Libro de One Shots con los personajes del manga y anime Haikyuu.
En su mayoría los os se posicionan después del timeskip, lo que quiere decir que la mayoría de os contienen spoilers del manga.
Sin nada más qué decir... Espero que disfruten de su lec...
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Hana y Atsumu, cinco años de edad.
—Atsumu echó a todos del parque de diversiones y ahora tiene los juegos para él solo —lloriqueó Kira—. ¿Podrías decirle algo? Creo que lo conoces.
Oh, Hana deseó no haberlo conocido, pero los hermanos Miya eran sus vecinos y sus madres eran amigas. Osamu era callado y era más fácil de tratar, pero Atsumu era un niño insufrible que se creía el rey del mundo.
La niña caminó hasta el área del parque dentro del jardín de niños. Atsumu reía divertido mientras Osamu sólo le miraba sentado en el columpio.
—Atsumu —Hana se para frente a él.
—Ay no, ¿por qué vienes molesta?
—Deja que los demás jueguen —ella le pide con la poca paciencia que se puede tener con alguien como Miya Atsumu.
—No —él contesta.
—Atsumu, el parque no es sólo tuyo.
—Lo sé, lo comparto con Osamu y también puedes venir si quieres —Atsumu se encoge de hombros esquivando la mirada de la que consideraba su única amiga.
—Atsumu, los demás están llorando.
—Sí, y se ven feos. Pero tú puedes quedarte, así que deja de enojarte.
Hana y Atsumu, ocho años de edad.
—Voy a vencerte, renacuajo —Hana ríe casi diabólicamente.
Atsumu ríe con más ganas mientras se prepara para la carrera de relevos en las olimpiadas de la escuela.
—Claro que no —Atsumu la enfrenta—. No perderé contra una niña.
—¿Tienes miedo, Tsumu?
La cara de Atsumu se enciende mientras gira en dirección contraria a Hana.
—No me llames Tsumu aquí, tengo una reputación, ¿sabes?
—Oh, cállate.
Por supuesto que ganó Hana y el equipo de las niñas. Atsumu lucía bastante descontento con los resultados y Osamu sólo le decía que debía calmarse porque todos sabían que Hana era la mejor corriendo en el curso, y era más alta.
Atsumu declaró que ese era el peor día de su vida, porque después, a la salida de la escuela, se le presentó el monstruo de sus pesadillas.
—No voy a cruzar por allí —Atsumu declara.
—Bien, me voy solo a casa —Osamu se encoge de hombros y sigue caminando.
Atsumu mira al animal estancado en medio de la calle y traga saliva. La odia. Odia su color, su textura, él odia las ranas. No quiere cruzar por allí y menos cuando la rana le mira y su pecho diminuto se mueve dejando escapar un sonido horrible.
