver a encontrarse con cierta pareja que andaba merodeando por allí.

La de tez atezada se quedo en silencio, puesto que seguía pensando en lo que había ocurrido minutos antes; como Caleb trataba a Hanna, y como ésta se comportó ante la presencia de Alison. Y también, en como tan osadamente dio Ali a entender que quería algo más con ella. Mientras que la rubia no quería pronunciar palabra alguna, ya que creía que Emily se había molestado por lo ocurrido anteriormente.

Estuvieron sin hablar por varios minutos, hasta que una de ellas no aguanto más.

 ̶ Perdón. ̶ Soltó sin mas Alison al no poder soportar más la incómoda situación en la que se encontraban.

La morena, al no saber que era lo que ocurría, ya que estaba embobada en sus pensamientos, la miro frunciendo las cejas. ̶ ¿Por-por qué pides perdón?.

 ̶ Siento lo de antes, Em. Yo no quería ser imprudente, es solo que no me aguante. - Dijo apenada la ojiazul tocándose la nuca con la mano libre.

 ̶ ¿Tú te estás disculpando por lo que le respondiste a Caleb?  ̶ Pregunto la morena con un color carmesí en sus mejillas.

 ̶ Sí. Yo sé que fui osada, pero-

 ̶ Me gustó tu respuesta - La interrumpió la morena. ̶ Me gusta tu respuesta aún. ̶ Prosiguió todavía con la cara sonrojada.

El rostro pálido se iba iluminando cada vez más mientras las palabras de los labios de Emily salían. La rubia se sentía sumamente satisfecha ahora por haber dado esa respuesta al chico.

 ̶ Es bueno saber eso. ̶ Sonrío tan ancha mente que sus mejillas dolieron.

 ̶ Es bueno saber que te parece bueno saber eso. ̶ Respondió la morena en tono juguetón.

 ̶ Ahora que por fin aclaramos eso.

 ̶ Que tú aclaraste eso. ̶ Recalcó Emily.

 ̶ Está bien. Ahora que yo aclare eso  ̶ La rubia tiro traviesamente hacia abajo su mano, la que tenía sujetándose con la de la morena, para que se ladeará, pero provocando algo más que eso, ya que ésta, se encontraba inestable y, cayó al suelo. ̶ Yo, yo lo sien  ̶ No alcanzo a terminar la frase y las carcajadas ya estaban saliendo de su boca.

Emily, que ahora estaba en el piso, levanto su mirada para ver como la rubia se reía de ella. ̶ Tú, Alison DiLaurentis, me las vas a pagar. ̶ Termino de decir sin poder mantener su rostro serio.

 ̶ Fue. . . Fue sin que. . . Querer  ̶ Le era sumamente dificultoso hablar a la ojiazul porque no podía parar de reír.

 ̶ Y para colmo te burlas de mi.

 ̶ Está bien. . . está bien. Yo debo. . . Debo parar de reír. - La rubia tomo una respiración profunda y siguió hablando. ̶ Te ayudo. ̶ Prolongó su brazo con dirección a la chica en el suelo y ésta aceptó, pero no para pararse sino que para dejarla también tendida a su lado.

 ̶ Esto no es justo. ̶ Dijo Alison aún riendo.

 ̶ Nada es justo en esta vida, Blondie. Además no puedes ser tan ingenua.- Sonrío maliciosamente satisfecha la morena.

 ̶ ¿Tú, tú acabas de llamarme Blondie?  ̶ Dijo con una mano en el pecho Alison, imitando un tono ofendido.

 ̶ ¿Es enserio? ¿Te acabo de botar y tú te fijas en como te llame? ̶ Rio Emily.